Jordania: los lugares que deber¨ªas visitar que no son Petra
Jordania cautiva al visitante por otros tesoros arquitect¨®nicos m¨¢s all¨¢ de la gran ciudad de Petra. Desde sus famosos castillos en el desierto hasta ciudades romanas antiguas, Jordania es un pa¨ªs ¨²nico
Sin duda, en un viaje a Jordania no se puede obviar que el principal atractivo tur¨ªstico sea la ciudad de Petra, pero en el pa¨ªs hay muchas otras joyas arquitect¨®nicas a su altura. Toma nota, estas son algunas de ellas.
Wadi Rum, el desierto de Jordania
El llamado ¡°valle de la Luna¡± es uno de los desiertos m¨¢s fascinantes del mundo, hogar de tribus n¨®madas beduinas desde ¨¦pocas prehist¨®ricas y un paisaje digno de pel¨ªcula ¡ªqu¨¦ decir que de aqu¨ª surgi¨® Lawrence de Arabia ¡ª. Declarado patrimonio mundial de la Unesco, desde 2011, el desierto, que est¨¢ situado al suroeste del pa¨ªs, ha sido un punto importante de investigaci¨®n arqueol¨®gica gracias al descubrimiento del templo nabateo en 1933. Actualmente, Wadi Rum atrae a cientos de turistas que no quieren perderse una de las noches m¨¢s famosas de Oriente Pr¨®ximo, su silencio y esos colores m¨¢s propios de Marte que de la Tierra. Su paisaje ofrece una infinidad de versiones: en excursiones en 4¡Á4, en globo aerost¨¢tico, a caballo, en ultraligero, en globo de aire caliente, a pie, en moto o bicicleta y tambi¨¦n sobre ra¨ªles con el tren de la Jordan Heritage Revival Company, o a trav¨¦s de una de las rutas m¨¢s conocidas, la Jordan Trail.
Am¨¢n, la capital
La capital de Jordania es una ciudad de contrastes, una mezcla ¨²nica de c¨®mo el pasado y el presente se dan la mano. Ubicada en una zona monta?osa, entre el desierto y el valle del r¨ªo Jord¨¢n, Am¨¢n es un tesoro por descubrir. El bullicio de sus antiguos barrios y mercados centrales, donde aparecen diminutos talleres artesanales, convive con una Am¨¢n que se resiste a quedar atr¨¢s, con las galer¨ªas de arte de Jabal al Luweibdeh y el moderno barrio de Abdali para ir de compras o uno de sus mercados m¨¢s visitados y recientes, Souk Jara. La ciudadela de Am¨¢n permite a los visitantes precisamente descubrir esta evoluci¨®n con las mejores vistas del casco urbano y algunos de los espacios m¨¢s interesantes, como el complejo del palacio Omeya, el templo de H¨¦rcules y la iglesia bizantina.
Madaba y sus mosaicos
A unos 30 kil¨®metros de la ciudad de Am¨¢n, en el Camino del Rey, una carretera con m¨¢s de 5.000 a?os de historia, se encuentra Madaba, m¨¢s conocida como ¡°la ciudad de los mosaicos¡±. Esta maravilla cuenta con algunos de los mosaicos m¨¢s interesantes de Jordania, pero, sobre todo, con el llamado ¡°mapa de Madaba¡±, que es la representaci¨®n cartogr¨¢fica m¨¢s antigua de Jerusal¨¦n y Tierra Santa que se conserva a d¨ªa de hoy y que data del siglo VI despu¨¦s de Cristo. Aunque gran parte de este mapa ha desaparecido, m¨¢s de dos millones de piezas de azulejos ubican los principales sitios b¨ªblicos de Oriente Pr¨®ximo en el suelo de la iglesia ortodoxa griega de San Jorge.
Adem¨¢s, la iglesia de la Virgen de los Ap¨®stoles y el Museo Arqueol¨®gico de Madaba tambi¨¦n conservan mosaicos a¨²n m¨¢s antiguos con incre¨ªbles detalles de flores, plantas, aves, animales y escenas de mitolog¨ªa y de la vida cotidiana.
Jerash, la ciudad romana
Jerash es la Pompeya del este, una fascinante ciudad romana con 6.500 a?os de historia a unos 50 kil¨®metros de Am¨¢n. Fuera de Italia, es aqu¨ª donde se encuentran las mejores ruinas romanas conservadas del mundo, adem¨¢s de las m¨¢s visitadas.
