¡®Armageddon¡¯ | ?Preparados para el asteroide de principio de curso?
Gente de educaci¨®n, ya se¨¢is personal docente, administrativo o de servicios, gracias por adelantado
Hay dos tipos de presidentes de escalera: los que se ocupan de los asuntos importantes aunque supongan complicaciones, dolores de cabeza y enfados con los vecinos, y los que dejan pasar el tiempo para que los problemas se resuelvan solos, se olviden o acabe su mandato y la rehabilitaci¨®n de la fachada le toque a los nuevos.
En la gesti¨®n que nuestro pa¨ªs ha hecho del coronavirus, parece que Sanidad ha sido del primer grupo y que Educaci¨®n encaja en el segundo. Empezamos el nuevo curso sin la sensaci¨®n de que hayamos progresado mucho desde marzo. M¨¢s que recursos para m¨¢s espacios y m¨¢s profesionales extra, hay mucha rueda de prensa con discurso buenista y protocolos gen¨¦ricos que ya veremos c¨®mo se adaptan en muchos centros (porque por ejemplo no siempre hay ventanas para ventilar en todos los espacios).
Y tanto familias como docentes (que tambi¨¦n tienen familias) estamos muy preocupados, porque pase lo que pase pringaremos seguro.
Viviremos el curso de Schr?dinger, que ser¨¢ seguro y peligroso a la vez, y lo ¨²nico cierto es que tarde o temprano el rebrote alcanzar¨¢ cada colegio.
?Cu¨¢ntas familias esperar¨¢n a ver c¨®mo funciona el panorama antes de arriesgarse a llevar a los ni?os al cole, por obligatorio que sea?
Si se demuestra un contagio¡ ?se cierra la clase y todos a casa? ?Se cierra la l¨ªnea, el colegio, la manzana?
Si alguien tiene varios hijos en centros distintos, ?un caso confirmado obligar¨¢ a cerrar los dos colegios? ?Se quedar¨¢n confinados por si acaso o confiar¨¢n en que la ruleta rusa v¨ªrica les sea ben¨¦vola?
?Qu¨¦ har¨¢n los sanitarios cuando sus hijos entren en esta rueda? ?Dejarlos solos en casa para irse a curar a otros?
?Cu¨¢nto podremos aguantar los trabajadores esta imprevisibilidad de contagios y encierros?
Y la pregunta pr¨¢ctica: ?esto qui¨¦n lo paga ¨Cy cu¨¢ndo se cobra¨C?
El primer confinamiento lo vivimos con incredulidad, miedo y lemas de ¡°esto lo paramos entre todos¡±. Y para muchos pes¨® m¨¢s el miedo a la enfermedad y a la multa que el compromiso social.
Ahora estamos m¨¢s pobres, m¨¢s cansados, m¨¢s afectados, y m¨¢s cabreados con nuestras autoridades y con nuestros conciudadanos irresponsables. Y por lo menos nos tocar¨¢ aguantar otro curso as¨ª.
El coronavirus ha dejado un rastro muy tr¨¢gico en todo el planeta con millones de familias afectadas a nivel sanitario, econ¨®mico y an¨ªmico. Tardaremos en recuperarnos como sociedad, pero en ning¨²n caso podemos dejar que los ni?os vuelvan a ser el ¨²ltimo mono. No deber¨ªamos tener que elegir entre muerte y miseria, porque son cosas grav¨ªsimas, pero tampoco tendr¨ªamos que elegir entre adultos y ni?os.
Gente de educaci¨®n, ya se¨¢is personal docente, administrativo o de servicios, gracias por adelantado. En este curso dur¨ªsimo, ser¨¦is los Bruce Willis que tendr¨¦is que viajar al asteroide para perforarlo y cambiar su trayectoria fatal. El futuro de nuestros ni?os depende de vosotros.
Y querid@s lector@s, como dicen las pel¨ªculas de cat¨¢strofes a¨¦reas: ¡°preparaos para el impacto¡±.
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