Claves del complicado tablero pol¨ªtico para las pr¨®ximas elecciones legislativas en Francia

Vuelta a empezar. Tras la reelecci¨®n en abril de Emmanuel Macron como presidente de la Rep¨²blica, los franceses votar¨¢n el 12 y el 19 de junio a los diputados de la Asamblea Nacional. Hay una excepci¨®n francesa. Uno: el presidencialismo y el sistema electoral, mayoritario con dos vueltas; y dos: la lucha por la supervivencia de los grandes partidos antes hegem¨®nicos a izquierda y derecha.

Tres meses, dos elecciones

¡ª Francia escoge a sus gobernantes para los pr¨®ximos cinco a?os en dos tiempos y en dos meses. El 10 y el 24 de abril se celebraron las elecciones presidenciales para votar al presidente de la Rep¨²blica. El 12 y el 19 de junio, las legislativas seleccionar¨¢n a los 577 diputados de la Asamblea Nacional. La mayor¨ªa parlamentaria determinar¨¢ el Gobierno y al primer ministro.

¡ª Son elecciones a dos vueltas. En la primera de las presidenciales, participan los candidatos que consiguen un m¨ªnimo de 500 firmas o avales de alcaldes, parlamentarios y otros cargos electos. Este a?o eran 12. Pasan a la segunda vuelta los dos m¨¢s votados. En abril fueron el presidente Emmanuel Macron y Marine Le Pen, la candidata de la extrema derecha.

¡ª Las legislativas son, en realidad, 577 elecciones simult¨¢neas: cada distrito nombra a su diputado. Se clasifican para la segunda los dos m¨¢s votados y quienes hayan superado el 12,5% de los sufragios del total de ciudadanos con derecho a voto, aunque estos no lo hayan ejercido.

El ¡®enigma Macron¡¯

¡ª La Constituci¨®n francesa de 1958 otorga poderes enormes al presidente. Desde 2017 es Emmanuel Macron, que lleg¨® al poder con escasa experiencia pol¨ªtica. Formado en la elitista Escuela Nacional de Administraci¨®n (ENA), hab¨ªa sido inspector de Finanzas, banquero en Rothschild, consejero del presidente socialista Fran?ois Hollande y durante dos a?os ministro de Econom¨ªa.

¡ª Ideol¨®gicamente se defin¨ªa como ¡°ni de izquierdas ni de derechas¡±. Se le puede describir como un centrista pragm¨¢tico. Ascendi¨® al poder con el apoyo de socialistas moderados, y gobern¨® en su primer quinquenio con primeros ministros de derechas. Ha combinado reformas que en Francia se consideran liberales, como la del mercado laboral, con pol¨ªticas de gasto masivo en la pandemia. Tras su segunda victoria, ha nombrado primera ministra a ?lisabeth Borne, adscrita al ala socialdem¨®crata del Gobierno.

Izquierda: uni¨®n por necesidad, y radicalidad

¡ª Hay antecedentes de candidaturas y gobiernos conjuntos de la izquierda. La novedad es que no es el Partido Socialista el que domina la alianza, sino la izquierda radical o populista de Jean-Luc M¨¦lenchon, el veterano l¨ªder de La Francia Insumisa. Su candidatura incluye a socialistas, ecologistas y comunistas. Aspira a convertirse en primer ministro.

¡ª El programa conjunto plantea, entre otros puntos, ¡°no respetar¡± ciertas reglas europeas y un reparto de los distritos electorales entre los cuatro partidos del acuerdo. Se trata de que haya un candidato para no dispersar el voto.

¡ª Que el PS se haya unido a una candidatura bajo el liderazgo de M¨¦lenchon, un pol¨ªtico euroesc¨¦ptico, anticapitalista y declarado admirador de Hugo Ch¨¢vez, se explica en parte por la necesidad de supervivencia. Su candidata a las presidenciales, Anne Hidalgo, obtuvo un 1,7% de los votos. M¨¦lenchon, un 22%. El acuerdo otorga 70 distritos a los socialistas, lo que podr¨ªa garantizarles hasta 30 esca?os, una tabla de salvaci¨®n que esperan les permitir¨¢ sobrevivir y reconstruirse.

Los l¨ªmites de la extrema derecha

¡ª En las presidenciales de 2017, Marine Le Pen obtuvo casi 11 millones de votos, un 34%. En 2022, m¨¢s de 13 millones: un 42%. No hay otro pa¨ªs en Europa occidental donde la extrema derecha sea tan fuerte. Adem¨¢s, en estas elecciones ha surgido otro candidato a¨²n m¨¢s a la derecha: el tertuliano ?ric Zemmour.

¡ª El problema de la extrema derecha francesa es que no alcanza el poder. El Reagrupamiento Nacional (RN) de Le Pen gobierna apenas una decena de los cerca de 36.000 municipios franceses. No manda en ninguna regi¨®n. En la Asamblea Nacional tiene seis diputados, insuficiente para formar un grupo parlamentario.

¡ª Es probable que en junio el RN ampl¨ªe su presencia parlamentaria, pero siempre tropieza con el mismo problema: cuando pasa a la segunda vuelta, la mayor¨ªa de los votantes se unen para evitar su victoria.

Tres bloques con partidos unipersonales

¡ª El panorama pol¨ªtico ha pasado de estar dominado por dos partidos tradicionales de centroizquierda y centroderecha (el PS y Los Republicanos, hermanados con el PP espa?ol) a un esquema con tres polos: el centrismo de Macron, la izquierda euroesc¨¦ptica y anticapitalista de M¨¦lenchon, y la extrema derecha de Le Pen. Es probable que la pr¨®xima Asamblea Nacional reproduzca este esquema.

¡ª Los partidos tradicionales est¨¢n en crisis. Macron, Le Pen y M¨¦lenchon encabezan movimientos personalistas. Solo queda una fuerza identificada con el sistema, mientras que antes el PS y Los Republicanos compart¨ªan consensos b¨¢sicos sobre Europa o la econom¨ªa de mercado. Hoy una mayor¨ªa de los franceses ¡ª?los votantes de Le Pen y M¨¦lenchon¡ª se integra en un frente de rechazo al statu quo. Con una abstenci¨®n que crece, aparece una Francia dividida en clases sociales (las personas con m¨¢s ingresos y nivel educativo votan a Macron, los de menos ingresos y menos diplomas a Le Pen), grupos demogr¨¢ficos (los jubilados, Macron; los j¨®venes, M¨¦lenchon) y territorios (las ciudades son para Macron; las zonas rurales, para Le Pen). ¡ªeps