Rodeada de zonas boscosas y cuencas f¨¦rtiles, Jerash fue conquistada por el general Pompeyo en el 63 antes de Cristo, convirti¨¦ndose as¨ª en una de las 10 grandes ciudades romanas de la zona oriental de la Dec¨¢polis. Gerasa, como se la conoc¨ªa entonces, experiment¨® una edad de oro, raz¨®n por la cual merece la pena conocerla al detalle. Su anfiteatro, los arcos y las plazas, por nombrar algunos de los restos que se conservan, se encuentran en excelentes condiciones debido al clima seco del lugar. Pero no siempre fue as¨ª, ya que estuvo sepultada bajo el desierto hasta que fue descubierta a principios del siglo XIX. El museo arqueol¨®gico de Jerash se estableci¨® en 1923 y su centro de visitantes, en los a?os sesenta.
El monte Nebo
Si existe un lugar religioso en Jordania ese es el monte Nebo. En un viaje al pa¨ªs no puede faltar una visita a este enclave, que se encuentra, adem¨¢s, en ruta hacia la ciudad de Madaba y a la capital del reino de Am¨¢n. Seg¨²n la Biblia, este fue el sitio donde se le mostr¨® a Mois¨¦s la Tierra Santa a la que nunca podr¨ªa entrar, as¨ª como el lugar donde muri¨®. Fue en su honor donde se construy¨® una iglesia y un monasterio.
El monte Nebo, que tambi¨¦n aparece en numerosos vers¨ªculos de la Biblia, ofrece unas espectaculares vistas a 700 metros sobre el nivel del mar. Adem¨¢s, alberga incre¨ªbles restos arqueol¨®gicos, mosaicos bizantinos bien conservados y la iglesia Memorial de Mois¨¦s del siglo IV. Es un lugar que re¨²ne cultura, historia y religi¨®n a partes iguales.
Castillos del desierto
Jordania no se puede entender sin sus numerosos castillos del desierto, testigos de la historia del pa¨ªs y fuente inagotable de inspiraci¨®n. A d¨ªa de hoy, tienen diferentes usos, sirven como centros de agricultura, comercio, pabellones hoteleros, puestos fronterizos o estaciones de autocaravanas, y conservan mosaicos, frescos, esculturas de piedra y estucos e ilustraciones, inspirados en las tradiciones persas y grecorromanas del siglo VIII.
Algunos de los m¨¢s conocidos, situados al este y al sur de Am¨¢n, son el palacio Al Mshatta o palacio de invierno, construido por los omeyas; el castillo de Al Harrana o Kharana, ubicado en el valle de Al Harrana, el castillo de Qasr Amra, construido durante el reinado del califa omeya Yazid bin Abd al Malik y patrimonio mundial de la Unesco; Qasr Burqu¡¯, construido por los romanos para mantener el control de una fuente de agua dulce, Qasr Al Hallabat, una de las joyas arqueol¨®gicas m¨¢s valoradas de Jordania, Qasr Hammam al Sarah, tambi¨¦n conocido como el palacio del este de Hallabat, y el palacio omeya Qasr Tuba.
Mar Muerto
Una visita al mar Muerto es una combinaci¨®n de turismo religioso y de ocio. Considerado como el spa m¨¢s grande del mundo, el mar Muerto (que no es un mar sino un lago) es conocido por sus aguas medicinales ricas en calcio, magnesio, potasio y bromo, y por el lodo con el que muchos visitantes se embadurnan el cuerpo. Tambi¨¦n por la capacidad que tiene para hacer flotar a sus ba?istas; esto sucede porque se compone en un 34% de soluci¨®n salina, sus aguas son casi 10 veces m¨¢s saladas que el resto. En ellas se dice que han flotado muchos personajes hist¨®ricos como el rey Herodes I el Grande y la reina Cleopatra.
Wadi Mujib
Si llegas hasta el mar Muerto, tendr¨¢s que visitar la reserva de la biosfera de Mujib, la reserva natural m¨¢s baja del mundo que alberga una variedad espectacular de paisajes cerca de la costa oriental del mar Muerto. Ubicada en la profunda garganta de Wadi Mujib, se introduce a 410 metros bajo el nivel del mar y cuenta con una magn¨ªfica biodiversidad: 300 especies de plantas, 10 especies de carn¨ªvoros y numerosas especies de aves.
?Te gustar¨ªa conocer Jordania con un gu¨ªa? De la mano de Elena del Amo, periodista apasionada de la cultura ¨¢rabe y colaboradora de los principales medios de viajes de Espa?a, y de EL PA?S VIAJES, podr¨¢s conocer este destino en profundidad en un viaje excepcional. El pr¨®ximo mes de noviembre, un grupo de viajeros se adentrar¨¢ en Jordania durante 9 d¨ªas para conocer los famosos castillos de los cruzados; la Pompeya del este, la ciudad romana de Jerash; la visi¨®n que Mois¨¦s tuvo desde la cima del monte Nebo, y el cielo estrellado en medio del desierto. Todo esto sumado a las aguas deprimidas del mar Muerto. En este enlace tienes m¨¢s informaci¨®n.
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