No olvides la ropa de deporte

Est¨¢ claro, los d¨ªas libres son para descansar, pasarlo bien y conocer nuevos lugares. La clave es saber alternar. Por eso, tres propuestas para pasar unos d¨ªas en otros tantos atractivos destinos nacionales. Desde una escapada para practicar golf a un paraje de mar y monta?a o la riqueza de un parque natural en pleno pirineo. Todo pensado para desconectar y aprovechar al m¨¢ximo las vacaciones.

M¨¢s que mar

Valencia no s¨®lo es un destino de playa, ofrece mucho m¨¢s. Como la visita al Parque Natural de la Albufera. A tan s¨®lo diez kil¨®metros de la capital, se trata de uno de los espacios naturales m¨¢s representativos de la regi¨®n. En esta reserva es posible disfrutar de ambientes formados a base de playas y dunas m¨®viles.

Otra parada obligada es la Ciudad de las Artes y las Ciencias, un complejo dedicado a la divulgaci¨®n cient¨ªfica y cultural, que se extiende a lo largo de casi dos kil¨®metros de recorrido. La propuesta consiste en un tranquilo paseo por sus instalaciones, apreciando la belleza de su estructura, al tiempo que el visitante estimula la mente de manera divertida, con los misterios que esconde la ciencia y la tecnolog¨ªa.

Para los m¨¢s activos, se ofrece un buen ambiente para la pr¨¢ctica del golf. Uno de los campos m¨¢s famosos se encuentra en El Saler, a 12 kil¨®metros de Valencia. Construido en 1968, tiene un total de 6.468 metros de extensi¨®n repartidos en 18 hoyos. Dentro del mismo hay varias zonas diferenciadas, como algunas cubiertas del t¨ªpico bosque mediterr¨¢neo, o links playeros, al puro estilo de los campos de golf escoceses.

Para descansar, entre el mar Mediterr¨¢neo y la Albufera se extiende una gran construcci¨®n de cristal que da cuerpo al Parador de El Saler. Con una oferta variada, garantiza el disfrute de la naturaleza. Invita al viajero a tomar un descanso en manos de los mejores especialistas que regentan el spa, dotado de unas instalaciones que ofrecen tranquilidad y relax.

M¨¢s informaci¨®n sobre el parador de El Saler

Tambi¨¦n en verano

A lo largo del pirineo catal¨¢n se esconde una de las zonas de mayor encanto de la pen¨ªnsula, El Valle de Ar¨¢n, en L¨¦rida. Vielha, su capital, no s¨®lo es clave para la temporada de esqu¨ª, en verano empieza una nueva oportunidad para disfrutar de su entorno.

Hay muchas posibilidades. Como seguir diferentes rutas tem¨¢ticas, itinerarios con gu¨ªa y senderos se?alizados, en un agradable recorrido por el Parque Nacional de Aig¨¹estortes i Estany de Sant Maurici. La reserva ofrece la posibilidad de escoger todo tipo de excursiones a medida, con las exigencias y comodidades que necesite el viajero.

Entre las actividades que se ofertan, es posible atravesar bosques, ascender a las cimas o descubrir la espectacularidad de las estrellas en los recorridos nocturnos. Otra opci¨®n es ir hasta el Parque Natural de Montserrat.

Tras una intensa jornada, nada mejor que disfrutar de una relajada sesi¨®n de spa que ofrece el Parador de Vielha, situado justo en el cerro de Eth Casteth, a dos kil¨®metros del municipio aran¨¦s. El parador ofrece al viajero la posibilidad de ver la majestuosidad del paisaje pirenaico desde la perspectiva del aire, a bordo de un helic¨®ptero.

M¨¢s informaci¨®n sobre el parador de Vielha

En las alturas

Restos de historia, rutas de senderismo para aficionados e impresionantes vistas, todo ello garantizado con la visita al Pueblo de Tejeda, a s¨®lo 24 kil¨®metros de las Palmas de Gran Canaria. Situada justo en la ladera de un cr¨¢ter, esta localidad conserva restos arqueol¨®gicos como cuevas y pinturas, y acoge la Cruz de Tejeda, una construcci¨®n en piedra situada a m¨¢s de 1.500 metros por encima del nivel del mar. Esta obra es considerada el centro de la isla y se ha convertido en un punto de encuentro de monta?eros y senderistas.

Dos espacios naturales rodean el paraje Cruz de Tejeda, el Parque Rural de Nublo y el Paisaje Protegido de Cumbres, parada obligada si se pretende descubrir las cumbres centrales de Gran Canaria. Es ¨¢mbito de manifestaciones volc¨¢nicas del segundo ciclo eruptivo como la Caldera de los Pinos de G¨¢ldar y el Monta?¨®n Negro, culpables de la lava volc¨¢nica en las monta?as que los rodean.

La Playa de Maspalomas, al sur de la isla, ofrece al viajero la posibilidad de disfrutar del sol canario y contemplar el litoral de la Reserva Natural de las Dunas, un paraje de arenas, aguas y palmeras que logra llamar la atenci¨®n por su gran extensi¨®n.

Al final del d¨ªa, es posible tomar un descanso en pleno centro de la isla, en el parador Cruz de Tejeda, una construcci¨®n t¨ªpica canaria que se abre paso a una altitud de 1.560 metros. El hotel ofrece sesiones de spa al tiempo que se disfruta de estas maravillosas vistas. Desde una inmensa terraza con mirador, se dominan panor¨¢micas a los Roques Nublo, de m¨¢s de 1.700 metros de altura, Fraile y Bentayga. En los d¨ªas despejados es posible ver el Teide a lo lejos.

M¨¢s informaci¨®n sobre el parador de Cruz de Tejeda