De viaje por Soria

Para el escritor Julio Llamazares, el libro de Avelino Hern¨¢ndez Donde la vieja Castilla se acaba: Soria es ya un cl¨¢sico de la literatura en castellano, uno de los textos que m¨¢s le han influido ¡°por esa capacidad de conmocionar contando cosas sencillas, como Machado¡±. Llamazares, que escribe el pr¨®logo del texto de Avelino Hern¨¢ndez en la reedici¨®n que acaba de publicar la editorial Rimpego, cita uno de los p¨¢rrafos que le impresionaron: ¡°Estamos ya de lleno en las Sierras de la Mesta, interminable sucesi¨®n de lomas peladas, incre¨ªbles barrancos, abruptas vaguadas, sin rocas ni arbustos, sin ¨¢rboles, sin nada; cantos rodados, caliza, pizarras, cantuesos y aliagas; algunos p¨¢jaros sueltos, alguna perdiz, parejas de grajos y sobre el cielo buitres sobrevolando las reses muertas o la oveja parida que ha dejado un pastor rezagada¡±.

En su recorrido por las tierras y pueblos sorianos, Hern¨¢ndez, que naci¨® en 1944 en Valdege?a (Soria) y falleci¨® en 2003 en la isla de Mallorca, escucha el canto de las codornices al llegar la primavera y de los quebrantahuesos ¡°el pesado aleteo de metal batiendo la resistencia contra el viento¡±. En su papel de antrop¨®logo cultural, anota dichos, poemas populares, canciones y an¨¦cdotas que va acompa?ando de descripciones raps¨®dicas de la naturaleza (quiz¨¢s el mayor valor del texto por la nitidez del castellano empleado). Adem¨¢s, pasan templarios, moros, infantes, bastardos y padres presos en las mazmorras de Almanzor. La primera edici¨®n data de 1982. Para Llamazares, m¨¢s que un libro ¡°es una declaraci¨®n de amor, una introspecci¨®n po¨¦tica¡±.

Donde la vieja Castilla se acaba: Soria. Avelino Hern¨¢ndez. Fotograf¨ªas de Joan Benn¨¤ssar. Editorial Rimpego.