Camer¨²n: un viaje entre tribus ancestrales, ciudades monumentales y selva tropical

En el coraz¨®n de ?frica, Camer¨²n late de manera incesante. Este pa¨ªs es uno de los m¨¢s fascinantes del continente y, sin duda tambi¨¦n, de los m¨¢s inesperados por su variedad de paisajes: al este su selva tropical, de las pocas v¨ªrgenes que quedan en el mundo, sorprende al viajero, tambi¨¦n lo hacen sus paradis¨ªacas playas, una de las m¨¢s conocidas es Ebodj¨¦, y los bosques monta?osos del monte Camer¨²n, un volc¨¢n en activo y el punto m¨¢s alto del ?frica Occidental. Su erupci¨®n m¨¢s reciente tuvo lugar en el a?o 2012.

Camer¨²n es tambi¨¦n des¨¦rtico, en el norte, sus paisajes se tornan ¨¢ridos irrumpiendo en las zonas rocosas del Sahel. Camer¨²n es una ?frica en miniatura, por supuesto, no faltan en este mosaico parques nacionales como el de Nawa, uno de los m¨¢s accesibles, donde se pueden ver elefantes, hipop¨®tamos, jirafas, ant¨ªlopes y algunos leones (aunque esto sea m¨¢s complicado); adem¨¢s de sus pueblos y tribus ancestrales, se cuentan actualmente unas 200 etnias distintas en el pa¨ªs. La variedad ling¨¹¨ªstica tambi¨¦n es significativa, con unos 250 idiomas locales, siendo, eso s¨ª, el ingl¨¦s y el franc¨¦s sus idiomas predominantes. Y qu¨¦ decir de la m¨²sica camerunesa, que forma parte de la cultura popular, una parte que sin excepci¨®n impregna su d¨ªa a d¨ªa y el esp¨ªritu en¨¦rgico de su poblaci¨®n.

En contraste con la parte m¨¢s ancestral, sus ciudades se abren paso: Yaund¨¦, capital de Camer¨²n, siempre merece una visita, sobre todo para los amantes de la arquitectura, mientras que Duala, en la costa, le pisa los talones consider¨¢ndose hoy en d¨ªa como uno de los motores econ¨®micos del pa¨ªs. Su arquitectura art d¨¦co casa perfectamente con un entorno exuberante en el que no faltan cascadas, monta?as y reservas de chimpanc¨¦s a los pies del r¨ªo Sanaga.

Si est¨¢s pensando en recorrer este sorprendente pa¨ªs africano, nada como hacerlo de la mano de EL PA?S VIAJES y el experto en el continente, ?lvaro Planchuelo, que durante 11 d¨ªas en enero de 2025 visitar¨¢n, en un viaje de aut¨¦ntica aventura, las dos regiones m¨¢s fascinantes de Camer¨²n: la zona selv¨¢tica del este y el norte saheliano. ¡°Este viaje ha sido dise?ado para descubrir una ?frica distinta a cualquier otra que haya visitado¡±, explican. Se adentrar¨¢n en los ¨²ltimos bosques tropicales v¨ªrgenes de Camer¨²n, descubriendo los pueblos bant¨²es y los pigmeos baka que siguen viviendo de la caza y la recolecci¨®n, para continuar por el valle de Faro, territorio de tribus n¨®madas, y montes Vokre, refugio de los ¨²ltimos pueblos animistas. Puedes encontrar m¨¢s informaci¨®n en este enlace.

Yaund¨¦, la capital bant¨²

La capital pol¨ªtica de Camer¨²n, desde 1922, es tambi¨¦n la ciudad de las siete colinas, como se la conoce popularmente, porque se encuentra ubicada en un conjunto de colinas coronadas por los montes Mbam, Minkom, Nkolodom y Eloumden. Con m¨¢s de dos millones de habitantes, la ciudad, capital de la etnia bant¨², es conocida por su arquitectura, sobre todo por sus edificios gubernamentales, algunos siguen en pie desde los or¨ªgenes de la ciudad ¡ªfundada en 1889 por los colonos alemanes¡ª. Puedes encontrar algunos de ellos en el barrio de Bastos, ubicaci¨®n oficial de la mayor¨ªa de las embajadas, tambi¨¦n en el de Etoudi, donde se localiza el palacio presidencial.

Se a?aden sus museos, el de arte de Camer¨²n, situado en un monasterio benedictino, y el Museo Nacional, adem¨¢s de Afhemi, un museo con m¨¢s de 200 objetos y pinturas de arte tradicional camerun¨¦s abierto en 1999.

De la capital de Camer¨²n destacan sus numerosos monumentos hist¨®ricos, uno de los m¨¢s fotografiados es el de la Reunificaci¨®n, levantado en los a?os setenta para conmemorar la fusi¨®n poscolonial del Camer¨²n brit¨¢nico y franc¨¦s. Tambi¨¦n es curiosa la bas¨ªlica Mar¨ªa Reina de los Ap¨®stoles, inaugurada en 2006. Una muestra m¨¢s de la variedad religiosa de la ciudad y del pa¨ªs.

