Adi¨®s a Cini Boeri, creadora de muebles pop y casas sinuosas
La arquitecta y dise?adora italiana falleci¨® esta semana a los 96 a?os de edad. Su obra sigue presente tanto en las colecciones de los museos como en los cat¨¢logos y las casas, ya que muchas de sus piezas siguen produci¨¦ndose
Esta semana falleci¨® en Mil¨¢n a los 96 a?os Maria Cristina Mariani Dameno, conocida con el nombre de Cini Boeri. ¡°Cini¡± era su sobrenombre infantil, diminutivo de ¡°picinin¡±, una forma dialectal de decir ¡°peque?ita¡±. La arquitecta y dise?adora italiana cultiv¨® un estilo aparentemente l¨²dico pero muy pragm¨¢tico tanto en sus casas ¨Clas m¨¢s conocidas son las que hizo en la isla de Cerde?a, la Casa Bunker y la espectacular Casa Rotonda¨C como en el mobiliario que dise?¨®, piezas que a¨²n se siguen produciendo e imitando, como el sof¨¢ Strips, que gan¨® el Compasso d¡¯Oro en 1970 y forma parte de la colecci¨®n de varios museos de dise?o.
Su libro m¨¢s citado se titula La dimensi¨®n humana de la casa y eso fue lo que le preocup¨® a lo largo de su largu¨ªsima carrera y lo que la diferenci¨® de algunos de sus contempor¨¢neos en los a?os milagrosos del dise?o italiano, que no perd¨ªa de vista que los muebles y las casas se hacen para vivirlos, no para admirarlos. Por eso en el Serpentone, el sof¨¢ que precedi¨® al Strips, se compraba a metros y se adaptaba a cualquier espacio, y en el Strips, todav¨ªa ahora, las fundas se sacan con cremallera y se pueden utilizar como mantas, creando un cocoon para dormir, trabajar, leer y pensar. La arquitecta consigui¨® adem¨¢s, junto a Gae Aulenti, tener su propio estudio y ganarse el respeto de la profesi¨®n en una ¨¦poca y un entorno que pod¨ªa ser muy hostil para las mujeres.
Boeri naci¨® en 1924 en una familia de convicciones antifascistas. ¡°Mi padre no pod¨ªa ni mirarme cuando me tocaba ponerme el uniforme de la Piccola Italia¡±, explic¨® la arquitecta en una entrevista con Klat Magazine, refiri¨¦ndose a la versi¨®n italiana de la Secci¨®n Femenina que instaur¨® Mussolini para las ni?as de 8 a 14 a?os, que ten¨ªan que vestirse con falda y boina negra y camisa de piqu¨¦ blanco. A los 18 a?os, Boeri ya era activa en la causa de los partisanos y se dedicaba a actuar como correo pasando documentos clasificados a trav¨¦s de los picos del Mottarone, en los Alpes italianos. ¡°Los antifascistas nacen, no se hacen. En mi familia ¨¦ramos antifascistas de nacimiento¡±, dijo en la misma entrevista. Boeri recordaba haberse cosido una falda con la tela de los paracaidistas de la resistencia.
Con la Segunda Guerra Mundial reci¨¦n terminada, se matricul¨® en Arquitectura en la Polit¨¦cnica de Mil¨¢n, a pesar de que todo el mundo intentaba convencerla de que no lo hiciera porque era ¡°una cosa de hombres¡±. Se gradu¨® en 1951, una de las tres mujeres que lo lograron ese a?o. Logr¨® beca en el estudio de Gio Ponti, uno de los padres del dise?o moderno, donde aprendi¨® ¡°cierta disciplina mental y f¨ªsica para crear proyectos y tomar decisiones¡±. Tras eso, trabaj¨® varios a?os junto a Marco Zanuso.
