Colonia Roma, el nuevo M¨¦xico DF

La Colonia Roma es algo as¨ª como la punta de lanza de la transformaci¨®n de la Ciudad de M¨¦xico. Si en los a?os 80 sus calles eran sin¨®nimo de inseguridad, ahora son las m¨¢s frecuentadas por los artistas y bohemios chilangos. En una ciudad todav¨ªa dominada por los coches, en este barrio existe la posibilidad real de moverse en bicicleta. Lo que naci¨® como un exclusivo residencial porfiriano est¨¢ ahora repleto de galer¨ªas de arte, boutiques de ropa vintage y los restaurantes m¨¢s alternativos.

En realidad hay dos colonias Roma. La zona sur conserva todav¨ªa su car¨¢cter residencial, aunque poco a poco comienzan a verse nuevos restaurantes y bares. La Roma Norte es uno de los corredores culturales m¨¢s importantes de la ciudad, junto a su vecina la colonia Condesa. Su trazado original imit¨®, a finales del siglo XIX, los c¨¢nones urban¨ªsticos franceses, tal y como le gustaba al presidente Porfirio D¨ªaz. Los nombres de sus calles deben sus nombres a las ciudades europeas que visitaba un circo asentado en el antiguo pueblo de La Romita, que fue la base para la construcci¨®n de la colonia.

Las dos v¨ªas principales para pasear son la avenida ?lvaro Obreg¨®n, de este a oeste y repleta de restaurantes, as¨ª como la avenida Orizaba, de norte a sur. En esta ¨²ltima se encuentran los dos parques que articulan la vida cotidiana del barrio: la plaza R¨ªo de Janeiro, con su r¨¦plica del David de Miguel ?ngel, y la plaza Luis Cabrera, con su fuente en forma de tr¨¦bol. Ambos van cambiando de ambiente conforme pasa la jornada. A mediod¨ªa se llenan de ni?os que salen de las escuelas cercanas; por la tarde es el turno de los j¨®venes universitarios que salen de sus clases y por la noche de adultos j¨®venes que acuden a sus bares o restaurantes.

Un buen paseo introductorio por la Colonia Roma podr¨ªa comenzar en la glorieta de Insurgentes (Metro L¨ªnea 1; Metrob¨²s L¨ªnea 1), donde podemos alquilar una Ecobici rumbo a la plaza R¨ªo de Janeiro, donde podemos tomar un caf¨¦ en Toscano (Orizaba 42), con vistas al parque. La fuente del David es el punto ideal para tomarse un descanso del trabajo, conversar con alg¨²n amigo o pasear a los perros. El paseo continua despu¨¦s por la calle de Orizaba rumbo a la plaza Luis Cabrera, unas calles m¨¢s all¨¢ de ?lvaro Obreg¨®n. Tambi¨¦n se pueden visitar los parques en sentido inverso, pues est¨¢n trazados en espejo (acentuado recientemente por el hecho de que en ambos hay sucursales del caf¨¦ Toscano).

Para comer

La esquina donde confluyen Orizaba y ?lvaro Obreg¨®n es una buena muestra de la esencia de la Roma, tanto arquitect¨®nica como gastron¨®mica. Un amplio camell¨®n con estatuas de dioses ol¨ªmpicos, un restaurante argentino (El Diez, ?lvaro Obreg¨®n 112), una afamada casa de "comida de barrio" (Sobrinos, ?lvaro Obreg¨®n 110), el Centro de Cultura Casa LAMM (?lvaro Obreg¨®n 99) y un sal¨®n de t¨¦ ubicado en un edificio art nouveau (Caravansera?, Orizaba 101).

En la misma avenida ?lvaro Obreg¨®n es posible degustar lo m¨¢s variado de la gastronom¨ªa mexicana. Los m¨¢s audaces deben ir a la cantina La Aut¨¦ntica (Cuauht¨¦moc 129), donde les regalar¨¢n la comida si pagan al menos tres copas. No es una cantina "mexicanizada" como las de la Plaza Garibaldi, sino una versi¨®n mucho m¨¢s cercana a la realidad, tal y como dice su nombre. Los m¨¢s calmados y tradicionales pueden visitar los Bisquets Bisquets Obreg¨®n (?lvaro Obreg¨®n 60), en la esquina con M¨¦rida, donde adem¨¢s de lo obvio tambi¨¦n se sirven platillos mexicanos. Esta panader¨ªa tuvo tal ¨¦xito que precis¨® de ir comprando locales aleda?os hasta convertirse en una cadena de restaurantes con presencia en todo el pa¨ªs. Los amantes de los tacos podr¨¢n saciar su antojo en los Taquitos Frontera (?lvaro Obreg¨®n 25) o en la Taquer¨ªa ?lvaro Obreg¨®n (?lvaro Obreg¨®n 90).

