Nicarag¨¹enses en medio de una pandemia en Costa Rica
La pandemia ha hecho a¨²n m¨¢s evidente la desigualdad socioecon¨®mica y la discriminaci¨®n de la poblaci¨®n migrante de Nicaragua en su pa¨ªs vecino
En Costa Rica, la proporci¨®n del valor agregado producido por las personas inmigrantes es superior a su proporci¨®n entre la poblaci¨®n costarricense, seg¨²n la OCDE. La mayor¨ªa de estas personas son de origen nicarag¨¹ense. Al igual que en otros pa¨ªses, la pandemia ha hecho a¨²n m¨¢s evidente la desigualdad socioecon¨®mica y la discriminaci¨®n que existe en contra de la poblaci¨®n nicarag¨¹ense que habita en Costa Rica, a pesar de la interdependencia que existe entre ambos pa¨ªses y el papel fundamental que los nicarag¨¹enses desempe?an en la econom¨ªa del pa¨ªs.
Costa Rica es el principal destino para las personas migrantes, solicitantes de asilo y refugiadas nicarag¨¹enses. En el pa¨ªs viven alrededor de medio mill¨®n de nicarag¨¹enses que representan m¨¢s del 75% de la poblaci¨®n extranjera en el pa¨ªs. La mayor¨ªa cruzaron la frontera en busca de mejores oportunidades econ¨®micas y de vida, sin embargo, desde abril del 2018, como consecuencia de la crisis pol¨ªtica, la represi¨®n y la persecuci¨®n hacia opositores al r¨¦gimen de Daniel Ortega y su esposa ¡ªquien tambi¨¦n es vicepresidenta del pa¨ªs¡ª Rosario Murillo, cerca de 100.000 nicarag¨¹enses han llegado a Costa Rica en busca de protecci¨®n internacional.
La inserci¨®n laboral de las personas nicarag¨¹enses en Costa Rica tradicionalmente se ha dado en el sector informal del pa¨ªs. Se desempe?an principalmente en ocupaciones de baja cualificaci¨®n tales como el trabajo dom¨¦stico, la construcci¨®n, la agricultura, la seguridad. Aquellas personas que han solicitado refugio a ra¨ªz de la crisis pol¨ªtica suelen tener un mayor nivel educativo y les es muy dif¨ªcil volver a ejercer su profesi¨®n en Costa Rica.
Con la llegada de la pandemia, muchas personas nicarag¨¹enses perdieron su fuente de ingresos. Su ya precaria situaci¨®n de vida empeor¨® y las posibilidades de acceder a programas de asistencia humanitaria del Gobierno costarricense son muy limitadas o inexistentes.
Desde abril del 2018 cerca de 100.000 nicarag¨¹enses han llegado a Costa Rica en busca de protecci¨®n internacional
¡°Se han incrementado de manera considerable las dificultades econ¨®micas para solventar necesidades b¨¢sicas (pago de vivienda, alimentaci¨®n y art¨ªculos de higiene) y por ende la necesidad de brindar ayuda humanitaria (¡) Emocionalmente, la ansiedad, depresi¨®n, la ideaci¨®n suicida, la violencia, as¨ª como la muerte por covid-19 de familiares de las personas desplazadas que se encuentran en Nicaragua son las principales necesidades detectadas¡± afirm¨® Marisol Matamoros de la organizaci¨®n RET internacional.
El coronavirus lleg¨® a Costa Rica a inicios del mes de marzo. El pa¨ªs cerr¨® sus fronteras y despleg¨® un fuerte operativo fronterizo en la l¨ªnea lim¨ªtrofe con Nicaragua. El objetivo: tratar de evitar el ingreso de personas nicarag¨¹enses en condici¨®n irregular que pudieran portar el virus dado el manejo negligente de la pandemia por parte de Nicaragua. Esto contribuy¨® al incremento de la xenofobia. El Ministerio de Seguridad reporta m¨¢s de 15.500 personas rechazadas en puestos de entrada al pa¨ªs a la fecha.
