Mi hotel es un faro
Del Far de Palafrugell al faro de Harlingen, en Holanda, cien alojamientos para disfrutar del mar
Si tiene miedo a la oscuridad y necesita dormir con una luz encendida, quiz¨¢ pernoctar en un faro sea una buena idea. Desde el estrecho de Gibraltar hasta el cabo Norte, en Noruega, pasando por las costas de las islas Brit¨¢nicas o Iranda, m¨¢s de un centenar de estas singulares edificaciones ofrecen la posibilidad de alojarse en ellos. Aunque los faros contin¨²an siendo se?ales mar¨ªtimas en uso, muchos han sido rehabilitados y convertidos en coquetos hoteles, o destinados a otros usos complementarios como museos, estaciones meteorol¨®gicas o centros de investigaci¨®n. Con frecuencia localizados en parajes aislados, al borde de impresionantes acantilados, o en alguna peque?a isla, son testigos privilegiados de espectaculares amaneceres y puestas de sol. Y si se aloja en uno de ellos no olvide visitar las poblaciones costeras cercanas, suelen ser lugares muy hospitalarios donde disfrutar del verdadero sabor marinero de la zona.
En Espa?a
En Espa?a se conserva el faro m¨¢s antiguo del mundo a¨²n en servicio, la Torre de H¨¦rcules, en A Coru?a, construida en el siglo I. La mayor¨ªa de los 187 faros existentes fueron proyectados en el primer Plan General de Alumbrado Mar¨ªtimo, aprobado por la Comisi¨®n de Faros en 1847.
Gu¨ªa
Informaci¨®n
En la Costa Brava podr¨¢ hospedarse en dos de los lugares m¨¢s espectaculares de la zona. El primero, El Far, se alza a las afueras de Palafrugell, asomado al vertiginoso acantilado de Romaboira. Desde la terraza, o desde cualquiera de sus nueve habitaciones, ofrece una de las mejores vistas del Mediterr¨¢neo.
Pero si lo que quiere es ser uno de los primeros en ver amanecer desde la Pen¨ªnsula, en el parque natural de Cap de Creus, a pocos metros del faro del mismo nombre, la casa de antiguos vigilantes de la frontera entre Espa?a y Francia es hoy el conocido restaurante Cap de Creus, donde podr¨¢ alojarse en uno de los tres apartamentos con capacidad para cuatro personas cada uno.
En Galicia tambi¨¦n hay dos atalayas donde poder alojarse. El hotel O Sem¨¢foro forma parte del complejo del faro de Finisterre, situado en uno de los lugares emblem¨¢ticos de la Costa da Morte, a 143 metros sobre el nivel del mar. El antiguo caser¨®n de vigilancia de la Marina de guerra, que m¨¢s tarde pas¨® a ser una base meteorol¨®gica, se convirti¨® en 1999 en un peque?o hotel de cinco habitaciones, con una cafeter¨ªa y un restaurante.
M¨¢s al norte, junto al faro del cabo de Estaca de Bares, en la comarca coru?esa de Ortegal, se encuentra el Sem¨¢foro de Bares, antigua base de la Marina espa?ola que hac¨ªa las veces de estaci¨®n meteorol¨®gica, adem¨¢s de controlar el tr¨¢fico mar¨ªtimo a trav¨¦s de banderas. Hoy es un hotel, a unos dos kil¨®metros del faro. Son dos edificios, con tres habitaciones cada uno, dentro de una amplia zona ajardinada.
Escandinavia
Noruega y Suecia son aut¨¦nticos para¨ªsos naturales donde alojarse en un faro es relativamente sencillo, cuentan con casi medio centenar a lo largo de las costas de la pen¨ªnsula de Escandinavia. En Noruega, con m¨¢s de 20.000 kil¨®metros de costa, est¨¢n localizados en su mayor¨ªa en la vertiente atl¨¢ntica. Desde Grimstad, en el fiordo de Oslo, al sur del pa¨ªs, hasta Vard?, al norte, hay al menos 28 alojamientos disponibles. En la p¨¢gina de la oficina de turismo de Noruega se puede acceder a las direcciones de todos ellos.
En Suecia, con m¨¢s de 220.000 islas (mil de ellas habitadas permanentemente), la mayor¨ªa de los alojamientos se encuentra en peque?as islas del golfo de Botnia o del mar B¨¢ltico, donde hay m¨¢s de una docena de maravillosos faros para viajeros que buscan algo diferente donde pasar la noche. A trav¨¦s de la p¨¢gina de la Asociaci¨®n Sueca de Turismo (STF), perteneciente a la red Hostelling International, se pueden hacer las reservas. Al sur de Finlandia, el faro de la isla de Bengtsk?r, el m¨¢s alto de Escandinavia, y todo un s¨ªmbolo del pa¨ªs, dispone de seis habitaciones con un precio que incluye desayuno y sauna.
Reino Unido e Irlanda
En las costas de las islas Brit¨¢nicas tambi¨¦n se puede disfrutar de parajes espectaculares. En Escocia, por ejemplo, son especialmente accidentadas porque abundan los brazos de mar profundos, los conocidos firths, o sea lochs, lagos de mar. En Inglaterra, Gales o Escocia, en las islas Shetland o en la de Wight, se encuentran casi medio centenar de faros desde donde poder contemplar el azul del mar de Irlanda o el verde del mar del Norte. A trav¨¦s de las p¨¢ginas de Rural Retreats, The National Trust for Scotland o Shetland Lighthouse, pueden reservarse los alojamientos, con excepciones, como la del hotel Corsewall, de Escocia. En Irlanda, los faros los gestiona The Irish Landmark Trust, una organizaci¨®n sin ¨¢nimo de lucro que compra propiedades, las reforma y restaura, y las convierte en alojamientos.
Croacia y Francia
Croacia es, sin duda, el pa¨ªs del Mediterr¨¢neo donde la oferta de este tipo de alojamiento es mayor. A lo largo de las costas de Istria, de Kvarner y de Dalmacia, en el Adri¨¢tico, existen una docena de faros, alguno enclavado en peque?as islas. Debido a la demanda, los alquileres suelen ser semanales, aunque en los meses de junio y julio se puede pernoctar un fin de semana en algunos de ellos. Es necesario reservar con mucha antelaci¨®n (en la web del operador tur¨ªstico Uniline).
En Francia, adem¨¢s de poder pernoctar en el lujoso faro de Kerbel en Riantec, frente a la bonita isla de Roix, son tambi¨¦n buenas opciones el de Fatouville Grestain, en el estuario del Sena, en la baja Normand¨ªa, o el de la isla de Lou?t, en Carantec, situado en un islote de la bah¨ªa de Morlaix (Breta?a). Y en la regi¨®n de Frisia, al norte de Holanda, se encuentra el faro de Harlingen, un precioso hotel, nada barato y con una particularidad: solo dispone de una habitaci¨®n; eso s¨ª, doble.
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