El a?o que los besos eran virtuales

Hagamos un viaje, aunque en estos d¨ªas de confinamiento por coronavirus sea un mero ejercicio mental. Nos vamos al sur de Suecia de paseo por un maravilloso bosque de hayas que la Fundaci¨®n Wanas llen¨® de obras de arte de creadores como Marina Abramovic y Yoko Ono. Avanzamos entre esculturas de ¨¢rboles met¨¢licos, misteriosas siluetas humanas y gigantes bolas rojas suspendidas en las copas. Y, de repente, un grito. ¡°Mamma¡±, se escucha una voz. Luego otra. Y otra. Y otra. Voces de ni?os y adultos, en tono dulce o divertido, pero tambi¨¦n con miedo, enfado, duda¡­ Una ¨²nica palabra. Multitud de mensajes. Se le ponen a uno los pelos de punta, cr¨¦anme. La instalaci¨®n sonora de la artista sueca Marianne Lindberg De Geer despierta una especie de reacci¨®n at¨¢vica incluso en quienes no son madres.

Hora de volver a aterrizar en el suelo de nuestra casa, el ¨²nico que pisaremos la mayor¨ªa mientras las estad¨ªsticas de la covid-19 no mejoren. Todo muy raro. Pero seguimos con las madres, porque el D¨ªa de la Madre tambi¨¦n promete ser raro. Sin besos ni abrazos, c¨®mo puede ser sino raro. Un apunte positivo: aunque sigamos en cuarentena el 3 de mayo (el primer domingo de ese mes es desde los sesenta el d¨ªa se?alado en Espa?a, pero en el resto del mundo hay otra veintena larga de fechas diferentes), las flores se pueden comprar online. Pero no se despisten, las colas virtuales son caprichosas y es imposible colarse. Los ni?os tambi¨¦n lo tienen un poco m¨¢s complicado, sin profesores que les organicen la manualidad de turno (la del D¨ªa del Padre la trajeron muchos a escondidas el ¨²ltimo d¨ªa de clase gracias a unos profesores previsores).

?Flores? ?Regalos? ?Entonces todo sigue como siempre?

Muchos llevamos estos d¨ªas separados de nuestras madres. M¨¢s cerca o lejos que nunca f¨ªsica, mental y emocionalmente. Algunos la llaman todos los d¨ªas para asegurarse de que no hay toses sospechosas. Podr¨ªa ser algo as¨ª: ¡°?Qu¨¦ tal est¨¢s?, mam¨¢. No est¨¢s saliendo a la calle, ?verdad?¡±. Otros llamamos mucho, pero no a diario, porque tantos consejos de salud y recetas para estar en buen estado f¨ªsico y mental no se pueden asumir ni materializar en 24 horas. ¡°Te he enviado una lista de Spotify con m¨²sica relajante. ?Est¨¢s comiendo bien?¡±. ¡°S¨ª¨ª¨ª¨ª¨ª, mam¨¢¡±. Tambi¨¦n los habr¨¢ que tengan a la suya sin muchas posibilidades de comunicaci¨®n, ingresada por Covid-19 en alg¨²n hospital, o, duele hasta imaginarlo, la hayan tenido que despedir estos d¨ªas, desde la lejan¨ªa, para siempre. Maldito virus. Otros la tendr¨¢n en casa, m¨¢s cerca que nunca, las 24 horas del d¨ªa.

Conclusi¨®n: nada sigue igual.

Pero ?qu¨¦ es ser madre? ¡°Madre: 1. Mujer que ha concebido o ha parido uno o m¨¢s hijos. 2. Mujer en relaci¨®n con sus hijos. 3. Madre considerada en su funci¨®n protectora y afectiva. 4. Mujer que ejerce de madre¡±, aporta el Diccionario de la Real Academia. Demasiado obvio. Pregunto a mis hijos. ¡°Madre son muchas cosas¡±, dice pensativo mi hijo de 8 a?os. ¡°Es esa persona que siempre est¨¢ all¨ª cuando la necesito¡±, aporta mi hija de 11. ¡°Es la forma m¨¢s honesta, incondicional y bestial de amor que existe¡±, a?ade una amiga psic¨®loga. ¡°Es quien siempre me acompa?¨® sin quejarse nunca de nada¡±, insiste otra amiga, que acaba de perder a la suya, y que dice que convertirse ella en madre cambi¨® por completo sus prioridades vitales.

Acudo a los chats de mamis del cole y, para no liarlo, pido que me digan qu¨¦ palabras o conceptos asocian a ser madres. Bing, bing, bing¡­ Al momento llegan mensajes sin parar (aqu¨ª una selecci¨®n): flexibilidad, generosidad, pluriempleo, hero¨ªna, cobijo, sorpresa, incertidumbre, felicidad, improvisaci¨®n, ternura, alegr¨ªa, enfado, instinto, miedo, sacrificio, amor, superaci¨®n, seguridad, cari?o, respeto, protecci¨®n, fuerza, ansiedad, risas, paciencia, l¨¢grimas, paz, adaptaci¨®n, aceptaci¨®n, aventura, apoyo, orgullo, constancia, reinvenci¨®n, locura, aprendizaje, valent¨ªa, vida, bondad, camino, familia, entrega, ilusi¨®n, hogar, v¨ªnculo¡­ Aquel ¡°son muchas cosas¡±, que parec¨ªa una respuesta para salir del paso, se revela digno de un fil¨®sofo. Quiz¨¢s haya tantas definiciones como madres. En Espa?a, unos 13 millones. ¡°Somos maravillosas¡±, concluye una mami en el chat ante semejante despliegue.

El psicoanalista Erich Fromm dijo que el amor de una madre es felicidad y paz, y a?adi¨® que no hay que ganarlo, ni merecerlo. Desde que los antiguos griegos rindieran homenaje a Rea, madre de Zeus, Poseid¨®n y Hades, o la activista estadounidense Julia Ward Howe impulsara el homenaje a estas mujeres en el siglo XIX, mostrar el cari?o a madres o quienes ejercen como tales es una tradici¨®n. ¡°Dulce como la t¨ªmida frescura / del sol de las regiones tempestuosas, / lamparita / menuda y apag¨¢ndose, / encendi¨¦ndose / para que todos vean el camino¡±, escribi¨® sobre su madrastra el poeta Pablo Neruda. ¡°Mamadre¡± la llamaba.

Entonces, ?qu¨¦ homenaje les hacemos en esta primavera rara de coronavirus? ?Un aplauso desde los balcones? ?Una videoconferencia familiar multitudinaria? Algo se nos ocurrir¨¢. ¡°Mam¨¢, pero el D¨ªa de la Madre es todos los d¨ªas¡±, dice mi hija, quiz¨¢s algo preocupada con el asunto del regalo. ¡°Tienes toda la raz¨®n¡±. ¡°Te quiero, mam¨¢¡±. Algunas palabras tienen superpoderes.