Concord, en la casa de ¡®Mujercitas¡¯

En pocos lugares del mundo hay, por metro cuadrado, semejante densidad de grandes figuras que, si ya en su momento tuvieron una importancia inmensa para Estados Unidos, se convirtieron luego en estrellas de la literatura y el pensamiento universales. Nos referimos a Concord, en el Estado de Massachusetts, donde ¡ªuna vez que pasen las restricciones pand¨¦micas¡ª es posible visitar las casas de una serie de escritores en un solo paseo.

A las afueras de este apacible pueblo fue donde Henry David Thoreau construy¨® una casa frente a una laguna, en la que permaneci¨® algo m¨¢s de dos a?os observando la naturaleza y tomando apuntes reflexivos. De ello surgir¨ªa su libro Walden (1854), en el que habla de ese hogar que es posible conocer in situ mediante una r¨¦plica exacta en medio del bosque. Thoreau lo levant¨® en un terreno de Ralph Waldo Emerson, considerado l¨ªder del movimiento trascendentalista. Su hogar, la Ralph Waldo Emerson Memorial House, puede visitarse hoy como anta?o lo hac¨ªan intelectuales y estudiantes que llegaban de todas partes para charlar con el fil¨®sofo.

Uno de los m¨¢s insignes visitantes fue Walt Whitman; el autor de Hojas de hierba acudi¨® para ver a Emerson en una ocasi¨®n en la que se leyeron cartas de Thoreau, ya fallecido. Estaban presentes tambi¨¦n Amos Bronson Alcott y su hija Louisa May, autora de Mujercitas (1868-1869), cuya casa, como las de los autores citados ¡ªa los que cabe a?adir a Nathaniel Hawthorne, creador de La letra escarlata¡ª, es un aliciente tur¨ªstico en Concord.

Todo lo relativo a Louisa May Alcott renov¨® su actualidad gracias a la adaptaci¨®n cinematogr¨¢fica de su novela en 2019. Hoy es posible entrar en la llamada Orchard House donde vivieron los Alcott, justo al lado de la Concord School of Philosophy que cofund¨® el patriarca de la familia, un pedagogo de ideas revolucionarias en la educaci¨®n, siempre en busca de lo espiritual y la verdad moral. De este modo, Louisa May se empapar¨ªa desde ni?a de un gran ambiente cultural, de librepensadores, m¨ªstico y solidario. Y muy joven se apuntar¨ªa como voluntaria en un hospital de Washington durante la guerra de Secesi¨®n, haciendo jornadas maratonianas, hasta que enferm¨® de fiebre tifoidea y pulmon¨ªa y estuvo a punto de morir.

Un fallecimiento prematuro, el de su hermana Elizabeth, debido a la escarlatina contra¨ªda cuando ayudaba a una familia pobre, le inspir¨® el personaje de Beth March en su famosa obra, versionada en producciones televisivas, un musical, una ¨®pera y pel¨ªculas como la reciente de Greta Gerwig, que refleja esa idea de Alcott de no cumplir con los estereotipos de las mujeres de la ¨¦poca. La cineasta recre¨® de maravilla el hogar donde la autora escribi¨® su historia y en el que hoy pueden contemplarse objetos como el vestido de boda de Anna, la hermana mayor; el vestuario para las representaciones teatrales de la familia, el libro de recetas de la se?ora Alcott o los dibujos de May, la hermana menor.

Un pueblo plagado de historia

Aparte de luchar por los derechos de la mujer con su participaci¨®n en el movimiento sufragista, la escritora dio apoyo a la causa abolicionista. Es m¨¢s, en otra de las casas que ocuparon los Alcott en Concord, The Wayside, hay una placa que reconoce la labor de esta familia a la hora de ayudar a los esclavos a huir mediante la llamada red Tren Subterr¨¢neo, que proporcionaba a estos mapas, disfraces o direcciones donde podr¨ªan pedir cobijo.

As¨ª, el pueblo entronca con la historia en may¨²scu?las de Estados Unidos, como recuerda el Minute Man Visitor Center, a apenas 10 minutos en coche, cerca de la localidad de Lexington. En ¨¦l se puede ver un v¨ªdeo interactivo de lo que ocurri¨® la noche del 19 de abril de 1775, cuando estallaron las batallas de Lexington y Concord, que conformaron los primeros enfrentamientos de la guerra de Independencia contra Gran Breta?a. Esta visita se puede complementar con la del Concord Museum, fundado en 1886, y que a trav¨¦s de paneles explicativos y materiales expuestos en orden tem¨¢tico muestra los or¨ªgenes de esta ciudad y sus avatares hasta que el pa¨ªs consigui¨® independizarse. El visitante tambi¨¦n podr¨¢ conocer all¨ª la historia de los peregrinos y ver 250 pertenencias de Thoreau, una recreaci¨®n del estudio de Emerson, artefactos militares de la revoluci¨®n americana o piezas de arte decorativo desde el siglo XVII.

Este viaje por el tiempo podr¨ªa acabar en el cementerio Sleepy Hollow, concebido por una prestigiosa firma de arquitectos de paisajes, Cleveland y Copeland, y donde descansan los autores citados. Situado en la calle Bedford, cerca del centro de Concord, fue abierto en 1855, y fue Emerson el encargado de dar un discurso inaugural en el que elogi¨® su dise?o, que estrechaba lazos entre los monumentos y el entorno natural. El autor de Naturaleza, obra considerada como inicio del trascendentalismo, estaba destacando ya algo sustancial a su pensamiento espiritual, y que hoy puede a¨²n respirarse en ¨¢reas como la cercana Walden Pond State Reservation, que sirve como zona de ba?o en verano gracias a la peque?a playa que tiene su laguna, mientras que en invierno se congela y se cubre de nieve. Si anta?o Thoreau sinti¨® y contempl¨® el paso de las estaciones desde su casa, hoy este es el lugar id¨®neo para el recreo buc¨®lico o para una jornada de pesca.

Muy cerca se halla el Great Meadows National Wildlife Refuge, clave para que la educaci¨®n ambiental se prolongue en generaciones futuras, pues ofrece caminatas interpretativas sobre la naturaleza para los ni?os. Se extiende alrededor de los r¨ªos Concord y Sudbury, y se ha convertido en un sitio inmejorable para la observaci¨®n de aves. Los viajeros descubren all¨ª un espect¨¢culo de nen¨²fares y animales; una vida silvestre donde han encontrado su h¨¢bitat p¨¢jaros y tortugas, ¨¢nades reales y ciervos, zorros rojos, mapaches y conejos, comadrejas, castores y ardillas, a lo largo y ancho de estanques y senderos, haciendo buena la frase de Thoreau de que todo lo salvaje es honesto, aut¨¦ntico y bueno.

Toni Montesinos es autor de ¡®El sue?o esclavo. Tr¨ªos de art¨ªculos de comportamientos literarios¡¯ (El Desvelo).