¡®Perdidos¡¯| Diario de la segunda semana de cuarentena infantil sin paternalismos
Por primera vez, saludamos a los vecinos de ventana a ventana, aplaudimos juntos, y tambi¨¦n escuchamos su m¨²sica, queramos o no
Ya no s¨¦ ni qu¨¦ d¨ªa es y supongo que vosotros tampoco, si no ten¨¦is que salir a trabajar. La gloriosa ¨¦poca en que los ni?os iban al cole parece lejana, pero apenas llevamos dos semanas de cuarentena (m¨¢s el IVA de los d¨ªas a?adidos sin cole, que todos los padres lo sumamos). Las cifras de infectados y muertos por el coronavirus siguen subiendo. Han vuelto el fr¨ªo y las lluvias. Y ya nadie cree que solo nos queda esperar hasta mitad de abril.
Pero esto intenta ser una columna de humor paternal, as¨ª que vamos con la cr¨®nica semanal del encierro. Tras el desconcierto inicial, en estos d¨ªas ya nos sentimos como los protagonistas de Perdidos: toda nuestra vida ha cambiado de golpe, estamos atrapados pero nos consuela que al menos todos estamos igual (aunque por si acaso no mires los videos de famosos desde el jard¨ªn de su mansi¨®n), y si el humo negro no nos pilla de cerca, a ratos te lo puedes tomar como unas vacaciones impuestas que tambi¨¦n tienen su lado positivo.
Los vecinos de la escalera ya nos hemos unido en un chat com¨²n (s¨ª, otro chat m¨¢s con m¨¢s mensajes diarios, qu¨¦ bien) y ya van saliendo los Jack y Locke expertos en organizar la log¨ªstica para ayudarnos m¨¢s.
En este af¨¢n de sobrevivir juntos en la isla del coronavirus, los vecinos de la manzana tambi¨¦n se acercan al campamento. Por primera vez en a?os, nos saludamos de ventana a ventana, aplaudimos juntos, y tambi¨¦n escuchamos su m¨²sica, queramos o no.
Despu¨¦s de unos primeros d¨ªas de horarios cambiados y picar a todas horas, ya nos hemos organizado un poco para tener un amago de rutina. (Aunque si no la ten¨ªamos ¡°en libertad¡±, tampoco nos vamos a agobiar ahora m¨¢s, que ya estamos bien servidos de preocupaciones). Con nuestra hija seguimos su horario escolar, haciendo las mismas tareas: canci¨®n de buenos d¨ªas con todos los alumnos en c¨ªrculo (en este caso, con peluches y con nosotros, que ya parecemos repetidores), mirar el tiempo y anotarlo en una pizarra, hacer juegos y manualidades, lectura y dibujo, y jugar con sus amigas, v¨ªa videollamada.
Adem¨¢s, ya nos han coincidido el d¨ªa del padre y varios cumplea?os familiares con el confinamiento y lo hemos tenido que celebrar todo con multipantalla, conexiones pixeladas y una retah¨ªla de ¡°?qu¨¦? No se oye. Mueve el m¨®vil que no se ve bien, etc¨¦tera¡±. Planazo.
Pero lo que importa es estar juntos: mi mujer se qued¨® muy feliz con el circuito de sorpresas low cost montado por el piso y nuestra hija sue?a en voz alta diciendo que cuando cumpla 5 en junio podr¨¢ invitar a toda la clase. Si es posible celebrarlo en la fecha y fuera de casa, estaremos nosotros m¨¢s contentos que ella.
Y por cierto, los ¨²nicos que estar¨¢n contentos con esta situaci¨®n ser¨¢n los accionistas de Disney Plus, que no podr¨ªan haber elegido mejor su lanzamiento esta semana.
?nimos.
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