Nostalgias de Arl¨¦s
Varias ¨¦pocas confluyen en la ciudad provenzal que inspir¨® a Van Gogh, hoy influyente centro art¨ªstico con huellas romanas y un edificio de Frank Gehry
Hay ciudades peque?as que custodian varias capas de historia con may¨²sculas. Estratos de diferentes ¨¦pocas, que dejaron sedimento en un mismo suelo, mientras la vida contempor¨¢nea contin¨²a. Un ejemplo es la soleada Arl¨¦s, en la Provenza francesa, que nos trae a la mente los girasoles de Van Gogh y los retratos de les arl¨¦siennes (las arlesianas) de Picasso. Pero en esta ciudad en las bocas del R¨®dano hay mucho m¨¢s, antes y despu¨¦s de la oreja de Vincent y la admiraci¨®n hacia Pablo.
Con algo m¨¢s de 50.000 habitantes, Arl¨¦s se ha convertido desde hace unos a?os en el motor art¨ªstico estival de la regi¨®n, que arranca esta temporada con casi todo suspendido por la precauci¨®n que nos deja la covid-19 (se mantienen algunas convocatorias a becas y premios, especialmente a partir de agosto). No obstante, su fulgor amarillo-sol no se apaga y probablemente se vuelva a¨²n m¨¢s amable con menos afluencia de visitantes, en este extra?o julio sin apenas vernissages. Hablamos de lo que normalmente ocurre cada primera semana de julio desde hace 50 a?os en las calles peatonales de Arl¨¦s, con la inauguraci¨®n del gran encuentro de la fotograf¨ªa mundial Les Rencontres d¡¯Arles, que concita la atenci¨®n de artistas visuales de todas las geograf¨ªas y que desde su primera edici¨®n en 1970 no hab¨ªa sufrido jam¨¢s una cancelaci¨®n, hasta este a?o.
Hay antiguas nostalgias en Arl¨¦s. El anfiteatro romano data del siglo I; su planta redonda a¨²n domina el centro tur¨ªstico y sigue en funcionamiento como arena para espect¨¢culos de tauromaquia. Entre otras construcciones del Imperio Romano, el Th¨¦?tre Antique contin¨²a ofreciendo las virtudes del escenario y las gradas al aire libre; las murallas circundan la ciudad vieja; las termas de Constantin, del siglo IV, enmarcan un agradable rinc¨®n pr¨®ximo al r¨ªo; tambi¨¦n se puede ingresar a las galer¨ªas subterr¨¢neas del viejo foro o al parque de la gran necr¨®polis romana y medieval de Les Alyscamps. Todos estos monumentos, junto con la iglesia y el claustro g¨®tico de Saint-Trophime, construidos entre el siglo XII y el XIV, figuran en la lista del patrimonio mundial de la Unesco.
Luego est¨¢ el R¨®dano, que es un r¨ªo imponente, navegable, y que a la altura de esta localidad dibuja un codo muy marcado, por lo que la superficie de agua parece ensancharse y rodear las callejuelas de altos pl¨¢tanos en torno a la terraza que comparten la librer¨ªa de la prestigiosa editorial Actes Sud y el cine Le M¨¦jan (reabierto el 22 de junio), parada impostergable para disfrutar de un past¨ªs (?el an¨ªs de la cercana Marsella) o de una buena pel¨ªcula¡ O de ambas cosas.
