Le?a, la apuesta carn¨ªvora del chef Dani Garc¨ªa

Le?a, la ¨²ltima marca del cocinero Dani Garc¨ªa, se encuentra en el mismo lugar que anta?o ocupaba en Marbella su famoso restaurante con tres estrellas Michelin. Tras un rotundo cambio de imagen se asemeja a un lujoso steak house, en terminolog¨ªa anglosajona. A pesar de sus apariencias, se trata de un asador desenfadado cuyas aspiraciones gastron¨®micas se hallan condicionadas por la rentabilidad a la que obliga la estudiada mercadotecnia por la que se rige el modelo.

Lo ratifica la carta, demasiado amplia, con una notable presencia de especialidades c¨¢rnicas espa?olas y norteamericanas, orientada a satisfacer a una clientela cosmopolita. No faltan el ribeye de vaca vieja, el lomo alto de wagyu, el tomahawk madurado y el brisket de ternera ahumada. Nada que ver con los tradicionales asadores vascos.

Fieles a sus objetivos, las cocinas sacan el mismo partido a los pollos asados que a los d?ner kebab, a las chuletas de carne roja, las alitas de pollo en yakitori, los filetes empanados o las t¨ªpicas hamburguesas. A todas luces una ambiciosa inmersi¨®n en el universo de las brasas a partir de productos rastreados con lupa. ¡°No ha sido f¨¢cil¡±, afirma Garc¨ªa. ¡°Ofrecemos carnes que gustan a la mayor¨ªa. Rehusamos las rojas muy infiltradas y las demasiado grasas, y no prestamos atenci¨®n a las de larga maduraci¨®n que atraen a unos pocos. De la ganader¨ªa La Finca proceden las terneras j¨®venes, adem¨¢s de cortes como el tomahawk y el porter house. Y tambi¨¦n la pica?a con destino a nuestras hamburguesas. La donostiarra Txogitxu nos aporta la mayor¨ªa de las carnes rojas; los Norte?os, piezas espec¨ªficas, mientras que los pollos proceden de Barcelona. Hasta pasamos por las brasas frutas y verduras¡±.

A pesar de que en su carta asoman ocho opciones verdes, incluido el baba ganush y la ensalada C¨¦sar, las verduras no son el fuerte: cumplen el ma¨ªz a la parrilla con tirabeques, as¨ª como las jud¨ªas de Kenia con chimichurri. La pasada vinculaci¨®n de Garc¨ªa con la alta cocina asoma en detalles como la vistosa manzana rellena de espuma de fuagr¨¢s con la que rinde homenaje al chef Heston Blumenthal. O en la t¨¦cnica que aplica al wiener schnitzel (escalope empanado). Y, por supuesto, en el equipo de sala, profesionales que trinchan, mezclan y flambean con las hechuras de un gran restaurante. Est¨¢n conseguidos el carpaccio de vaca vieja, el kebab, los yakipinchos, las empanadillas y las hamburguesas. Al final aguarda un buen sufl¨¦ de avellanas y un bab¨¢ al ron que convence.