Bajo los palos y frente al virus
Mar¨ªa Sanju¨¢n es portera del Villarreal CF y lucha como enfermera contra la pandemia del coronavirus en el principal hospital de la sanidad valenciana. Hace unas semanas le aplaud¨ªan por sus paradas. Hoy, por ayudar a frenar a un rival invisible pero implacable.
Llega con las marcas del traje de astronauta. Un poco acalorada todav¨ªa. Con el pelo recogido en un mo?o, sus ojos claros y vivaces sobresalen por encima de la mascarilla. ¡°Vengo de una residencia y cuando los abuelitos me han visto vestida entera con el EPI, toda de pl¨¢stico, me han preguntado qui¨¦n era y si ven¨ªa del espacio. ¡®No, vengo a hacerles la prueba del bicho¡¯, les he dicho. Entonces han empezado a aplaudir, a silbar, a darnos las gracias¡±, explica Mar¨ªa Sanju¨¢n a las puertas del hospital La Fe de Valencia, donde trabaja de enfermera. Mueve sus brazos desnudos como si quisiera desentumecerlos mientras habla en un tono en¨¦rgico y seguro, controlado. Se nota que est¨¢ acostumbrada a dar ¨®rdenes. Al menos desde la porter¨ªa del Villarreal CF, equipo de la Segunda Divisi¨®n de la liga Reto Iberdrola de f¨²tbol femenino en el que juega. Con 22 a?os, esta valenciana apenas ha tenido tiempo de acumular experiencia antes de meterse de lleno en la lucha contra la epidemia del coronavirus. Pero se ve que est¨¢ donde quiere estar.
¡°La verdad es que siempre he sido muy echada para adelante y de ir a por todo lo que venga. Lo que ves a diario no es agradable ni mucho menos, pero si no nos lo tom¨¢ramos con car¨¢cter y resoluci¨®n, nos quedar¨ªamos en casa lament¨¢ndonos¡±, dice esta joven enfermera de atenci¨®n primaria, frente a la enorme mole blanca del hospital. Lo abandon¨® un par de horas antes para trasladarse a una de las residencias medicalizadas bajo el control de La Fe, el centro de referencia de la sanidad valenciana. De vuelta, se relaja un poco recordando sus inicios en el f¨²tbol, un deporte mayoritariamente de hombres. ¡°Empec¨¦ con seis a?os, b¨¢sicamente porque ten¨ªa un mont¨®n de celos de mi hermano, que jugaba. Al pobre lo ten¨ªa machacado. Jugaba con los chicos y enseguida me pusieron de portera, y ah¨ª me qued¨¦. Alguno se met¨ªa conmigo, hubo alg¨²n comentario de marimacho, pero nada. Mi colegio era religioso y, pese a las dificultades, me integr¨¦ bastante bien¡±, comenta.
Jug¨® con chicos hasta que se form¨® el equipo femenino del Colegio Alem¨¢n. Luego entren¨® con el Valencia CF, antes de defender las porter¨ªas del Albacete, Murcia y ahora del Villareal. Considera que sus fuertes como guardameta son el uno contra uno, como el de su admirado Iker Casillas, y las jugadas a bal¨®n parado. Destaca tambi¨¦n a la portera de la selecci¨®n espa?ola Sandra Pa?os y a?ade a Ca?izares y a Asenjo. Todos ellos mandan, como ella: ¡°Me dijeron desde ni?a que ten¨ªa que mandar y gritar a mis compa?eras y lo aprend¨ª pronto¡±.
Lectora de libros de historia, en especial de Alemania, desde que se qued¨® enganchada a la novela El ni?o con el pijama de rayas, de John ?Boyne, Sanju¨¢n reconoce a su madre, sanitaria, como modelo en su vida. La joven quer¨ªa estudiar medicina en un principio, pero no resultaba f¨¢cil compaginar los entrenamientos y los estudios y, adem¨¢s, obtener la nota que se precisa para acceder a ella. De modo que decidi¨® matricularse en enfermer¨ªa. ¡°Y no me arrepiento para nada. Al rev¨¦s. Ha sido un aprendizaje constante y una de las mejores decisiones que he tomado. Y acabar la carrera a curso por a?o tampoco fue f¨¢cil jugando al f¨²tbol¡±, se?ala. No duda en subrayar la importancia de jugar y trabajar en equipo: ¡°En el equipo de f¨²tbol somos una familia, te ves casi todos los d¨ªas, compartes habitaci¨®n, compartes todo; en el hospital y en una crisis sanitaria tan importante como la de ahora, que nadie pod¨ªa esperar, o estamos juntos formando una pi?a, o no podemos llevarlo¡±.
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