La edici¨®n de 2020 de su famoso festival de fotograf¨ªa se ha cancelado por primera vez en 50?a?os
Van Gogh era el t¨ªpico holand¨¦s que soportaba de mala gana el gris-mar del Norte de los paisajes de su infancia, pero hab¨ªa abrevado en la tradici¨®n de la pintura neerlandesa y en sus colores apagados. Cuando su hermano Theo lo anim¨® a pintar y dejar de desperdiciar su tiempo en otros trabajos, decidi¨® tambi¨¦n sostenerlo econ¨®micamente, y ambos se mudaron a Par¨ªs. Desde Montmartre, el camino natural fue el sur, la luz provenzal y las barquitas hacia el Mediterr¨¢neo. En esa ruta Van Gogh descubri¨® Arl¨¦s, y all¨ª se estableci¨®, en 1888, en una casa amarilla (el color que te?¨ªa toda la ciudad) que quiso convertir en residencia de artistas. Pero a la Casa Amarilla de la Place Lamartine solo se acerc¨® Paul Gauguin, y vivi¨® all¨ª apenas unos meses, hasta que se pelearon. Entonces vino la noche del 23 al 24 de diciembre, cuando, apesadumbrado por la disputa y, seg¨²n parece, tras leer una carta de Theo en la que le anunciaba su boda, se cort¨® el l¨®bulo de la oreja izquierda y se lo hizo llegar a una chica de la que estaba enamorado, que trabajaba en un prost¨ªbulo (hay quien dice que su oficio all¨ª era el de limpiadora). A¨²n es posible hacer ese paseo hasta la Maison de Tol¨¦ran?ce, n¨²mero 1, y frente a la ventana con postigos de madera imaginar a aquella mujer sin saber qu¨¦ hacer con ese trozo de carne envuelto en papel de diario.
Un lugar del color de los girasoles
A partir de entonces, Van Gogh pas¨® por ingresos psiqui¨¢tricos y ya no dej¨® de pintar en colores vivos. De Arl¨¦s vienen los caracter¨ªsticos girasoles, su habitaci¨®n, el hospital, la noche estrellada y los paisajes en torno a la Camarga, esa zona de humedales del delta del R¨®dano. Actualmente es posible visitar exposiciones en lo que fue su asilo, hoy L¡¯Espace Van Gogh, pleno de jardines con flores. Tambi¨¦n resulta interesante lo que muestra la Fundaci¨®n Van Gogh, en un moderno edificio que rinde tributo a un exvecino poco convencional.
Gu¨ªa
- Les Rencontres d'Arles (rencontres-arles.com)
- Anfiteatro romano de Arl¨¦s (arenes-arles.com)
- L'Espace Van Gogh (Place F¨¦lix Rey)
- Fundaci¨®n Van Gogh (fondation-vincentvangogh-arles.org)
- Parc des Ateliers (luma-arles.org)
- Turismo de Arl¨¦s (arlestourisme.com)
Adem¨¢s de amarilla, Arl¨¦s es h¨²meda. El agua del delta y el gran lecho del r¨ªo se dejan sentir en cada sosegado paseo estival. Sin embargo, la placidez provinciana se est¨¢ viendo sobresaltada en los ¨²ltimos a?os por la llegada de la inversi¨®n extranjera y, con ella, de las celebridades que la pisan desde la remodelaci¨®n urban¨ªstica y su apuesta por los brillos de la industria cultural. As¨ª, unas viejas naves industriales dieron lugar al Parc des Ateliers, epicentro de la actividad expositiva de Les Rencontres de la Photographie, y al gran proyecto de Luma, que emplaza en ese bald¨ªo un gran edificio espejado de Frank Gehry. El proyecto de la Fundaci¨®n Luma para esas siete hect¨¢reas da forma a otra de esas capas de historia superpuesta de Arl¨¦s. Ahora, el edificio plateado de ¨¢ngulos agudos, que albergar¨¢ el centro de recursos art¨ªsticos del Parc des Ateliers, se eleva sobre el rudo perfil del anfiteatro. Para 2020 estaban previstos los fastos de su inauguraci¨®n, que seguramente se trasladar¨¢n a la primavera de 2021, porque el invierno aqu¨ª es ventoso y fr¨ªo, y los ¨²nicos valientes que pueblan la ciudad son los estudiantes de la ?cole Nationale Sup¨¦rieure de la Photographie, la ¨²nica escuela exclusivamente dedicada a la fotograf¨ªa en Francia.
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