Notre Dame, la casa de Quasimodo

Par¨ªs es una de las capitales del mundo en las que los enamorados deben cruzar sus puentes. Algunas de estas parejas enamoradas empezar¨¢n a tener ni?os y entonces por qu¨¦ no volver a Par¨ªs. Nuestros peque?os se merecen empezar a conocer el mundo con un poco de franc¨¦s y unas crepes dulces o saladas. Da un poco de cosa (a m¨ª me da) por si molestan, o por si la gente se siente molesta, que no es lo mismo, y entonces me comprometo a que no llevar¨¢n su bal¨®n de reglamento ni gritar¨¢n. Y ya ver¨¢s c¨®mo el viaje ser¨¢ fant¨¢stico. Par¨ªs con ni?os no solo es posible sino necesario, una experiencia fabulosa incluso sin pisar Disneyland Par¨ªs, que tampoco pasa nada si se pisa, bien s?r.

La estancia

Par¨ªs est¨¢ lleno de hoteles, pero una opci¨®n muchas veces m¨¢s c¨¦ntrica y no m¨¢s cara es alquilar un apartamento por d¨ªas. Frente al Pompidou, por ejemplo, en pleno centro, y hacer los desayunos y cenas en casa, en pijama, a ritmo familiar. Por la ma?ana se puede bajar a la Boulangerie Julien, porque pilla cerca (Rue Saint-Martin) y porque tiene un cartel que certifica que en 2013 obtuvo el premio a la mejor baguette de Par¨ªs, y comprar una baguette ganadora y un mont¨®n de cruasanes y disfrutar el desayuno en nuestra casa parisiense (chez nous),todo un lujo mirando las tuber¨ªas de colores del Pompidou y trazando posibles itinerarios en el plano.

El Sena

Par¨ªs tiene un r¨ªo, el Sena, y en el Sena una isla donde se encuentra la catedral de Notre Dame, con sus vidrieras y las g¨¢rgolas y Quasimodo, el jorobado de Notre Dame. Como estamos en el centro, vayamos hacia el Ayuntamiento (si es invierno caig¨¢monos un poco en la pista de patinaje sobre hielo: estos ni?os tienen que cansarse) y crucemos el puente all¨ª mismo. Francia es el pa¨ªs m¨¢s visitado del mundo, y dentro de Francia Par¨ªs es la ciudad m¨¢s visitada, ?y sab¨¦is cu¨¢l es el monumento m¨¢s visitado de Par¨ªs? Anda, la catedral. Aunque no es lo m¨¢s importante, a los peques les puede gustar esto: frente a la entrada principal, una placa indica el punto cero, el centro oficial de Par¨ªs (?tambi¨¦n del mundo?). Cruzando el puente hacia el Barrio Latino (la orilla de enfrente del Ayuntamiento), podemos ense?arles a los ni?os que esa librer¨ªa con nombre de escritor en ingl¨¦s es la m¨¢s famosa de Par¨ªs (Shakespeare & Company). Este puente, por cierto, se cay¨® en 1499, pero es que estaba lleno de casas. Ya no se caen puentes, puentes enteros quiero decir, solo trozos. En junio de 2014 se cay¨® al r¨ªo un trozo no por el peso de las casas, que ya no hay, sino por el peso ?de los candados! Era rom¨¢ntico y divertido, y las tiendas de alrededor vend¨ªan los candados y los rotuladores para marcarlos y ahora f¨ªjate t¨². El amor a veces destruye, aunque no s¨¦ si es pronto para explicar esto a los ni?os.En el Sena tomaremos el Batobus,con paradas en el Louvre, la torre Eiffel y otros de los monumentos m¨¢s importantes. Podemos bajarnos, hacer la visita y volver a subir en otro. Incluso, si el calor aprieta, podemos ir a la playa artificial que instalan cada verano en el r¨ªo vertiendo toneladas de arena. Porque al llegar agosto, vaya vaya, en Par¨ªs hay hasta playa.

La torre Eiffel

La verdad es que todos pens¨¢bamos que el monumento m¨¢s visitado (o subido) era la torre Eiffel, pero nos dicen que no. El caso es que c¨®mo no visitar (y subir) esta torre met¨¢lica que es el edificio m¨¢s alto de Par¨ªs (hasta 1930 fue el edificio m¨¢s alto del mundo). Con subir a la segunda planta ya se obtiene una panor¨¢mica fant¨¢stica de Par¨ªs, oh la la. Comprar las entradas con antelaci¨®n puede evitarnos colas, tambi¨¦n las evitamos si no usamos el ascensor, pero son 700 escalones. En 1912 un austriaco salt¨® con un paraca¨ªdas casero desde la primera planta: el pobre se mat¨®. Yo me s¨¦ otra an¨¦cdota m¨¢s macabra todav¨ªa, pero con esta basta, que hay menores cerca.

El Centro Pompidou

El Centro Pompidou (el que vemos mientras desayunamos) es ideal si llueve, lleno de exposiciones y tambi¨¦n de talleres para ni?os (antes de salir del apartamento podemos consultar la web del centro dedicada a los m¨¢s peques). Los mayores son un rollo y se enfadan a menudo, por eso cuando el presidente Pompidou (claro, de ah¨ª el nombre) encarg¨® su construcci¨®n muchos lo criticaron, pero no lo llevaron a la guillotina porque eso ya no se hace. La guillotina separaba la cabeza de los cuerpos que la sosten¨ªan y entonces los nobles se mor¨ªan, pero despu¨¦s lleg¨® la egalit¨¦ y se pasaba por la guillotina tambi¨¦n al pueblo. Cuarenta mil cabezas rodaron por la Place de la Concorde. Qu¡¯el horreur! Ahora en la plaza lo que hay es un obelisco que Napole¨®n se trajo de Egipto como souvenir.?El obelisco mide 23 metros, pero Napole¨®n med¨ªa mucho menos.

Cit¨¦ des Sciences

Otras visitas en un Par¨ªs con ni?os pueden ser el Arco del Triunfo o la Ciudad de las Ciencias y la Industria. Aqu¨ª hay un submarino ¡ªel Argonaute¡ª al que se entra aunque no se fotograf¨ªa, ser¨¢ para que no copiemos la tecnolog¨ªa y construyamos un submarino similar que ataque Francia, aunque con una alcaldesa de Par¨ªs nacida en C¨¢diz, y un primer ministro nacido en Barcelona, ?qui¨¦n necesita usar submarinos? Tambi¨¦n hay muchas exposiciones divertidas, salas de proyecci¨®n con efectos especiales y talleres interactivos en los que se ruega tocar. La Ciudad de las Ciencias est¨¢ dentro del enorme parque de la Villette, donde adem¨¢s hay numerosos jardines tem¨¢ticos. Dentro de unos a?os, a sus parejas, tal vez, estos ni?os, estas ni?as, dir¨¢n: en este parque aprend¨ª a amar Francia.

??Pablo Aranda es autor de El colegio m¨¢s raro del mundo (Anaya).

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