Las vicisitudes de un guardia civil musulm¨¢n para ascender a capit¨¢n
El Supremo le quita dos sanciones al agente por quejarse de que se hab¨ªa atentado contra su libertad religiosa en una entrevista

La Sala de lo Militar del Tribunal Supremo ha revocado dos sanciones graves (retirada del sueldo durante 15 d¨ªas y suspensi¨®n de empleo durante un mes) impuestas a un brigada de la Guardia Civil por denunciar que se atent¨® contra su libertad religiosa durante la entrevista que se le hizo en el marco de un examen para ascender a capit¨¢n.
A. B.-H. ?., con idiomas, una licenciatura y un m¨¢ster de Derecho Isl¨¢mico, denunci¨® al alf¨¦rez y al capit¨¢n que le entrevistaron porque, seg¨²n explic¨®, el cuestionario se centr¨® ¡°casi en exclusiva¡± en preguntas relacionadas con su condici¨®n de musulm¨¢n.
B.-H., defendido por Fernando Castellanos, se present¨® a un examen para capit¨¢n el 23 de junio de 2015. Todos los ejercicios le salieron bien, pero finalmente se le declar¨® ¡°no apto" para el cargo en relaci¨®n con "las competencias de mando y direcci¨®n y de valores institucionales¡±. El brigada consider¨® que en la entrevista se le hab¨ªa privado de su libertad religiosa y denunci¨® lo ocurrido ante sus superiores, entre ellos, al general jefe de la Guardia Civil de Andaluc¨ªa.
El brigada elev¨® finalmente el asunto a los tribunales. Tras un laberinto de recursos internos contra los entrevistadores y fallos judiciales adversos, el Supremo, en una sentencia dictada por unanimidad de sus magistrados, le ha dado la raz¨®n y revoca las dos sanciones contra ¨¦l impuestas por la Guardia Civil y avaladas luego por el Tribunal Central Militar.
B.-H. sali¨® muy enfadado de la entrevista, hecha por psic¨®logos de la Guardia Civil. Entre otros argumentos, los entrevistadores justificaron su ineptitud para ascender en que, ¡°aunque su discurso y exposici¨®n muestran un nivel superior a la media (...), pone en tela de juicio la pol¨ªtica de seguridad de la Guardia Civil y del Estado en general respecto al Islam¡±. Los examinadores le preguntaron por su pasado en la Brigada de Informaci¨®n del instituto armado, que B.-H. abandon¨® en 2011 tras ocho de trabajo en ella por haber mostrado discrepancias con determinadas t¨¦cnicas de investigaci¨®n en las mezquitas.
Los entrevistadores pusieron de relieve en su informe algunas quejas del brigada por la escasez de ¡°felicitaciones y condecoraciones¡± por su trabajo y conclu¨ªan que este ¡°antepon¨ªa su perspectiva musulm¨¢n a valores institucionales¡±; y tambi¨¦n que su perfil "no concuerda" con el que debe de tener un oficial de la Guardia Civil, puesto que ¡°no cree en la importancia de la disciplina como valor a defender y antepone su percepci¨®n social a su rol como miembro de la Guardia Civil¡±.
Tras recibir el ¡°no apto¡±, el brigada envi¨® un correo electr¨®nico a la Jefatura de Ense?anza y Psicolog¨ªa de la Guardia Civil quej¨¢ndose de que el alf¨¦rez y el capit¨¢n que le examinaron centraron casi todas las preguntas en su religi¨®n isl¨¢mica, lo que, expuso, ¡°vulnera la igualdad y no discriminaci¨®n por raz¨®n de raza, credo e ideolog¨ªa¡±. Confes¨® que este hecho le hab¨ªa causado ¡°indignaci¨®n y ansiedad¡± e interpret¨® que el contenido de la entrevista hab¨ªa sido ¡°determinante¡± para vetarle el ascenso. Le enfad¨® especialmente que se tuvieran en cuenta las discrepancias que expres¨® hace nueve a?os, cuando estaba en la Brigada de Informaci¨®n, "sobre las t¨¦cnicas de investigaci¨®n generalistas llevadas a cabo en su etapa como especialista; discrepancias¡±, a?adi¨® el brigada, ¡°basadas en normas legales que proh¨ªben criminalizar a colectivos y crear ficheros de datos basados exclusivamente en religi¨®n e ideolog¨ªa¡±. Por tales discrepancias se le conmin¨® entonces a cambiar de servicio.