Existen opciones m¨¢s contempor¨¢neas. Los m¨¢s intelectuales podr¨¢n matar dos p¨¢jaros de un tiro en la Cafebrer¨ªa El P¨¦ndulo (?lvaro Obreg¨®n 86) pues adem¨¢s de comprar muchos libros podr¨¢n comer alg¨²n platillo con el nombre de su escritor favorito. Los desayunos son su especialidad, tanto que sirven tambi¨¦n "desayunos nocturnos" para los que solo pueden disfrutarlos despu¨¦s del trabajo. Otro de los imprescindibles de la Roma est¨¢ en la esquina con Monterrey, donde la famosa chef M¨®nica Pati?o ha instalado Delirio (Monterrey 116), donde mezcla el concepto de los deli con los sabores mexicanos.

M¨¢s reciente, el Mercado Roma (Quer¨¦taro 225) combina la idea de los mercados gourmet europeos con el ca¨®tico colorido de las tradicionales abastos mexicanos. El resultado es un reducido espacio donde hay m¨¢s gente y comida que sitio para ambos, pero que aglutina sucursales de los restauranteros mexicanos m¨¢s importantes.

El postre requiete caminar un poco, pues en la calle de Tonal¨¢, Chomp Chomp (Tonal¨¢ 91) sirve las mejores galletas sabor lim¨®n de la ciudad. En Orizaba, la cl¨¢sica helader¨ªa La bella Italia (Orizaba 110) nos devolver¨¢ a los a?os cuarenta, como en la novela de Jos¨¦ Emilio Pacheco Las batallas en el desierto, donde incluso el local aparece en la trama. Un poco m¨¢s lejos, en la calle de C¨®rdoba, Helado oscuro (C¨®rdoba 223) no sirve simples helados con alcohol, sino m¨¢s bien c¨®cteles congelados.

De compras

Los amantes de la moda estar¨¢n encantados en la calle de Colima. Tan solo entre Tonal¨¢ y Orizaba se encontrar¨¢n con boutiques como Raximbat (Colima 220), Lucky BSTRD (Colima 212), Lemur (Jalapa 85) y Goodbye Folk (Colima 198). M¨¢s adelante, las botas de Dr. Martens (Colima 143) o American Apparel (Colima 112) son opciones m¨¢s internacionales, pero merecen igualmente una visita.

Los ciclistas urbanos tienen una buena referencia en el n¨²mero 55 de Zacatecas: People for bikes vende todo tipo de bicicletas y accesorios. Adem¨¢s cada jueves organizan una ruta nocturna por distintos lugares de la ciudad. Adem¨¢s, en 180? Shop (Colima 180) disponen de una boutique de ropa especializada y, si tambi¨¦n ruedan como deporte, pueden encontrar muchas m¨¢s opciones en Transvision Bike (San Luis Potosi 196).

Arte y nocturnidad

La Colonia Roma abre un espacio al arte en forma de galer¨ªas como OMR (Plaza R¨ªo de Janeiro 54), V¨¦rtigo (Colima 23) y Traeger & Pinto (Colima 179), que han marcado tendencia tanto por sus propuestas como por la forma de comercializarlas. El Museo del Objeto del Objeto (MODO, Colima 145) merece menci¨®n aparte por su original concepto: sin colecci¨®n permanente, cambia peri¨®dicamente a trav¨¦s de muestras y tem¨¢ticas en las que los objetos narran la vida cotidiana. Recientemente ha habido exposiciones sobre los c¨¢nones de belleza mexicana a trav¨¦s de los cosm¨¦ticos; el rock mexicano a partir de carteles y viejas entradas, as¨ª como sobre las relaciones amorosas fallidas mostradas en cartas, regalos y otras reliquias.

Para cantar o bailar las propuestas abarcan todos los g¨¦neros: Rhodesia (Durango 181) y Patrick Miller (M¨¦rida 17) para quienes busquen m¨²sica electr¨®nica. Los amantes de los ritmos tropicales tienen Mam¨¢ Rumba (Quer¨¦taro 230) o El Rinc¨®n Cubano (Quer¨¦taro 300), donde incluso pueden recibir clases de salsa. Y para rockeros, la alternativa m¨¢s reciente es el Cerati Bar & Grill (Yucat¨¢n 40), un diminuto restaurante de pizzas y carnes argentinas que todos los fines de semana cuenta con m¨²sica en vivo con grupos tributo a Soda Stereo y Gustavo Cerati.

Ser¨ªa muy sencillo concluir que todo esto ocurre porque la Colonia Roma est¨¢ de moda, pero se trata de una transformaci¨®n m¨¢s profunda. Sin perder la tradicional vida de barrio, sus calles se van abriendo poco a poco a exploraciones art¨ªsticas, gastron¨®micas y musicales. Es un gran punto de partida para quien quiera conocer el DF contempor¨¢neo.

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