La ciudad no acaba aqu¨ª. Yaund¨¦ no escatima en posibilidades, adem¨¢s del Mont F¨¦b¨¦, que cuenta con las mejores vistas de la ciudad y con uno de sus hoteles m¨¢s conocidos, tambi¨¦n podr¨¢s conocer el Parc de la M¨¦fou, cuyo principal atractivo son sus especies y vegetaci¨®n. El conocido como Santuario de Vida Silvestre de M¨¦fou y Reserva de M¨¦fou protege algunas de las especies de primates m¨¢s amenazadas de ?frica: chimpanc¨¦s, gorilas y monos viven en este espacio de m¨¢s de 1.000 hect¨¢reas que se puede visitar. Asimismo, a unos pocos kil¨®metros de la ciudad se encuentra Ebogo, un espacio natural con ¨¢rboles de m¨¢s de 300 a?os de vida y hasta 12 metros de altura.

Para llegar hasta Yaund¨¦ es f¨¢cil acceder en tren, como en la mayor¨ªa del pa¨ªs, uno de los mejor comunicados de toda ?frica.

M¨¢s all¨¢ de Yaund¨¦

Yaund¨¦ no es la ¨²nica ciudad camerunesa que merece la pena visitar, de hecho, una de las que se conocer¨¢n con EL PA?S VIAJES es Ngaound¨¦r¨¦, ubicada a unos 400 km de la capital del pa¨ªs y con m¨¢s de 150.000 habitantes. Esta ciudad es la capital de la provincia de Adamawa, que juega un papel econ¨®mico en la regi¨®n dado que conecta por tren el norte de Camer¨²n y Chad con el puerto de Duala, otra de las grandes urbes de Camer¨²n, y que adem¨¢s posee ganado y algod¨®n. A pesar de su crecimiento econ¨®mico, Ngaound¨¦r¨¦ mantiene su antigua atm¨®sfera medieval alrededor del palacio de Lamido, en el barrio antiguo de Sultanato, donde sobreviven algunas casas tradicionales de adobe, y el viejo mercado colonial. Este es el Camer¨²n musulm¨¢n, tan diferente de la zona sure?a selv¨¢tica y cristiana.

Los pueblos modernos de los alrededores de Ngaound¨¦r¨¦ ¡ªconstruidos con cemento y chapa de zinc¡ª desaparecen pasados unos 20 kil¨®metros, y solamente se ver¨¢n pueblos tradicionales de adobe a lo largo de la carretera de tierra.

A unos 196 kil¨®metros de Ngaound¨¦r¨¦, la ciudad de Poli es otra de las que m¨¢s sorprenden al viajero. La capital del valle de Faro destaca por sus pueblos, sin duda, los mbororos, etnia ganadera n¨®mada que vive en esta regi¨®n desde hace siglos y que conserva su cultura tradicional hasta nuestros d¨ªas, es una de las m¨¢s interesantes. Entre todas sus costumbres, es curiosa su manera de decorar el rostro y parte del cuerpo con bellos y complejos tatuajes que marcan la clase social y la situaci¨®n marital del que los lleva. Aqu¨ª los ancianos de la tribu son quienes comandan el destino de su pueblo y conservan las viejas costumbres del honor y el respeto por la naturaleza.

En Poli tambi¨¦n se ubica la tribu de los dowayos, cuya vida sigue aferrada a lo ancestral. Son campesinos y su d¨ªa a d¨ªa se desenvuelve alrededor de los campos de mijo; de hecho, organizan festividades antes y despu¨¦s de las cosechas, donde beben abundante bil-bil, la cerveza local preparada a partir de mijo fermentado. Siempre hay que pedir permiso para participar en cualquiera de estas celebraciones. Es una sociedad africana que est¨¢ fuertemente atada a sus valores animistas y a su deseo de preservarlos de todo lo que ellos consideran modernidad.

Selva tropical

Al este del pa¨ªs y a pocos kil¨®metros de Yaund¨¦, se puede conocer la selva tropical de Camer¨²n, en esta zona todav¨ªa es predominante y de f¨¢cil acceso. De Yaund¨¦ a Messamena el territorio pertenece a los bant¨²es, grupo mayoritario en Camer¨²n y al que pertenece la ¨¦lite pol¨ªtica del pa¨ªs. Es un lugar id¨®neo para realizar distintas expediciones, y para conocer otras etnias m¨¢s marginales como los pigmeos baka.

En este lugar, la organizaci¨®n Tribal Heritage lleva m¨¢s de una d¨¦cada colaborando con este clan. Este pueblo es muy especial por su vinculaci¨®n con el bosque tropical y porque ha conservado gran parte de su cultura animista. Entre algunas de sus actividades m¨¢s comunes est¨¢n la recolecci¨®n de ?ames salvajes, plantas y cortezas medicinales y la caza. Durante la noche, realizan cantos polif¨®nicos y la danza sagrada Ejengi (esp¨ªritu de la selva). Esta ser¨¢ una de las experiencias que se vivir¨¢n en el viaje de EL PA?S VIAJES en enero de 2025.

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