El brigada se quej¨® por escrito de la entrevista y el 24 de junio de 2015 se le cit¨® para una revisi¨®n de su examen en la sede de Escuela de Guardias J¨®venes que posee en Valdemoro la Guardia Civil. Tambi¨¦n fue entrevistado, esta vez por un capit¨¢n y un comandante, y estos mantuvieron la calificaci¨®n de "no apto". El brigada tach¨® la revisi¨®n de su examen como ¡°un ejercicio absoluto de cinismo¡±, ya que le espetaron que no pose¨ªa "valores idiosincr¨¢ticos de la instituci¨®n" y que no cre¨ªa "en la importancia de la disciplina como valor a defender dentro de la Guardia Civil¡±.
¡°El acto de revisi¨®n adoleci¨® de parcialidad y valid¨® un acto discriminatorio en una falta absoluta de argumentos y arbitrariedad¡±, refut¨® el brigada. ¡°Nadie puede ser obligado a declarar sobre su ideolog¨ªa, religi¨®n o creencias¡±, a?adi¨® en sus recursos por todo lo ocurrido.
El asunto se embroll¨® y un general de la Guardia Civil, al conocer los correos y las denuncias internas contra los entrevistadores, orden¨® que se abriese una investigaci¨®n reservada, que fue archivada posteriormente al entender la Guardia Civil que las entrevistas fueron correctas. Pero el brigada no se detuvo y, en enero de 2016, volvi¨® a denunciar por v¨ªa interna tanto a los entrevistadores iniciales como a los que le revisaron su examen: consider¨® que se hab¨ªa actuado con prejuicios y que lo sucedido era un acto de discriminaci¨®n por ser musulm¨¢n.
El brigada acudi¨® entonces a un tribunal de lo contencioso-administrativo de Madrid disconforme con su calificaci¨®n de no apto. Aleg¨® que la entrevista fue discriminatoria, conten¨ªa ¡°prejuicios y subjetividad¡± y era de ¡°escaso valor cient¨ªfico¡±. Este tribunal fall¨® en contra de sus argumentos: ¡°No se cuestion¨® su religi¨®n isl¨¢mica en la entrevista, solo su ¨¢mbito profesional, aunque indirectamente hubiese salido a relucir¡± su condici¨®n de musulm¨¢n. Finalmente, la Direcci¨®n General de la Guardia Civil, tras analizar el contenido de los correos electr¨®nicos y de sus recursos, decidi¨® imponerle dos sanciones, una de 15 d¨ªas sin sueldo por ¡°hacer manifestaciones contrarias a la disciplina basadas en aseveraciones falsas¡± y otra de un mes de suspensi¨®n de empleo por ¡°falta de respeto a la autoridad¡±.
El brigada apel¨® ambas sanciones ante el Tribunal Central Militar, que las aval¨®. Fue cuando apel¨® en casaci¨®n ante la Sala de lo Militar del Supremo. El alto tribunal, en una sentencia del magistrado Fernando Pignatelli, ordena que se le delvuelva el dinero que se le quit¨® de la n¨®nima y que desaparezcan de su expediente ambas sanciones. El tribunal se?ala que las apreciaciones que efect¨²a el brigada sobre su entrevista no pueden ser objeto de sanci¨®n porque est¨¢n amparadas en el ¡°derecho fundamental a la libertad de expresi¨®n y en el derecho de defensas¡± ante una resoluci¨®n que considera injusta y que supone un menoscabo para sus l¨ªcitas expectativas de promoci¨®n en la Guardia Civil.
El Supremo se?ala que lo que expuso sobre su entrevista (es decir, que ¡°casi en exclusividad¡± se bas¨® en su condici¨®n de musulm¨¢n) no fue una aseveraci¨®n falsa, sino real. Y afirma, por otro lado, que los escritos del brigada no contienen ¡°frases o palabras insultantes ni despectivas ni irrespetuosas, m¨¢s all¨¢ de relatar unos hechos (que fue discriminado en la entrevista) que, de haberse acreditado como ciertos, resultar¨ªan ser objetivamente grave. No puede olvidarse", subraya el alto tribunal, "la desafortunada y reveladora frase del capit¨¢n [que le hizo la entrevista] y que hizo constar, entre otros extremos, que el hoy recurrente antepone su perspectiva ¨¦tnica (musulm¨¢n) a valores institucionales¡±. Indica el tribunal que la libertad religiosa es un derecho fundamental.
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