El cierre de fronteras signific¨® tambi¨¦n, m¨¢s barreras para las personas solicitantes de refugio en Costa Rica, pues ahora solo pueden presentar su solicitud en puestos fronterizos, se elimin¨® la posibilidad de hacerlo en las oficinas de la Direcci¨®n General de Migraci¨®n y Extranjer¨ªa en San Jos¨¦ y se inhabilit¨® la l¨ªnea telef¨®nica por medio de la cual se sacaba cita. As¨ª pues, durante enero y febrero de este a?o, m¨¢s de m¨¢s de 3.200 personas de origen nicarag¨¹enses en promedio por mes solicitaron refugio en Costa Rica, y para mayo solo se registraron 14 solicitudes de nicarag¨¹enses, seg¨²n informaci¨®n de la Direcci¨®n General de Migraci¨®n.
Los operativos migratorios se han incrementado e intensificado tambi¨¦n a lo interno del pa¨ªs. En abril, la polic¨ªa y autoridades migratorias amenazaron con deportar a un grupo de refugiados y solicitantes de refugio nicarag¨¹enses en la zona de Upala, una comunidad cerca de la frontera con Nicaragua. Esta situaci¨®n fue denunciada por un grupo de organizaciones de la sociedad civil a trav¨¦s de un comunicado de prensa en el que condenaron las acciones y demandaron al Gobierno de Costa Rica el respecto del principio de no devoluci¨®n y el derecho a solicitar asilo.
Adem¨¢s, se han dado contradicciones entre las pol¨ªticas p¨²blicas y la puesta en pr¨¢ctica de estas. Al inicio de la pandemia, el Gobierno gir¨® una directriz en la que establec¨ªa que toda persona independientemente de su condici¨®n migratoria o si ten¨ªa o no seguro social iba a ser atendida en el sistema p¨²blico de salud si presentaba s¨ªntomas de covid-19. Sin embargo, el 29 de mayo anterior, el director regional de salud de la zona de Los Chiles ¡ªcomunidad fronteriza¡ª emiti¨® una orden para que no se brindara atenci¨®n a personas migrantes que no portaran ¡°documentos¡± sin antes llamar a la polic¨ªa y a las autoridades migratorias.
La reacci¨®n de la sociedad civil no se hizo esperar. M¨¢s de 20 organizaciones hicieron un llamado al Gobierno a ¡°respetar los derechos de las poblaciones en mayor condici¨®n de vulnerabilidad, incluyendo a las personas migrantes¡±. El 11 de junio el Ejecutivo elimin¨® la directriz y reafirm¨® su compromiso de atender a toda persona que tuviera s¨ªntomas de covid-19. Sin embargo, aquellas personas que necesiten atenci¨®n por otras enfermedades y no tenga seguro social o una condici¨®n migratoria regular deber¨¢n pagar su atenci¨®n, pr¨¢ctica usual en el sistema p¨²blico de salud costarricense.
Actualmente, Costa Rica enfrenta una segunda ola pand¨¦mica m¨¢s fuerte que la primera. Personas que viven en situaci¨®n de marginaci¨®n social y econ¨®mica en el Gran ?rea Metropolitana y en la Zona Norte del pa¨ªs est¨¢n siendo las m¨¢s afectadas. El pasado 4 de julio, un joven con fuertes s¨ªntomas de covid-19 y en estado cr¨ªtico de salud lleg¨® a uno de los principales hospitales, poco despu¨¦s falleci¨®. Era una persona extranjera que no portaba documentos de identificaci¨®n, no hab¨ªa sido diagnosticado con la enfermedad pues no hab¨ªa acudido al sistema de salud y viv¨ªa en una ¡°cuarter¨ªa¡±. Su diagn¨®stico se confirm¨® luego de fallecido.