Fue otra arquitecta, Franca Helg, quien la anim¨® a montar su propio estudio antes de quedar totalmente integrada en el de Zanuso y diluir su propio sello en la firma de su jefe. En 1963 fund¨® Cini Boeri Architetti. Como se?alaba su obituario en Wallpaper, la econom¨ªa de materiales siempre fue una de sus preocupaciones y es de esa sencillez de la que nace la armon¨ªa de sus productos. Su sof¨¢ Serpentone (1971), que ten¨ªa como uno de sus dise?os m¨¢s queridos a pesar de que tuvo que dejar de producirse, estaba hecho solo de espuma de poliuretano, lo mismo que el Strips. Tambi¨¦n de los setenta, su ¨¦poca gloriosa, son la serie de mesas Lunario para Gavina, hechas de vidrio y con forma ovalada, as¨ª como la silla Botolo, de 1973, que Artflex relanz¨® hace pocos a?os con nuevos acabados y puede verse por ejemplo en el hotel Jaffa de Tel Aviv, dise?ado por John Pawson. Con sus tres patas cil¨ªndricas, una de las cuales tambi¨¦n es el respaldo, su forma sinuosa y su acabado hecho como para tocarlo, la Botolo encajaba perfectamente en una bo?te de la ¨¦poca o en una casa hecha para el disfrute, como las que firm¨® la propia Boeri: la Rotonda, que se recoge como un caracol en la orilla, o la Casa nel Bosco, que cre¨® en 1969 en un bosque de abedules de Varese, cerca del Lago Maggiore, y que dise?¨® para que los espacios se adaptasen al terreno ya creado y no tener que talar ni un solo ¨¢rbol.
Otro de sus hits es la butaca y otomana Bobo, tambi¨¦n para Arflex, una oruga blanda y juguetona que fue tambi¨¦n el primer asiento en crearse sin estructura interna, utilizando solo la espuma.
La arquitecta y dise?adora? cultiv¨® un estilo aparentemente l¨²dico pero muy pragm¨¢tico tanto en sus casas? como en el mobiliario que dise?¨®, piezas que a¨²n se siguen produciendo e imitando
La dise?adora se cas¨® con el neur¨®logo y tambi¨¦n partisano antifascista Renato Boeri, del que se divorci¨® tras 25 a?os de matrimonio. Tuvieron tres hijos: Sandro, periodista, Tito, economista y Stefano, tamb¨¦n arquitecto. ?ste ¨²ltimo dec¨ªa sobre la obra de su madre en la revista Dezeen: ¡°Lo que considero inasible en mi madre es su elegancia, una especie de don natural que defin¨ªa cada una de sus acciones. Cini creaba objetos y edificios pop, extremadamente elegantes sin ser aburridos ni presuntuosos, una mezcla casi imposible que ella sab¨ªa c¨®mo crear¡±.
El hijo le reconoc¨ªa haberse sabido impregnar de las grandes corrientes de su ¨¦poca para interpretarlas a su manera, sin suscribirse a ninguna. ¡°No hay nada serio ni elitista en la esencialidad de su arquitectura, igual que no hay nada austero ni penitente en el minimalismo de sus muebles. Al contrario, la serialidad del Serprentone y de Strips revela un valor juguet¨®n y modular que est¨¢ presente hasta en sus nombres, mientras que las formas sinuosas de la silla Ghost o de la Villa Rotonda son una ruptura con la est¨¦tica del racionalismo¡±. La silla que menciona, de 1987, surgi¨® de una especie de reto que se puso a si misma. Est¨¢ hecha de sola pieza de vidrio de 12 mil¨ªmetros de ancho, curvado. Se puede adquirir lacada en distintos colores pero en su formato original parece, como apunta su nombra, una aparici¨®n, un soplo en el que no parece del todo fiable sentarse. ¡°Nunca hubiese pensado hacer una silla de cristal. Mi reticencia inicial de una idea que parec¨ªa bastante poco realista qued¨® superada por el deseo de aceptar el reto¡±, dijo cuando se celebr¨® el 30 aniversario de la pieza. La Ghost estuvo expuesta durante un tiempo en el ¨¢rea de dise?o del MoMA.
Esta semana, los profesionales del arte y el dise?o la han recordado no solo como una creadora original, tambi¨¦n como una mujer incansable y entusiasta. El comisario Hans Ulrich Obrist colg¨® en su Instagram un post que dice: ¡°?Me gustar¨ªa crear arquitectura para dise?ar felicidad! La necesitamos tanto. ?Lo intentamos? Yo estoy lista¡±. Detr¨¢s, se ve a Boeri, con gafas de sol y botas altas, fumando recostada en un largu¨ªsimo sof¨¢ Serpentone.
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