El libro que nos abre la puerta a la literatura de Mauritania
'Estoy solo', de Beyrouk, es una peque?a joya literaria al alcance de todos. Y la primera obra de un autor local que se traduce a ingl¨¦s y espa?ol
"Estoy solo, todos se han ido, la gente y las palabras, las j¨®venes ideas y las viejas ambiciones, incluso el amor tambi¨¦n se ha ido, han huido, han ido a buscar riberas estrelladas, lejos del nuevo cielo que no sufre por la luz y que apenas tolera el furor de la noche".
Nunca antes, ni en Espa?a ni en Am¨¦rica Latina, se hab¨ªa publicado en papel ni una sola l¨ªnea de un autor de Mauritania. Todo lo que conocemos de este pa¨ªs siempre hab¨ªa sido escrito por otros. Y no podemos argumentar su falta de relaci¨®n con la tinta y el papel, puesto que las bibliotecas de algunas de sus ciudades hist¨®ricas atesoran desde hace varios siglos miles de manuscritos andalus¨ªes que encontraron refugio en el desierto. Tambi¨¦n encontramos referencias decimon¨®nicas de escritores mauritanos, como Sid Ahmed Ould Alamin, autor del cl¨¢sico Al-Wasit. Pero su contenido en Espa?a apenas ha quedado reservado al petit comit¨¦ de los acad¨¦micos arabistas.
Este maleficio se acaba de romper. Esta semana los libreros le han hecho un hueco en sus estanter¨ªas al texto inaugural de la literatura mauritana en espa?ol, Estoy solo de Beyrouk (Colecci¨®n Libros del Baobab, Editorial Libros de las Malas Compa?¨ªas, 2021). El d¨ªa del lanzamiento del libro el escritor anunci¨® en su cuenta de Facebook que en tan solo dos d¨ªas se publicaba por primera vez una obra de "nuestra literatura" en ingl¨¦s y espa?ol. Y no apunta el dedo ¨ªndice hacia los editores y agentes literarios extranjeros, sino que se?ala a quienes deber¨ªan incentivar la producci¨®n literaria y su traducci¨®n desde dentro: "Acuso a nuestros autores, que carecen dolorosamente de entusiasmo y a nuestros dirigentes culturales, que carecen totalmente de visi¨®n".
Beyrouk (Atar, 1957), periodista, fundador del primer peri¨®dico independiente del pa¨ªs y activista a favor de la libertad de prensa, ha cosechado numerosos reconocimientos en el mundo de habla francesa desde sus primeras incursiones en la escritura. El autor se ha convertido en el embajador literario del pa¨ªs y en uno de los nombres m¨¢s destacados de la literatura de la regi¨®n sahariana. Mauritania no es precisamente un lugar del que no se conozca nada, puesto que ha dado a luz a algunos artistas con gran proyecci¨®n internacional como la cantante m¨ªtica Dimi Mint Abba o los excepcionales cineastas Med Hondo y Abderrahmane Sissako, que con su pel¨ªcula Timbuktu fue candidato a los Oscar.
Beyrouk plantea un mon¨®logo de un hombre escondido en un espacio m¨ªnimo mientras es perseguido por un grupo yihadista en una ciudad del S¨¢hara
Algunas escenas de esta pel¨ªcula vuelven a esbozarse en nuestra memoria con la lectura de Estoy solo. Si Sissako nos mostraba los efectos de la irrupci¨®n del Estado Isl¨¢mico en la poblaci¨®n de Tombuct¨², Beyrouk plantea un mon¨®logo de un hombre escondido en un espacio m¨ªnimo mientras es perseguido por un grupo yihadista en una ciudad del S¨¢hara. Desde su escondrijo, el hombre da rienda suelta a sus pensamientos, buscando explicaciones a la irracionalidad del fanatismo y a sus propias incongruencias, mientras aguarda desesperadamente que su antigua amante, Nezha, acuda a rescatarlo. El protagonista, atormentado por la amenaza exterior inminente, despliega una cascada de ideas, recuerdos, miedos, anhelos y preguntas sin respuesta que el autor hilvana con un estilo envolvente y sobrio.
Tirthankar Chanda, periodista de Radio France International (RFI), situ¨® la novela "a medio camino entre Esperando a Godot y Las mil y una noches". Y no es para menos, pues, a pesar del planteamiento ag¨®nico de la obra, el protagonista busca la belleza entre las tinieblas, se refugia en el privilegio de la cotidianidad ante un escenario adverso. Beyrouk logra construir un relato po¨¦tico anclado en el imaginario del desierto, que m¨¢s que denunciar una realidad concreta, nos ayuda a vestirnos con la piel de quien se ve forzado a confinarse por pensar de otra forma. Estoy solo es una oportunidad para la empat¨ªa con las miles de personas que sufren a diario la condena del extremismo, religioso o de cualquier suerte.
Las miradas interiores nos alejan de la frivolidad de quienes apenas informan con datos estad¨ªsticos y declaraciones oficiales
Y por todas estas razones es tan importante la traducci¨®n de la primera obra de un pa¨ªs. Las miradas interiores nos alejan de la frivolidad de quienes apenas informan con datos estad¨ªsticos y declaraciones oficiales. Desde la primera p¨¢gina le prestamos nuestra voz a quien vive en un contexto muy alejado del nuestro. Y nos introducimos en el universo de un escritor que sabe modelar cada frase como un artesano de la palabra.
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