La muerte de este joven visibiliz¨® la situaci¨®n de las cuarter¨ªas, unas edificaciones divididas en aposentos peque?os donde en un espacio muy reducido viven decenas de personas y familias en condiciones de extrema precariedad. El distanciamiento social y f¨ªsico es imposible all¨ª. Seis de cada diez personas que viven en estos inmuebles son extranjeros, principalmente de origen nicarag¨¹ense. Actualmente, las cuarter¨ªas est¨¢n bajo fuerte resguardo policial, para evitar que las personas que habitan all¨ª salgan del inmueble.
Semanas atr¨¢s, hubo un incremento significativo de casos de covid-19 en fincas dedicadas a la siembra y exportaci¨®n de pi?a, yuca y otros productos agr¨ªcolas en la zona norte del pa¨ªs. Estas empresas contratan a personas nicarag¨¹enses en condici¨®n irregular a quienes explotan, violan sus derechos y viven en condiciones de precariedad y hacinamiento. A pesar de la responsabilidad de los empresarios, Laura Bonilla, representante de la C¨¢mara de Exportadores de Costa Rica (Cadexo) y due?a de dos de las empresas clausuradas quiso culpar a las personas nicarag¨¹enses de la situaci¨®n afirmando a un medio local que "el gran problema es la migraci¨®n de enfermos nicarag¨¹enses".
La xenofobia ha sido una realidad para los nicarag¨¹enses en Costa Rica por muchos a?os. ¡°Cuando estaba buscando un lugar para vivir, un tico [costarricense] me dijo que era mejor si otra persona tica llamaba por tel¨¦fono al apartamento que me interesaba, si no iban a saber que soy nicarag¨¹ense y no me atender¨ªan¡± afirma Leticia (nombre ficticio) quien lleg¨® a Costa Rica luego de ser perseguida en el contexto de la crisis sociopol¨ªtica del 2018 y a¨²n espera una respuesta sobre su solicitud de refugio.
El coronavirus lleg¨® a Costa Rica a inicios del mes de marzo. Costa Rica cerr¨® sus fronteras con Nicaragua para evitar el ingreso de personas que pudieran portar el virus. Esto contribuy¨® al incremento de la xenofobia
La pandemia ha venido a aumentar la xenofobia, lo cual es evidente sobre todo en redes sociales. Sin embargo, ciertas acciones, declaraciones y discursos del Gobierno han tambi¨¦n ayudado a reforzar esta discriminaci¨®n. Aun as¨ª, el Ministro de Relaciones Exteriores de Costa Rica afirm¨® que "es sumamente peligroso que bajo una emergencia sanitaria como la actual los sentimientos de xenofobia se incrementen".
A pesar del nivel de discriminaci¨®n que experimentan los nicarag¨¹enses en Costa Rica, su trabajo es fundamental para la econom¨ªa del pa¨ªs. As¨ª lo reconoci¨® el mismo Ministro de Relaciones Exteriores ¡°muchas de las actividades comerciales y empresariales que se realizan en Costa Rica dependen de mano de obra nicarag¨¹ense desde hace muchos a?os¡± dijo. Por otro lado, alrededor del 20% de las remesas en Nicaragua provienen de Costa Rica, la segunda fuente de remesas m¨¢s importante despu¨¦s de los Estados Unidos.
A inicios de julio, el Ministerio de Salud confirm¨® la transmisi¨®n comunitaria en Costa Rica. El n¨²mero de contagios m¨¢s alto por d¨ªa hasta la fecha es de 375 personas. Al 8 de julio hab¨ªa 5836 casos confirmados. El 30% de ellos corresponden a personas extranjeras. Cerca del 47% de los casos de covid-19 en poblaci¨®n extranjera son de personas en situaci¨®n irregular en el pa¨ªs.
Ana Laura M¨¦ndez Araya es experta en desplazamiento forzado de la Universidad de Nueva York.? Veena Siddharth es Consultora en Cambio Organizacional, Defensa y Evaluaci¨®n de la Universidad de Harvard.
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