Cu¨¢l es el mejor material para hacer una mascarilla en casa
Por qu¨¦ las telas que mejor bloquean el paso del coronavirus no siempre son las m¨¢s adecuadas
Cuando el debate sobre si deber¨ªa generalizarse el uso de mascarillas a¨²n no est¨¢ resuelto, cobra fuerza la idea de que, en el contexto actual, siempre ser¨¢ mejor llevar una puesta que dejar la cara al descubierto: aunque las mascarillas quir¨²rgicas no evitan que quienes las llevan se contagien del nuevo coronavirus, son un obst¨¢culo para la transmisi¨®n del SARS-CoV-2 de las personas infectadas, pero asintom¨¢ticas, al resto de la poblaci¨®n. Y, como la escasez de los productos homologados hace que comprarlas sea una opci¨®n inviable por el momento, ya hay quien est¨¢ zurciendo su propia protecci¨®n. No es una excentricidad; los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en ingl¨¦s) han publicado las instrucciones para fabricarse una mascarilla en casa. Lo que no est¨¢ tan claro es el tipo de tela que deber¨ªa usarse para obtener la m¨¢xima efectividad.
"Evidencia cient¨ªfica no hay", dice la portavoz de la Sociedad Espa?ola de Salud P¨²blica y Administraci¨®n Sanitaria (SESPAS) Andrea Bur¨®n, "pero hay materiales que parece que funcionan mejor". Y cita un trabajo de 2013 que compara la efectividad de mascarillas caseras fabricadas con nueve tejidos comunes con la de las quir¨²rgicas. El estudio se llev¨® a cabo pensando en pandemias de gripe, pero "el coronavirus tiene un tama?o similar al del virus que causa esa enfermedad", por lo que Bur¨®n lo admite como una referencia v¨¢lida mientras no haya nuevas investigaciones. Seg¨²n los resultados del trabajo, los usados en las bolsas de aspiradora y en los trapos de cocina son los tejidos que tienen una mayor eficacia a la hora de filtrar el aire, mientras el lino y la seda son los que menos protegen. Pero Bur¨®n no apunta a ninguno de los dos materiales m¨¢s eficientes, y se decanta por el algod¨®n como el tejido probablemente id¨®neo (al tiempo que recalca que la eficacia de estas mascarillas no es total, que solo existe si su uso se combina con medidas de aislamiento social). ?Por qu¨¦?
Porque la capacidad de un material para filtrar el aire no es la ¨²nica caracter¨ªstica que hay que tener en cuenta a la hora de fabricar una mascarilla. La m¨¦dica, especialista en medicina preventiva y salud p¨²blica, enfatiza que la interacci¨®n con la cara tambi¨¦n es determinante. "Si el material es m¨¢s bien r¨ªgido, puede que el efecto de protecci¨®n extra se vea mermado porque deja m¨¢s espacio entre la piel y la mascarilla", explica. El algod¨®n no solo se ajusta bien a la forma de la cara sino que, adem¨¢s, no suele provocar problemas en la piel. Y como la efectividad aumenta con el grosor, siempre se puede reforzar doblando la tela en varias capas: Bur¨®n subraya que las mascarillas caseras deber¨ªan tener al menos dos o tres. De nuevo, si poner estas capas hace que la mascarilla se deforme y la tela se separe del rostro, puede ser preferible optar por otro tejido.
Por otra parte, y como es obvio, una mascarilla debe dejar respirar adecuadamente. Las bolsas de aspiradora y los trapos de cocina no permitieron hacerlo suficientemente bien en el estudio de referencia. "Encontramos que la funda de almohada [de 600 hilos por pulgada cuadrada] y una camiseta 100% algod¨®n fueron los materiales dom¨¦sticos m¨¢s adecuados para improvisar una mascarilla", dice el art¨ªculo, publicado en la revista Disaster Medicine and Public Health Preparedness. Y eso que, despu¨¦s de la seda y el lino, la funda de almohada fue el material menos eficiente a la hora de bloquear el paso de los hipot¨¦ticos virus.
C¨®mo elegir al trasluz la tela adecuada
Tanto la portavoz de la SESPAS como los CDC se?alan una camiseta 100% algod¨®n como una primera opci¨®n, aunque Bur¨®n advierte de que si est¨¢ demasiado desgastada puede no proteger suficiente. Lo mejor es decantarse por las menos usadas, y lavarlas antes de cortar la tela. En caso de duda entre varios tejidos, aconseja hacer una sencilla prueba que permite tener una idea de lo poroso que es un material. "Se pone contra la ventana o delante de una fuente de luz como una bombilla, y se fija uno en cuanta luz deja pasar. Cuanta menos, mejor".
La especialista no descarta que emplear elementos distintos del algod¨®n en una capa interior de la mascarilla pueda tener beneficios, tejidos como la franela u otros m¨¢s r¨ªgidos, situados en la zona central de la misma, donde no modificar¨ªa su contorno. De hecho, los CDC ofrecen una modalidad de mascarilla que no lleva costuras y que incorpora un filtro de cafetera ¨²nicamente en esta parte del dise?o.
En cuanto a la manera de lavar las mascarillas, la m¨¦dica opina que ponerlas en la lavadora a 60 grados con un detergente normal deber¨ªa ser suficiente. Teniendo en cuenta la situaci¨®n de confinamiento y que de una camiseta se pueden sacar varias mascarillas, lo ideal ser¨ªa lavarla tras cada uso, sobre todo si se ha humedecido, ya que se ha comprobado que los virus se mueven con m¨¢s facilidad en tejidos h¨²medos.
Por supuesto, hay que tener en cuenta que si se opta por una tela que encoja en la lavadora es posible que la mascarilla pierda su forma y, con ella, su eficacia. Y nunca hay que olvidar que dicha eficacia es relativa; la especialista advierte de que las mascarillas caseras son una soluci¨®n de ¨²ltimo recurso, de que solo tienen algo de eficacia si se cumplen a rajatabla las medidas de distanciamiento social y que uno puede verse enga?ado por una falsa sensaci¨®n de seguridad que hay que evitar a toda costa: "Cuando no hay m¨¢s remedio que acercarse a otros pueden ayudar, pero no hay que pensar que puedes reunirte con amigos o estar mucho tiempo hablando con otras personas por llevarla".
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