El delegado del Gobierno, tras declarar ante la juez del ¡®caso 8-M¡¯: ¡°Mi actuaci¨®n fue conforme a la ley¡±

Con gran puntualidad y expectaci¨®n, a las 15.30 de este mi¨¦rcoles, ha arrancado la declaraci¨®n como imputado del delegado del Gobierno en Madrid, el socialista Jos¨¦ Manuel Franco, al que la magistrada Carmen Rodr¨ªguez-Medel atribuye un presunto delito de prevaricaci¨®n por permitir la celebraci¨®n de manifestaciones en la regi¨®n durante la fase de expansi¨®n del coronavirus. Entre otras, la marcha feminista del 8 de marzo. ¡°He dejado claro que mi actuaci¨®n fue conforme a la ley¡±, ha insistido el pol¨ªtico a la salida del juzgado.

Con esta cita, el caso 8-M se adentra en un nuevo escenario. Tras tres meses de intrucci¨®n y un terremoto pol¨ªtico a escala nacional, el ¨²nico imputado en la causa se ha sentado finalmente este mi¨¦rcoles ante la magistrada del Juzgado de Instrucci¨®n 51 de capital para responder a sus preguntas. Lo ha hecho durante m¨¢s de una hora. Franco, l¨ªder tambi¨¦n del Partido Socialista de Madrid (PSOE-M), ha defendido ante Rodr¨ªguez-Medel que la Delegaci¨®n del Gobierno en la Comunidad actu¨® siempre respetando la legislaci¨®n y de acuerdo a las noticias sobre el coronavirus que ten¨ªan entonces.

¡°No hab¨ªa en aquel momento ning¨²n elemento que me llevase a prohibir un derecho fundamental como es el derecho a manifestaci¨®n¡±, ha recalcado Franco a la salida del juzgado. ¡°No me puedo considerar responsable del 8-M¡±, ha apostillado a preguntas de los periodistas, antes de aprovechar la comparecencia p¨²blica para defender la labor de la Guardia Civil ¡°como instituci¨®n¡±. Eso s¨ª, ha introducido un importante matiz al referirse a los dos informes enviados por el instituto armado a la juez y que lo se?alan directamente, adem¨¢s de contener especulaciones y algunos errores: ¡°L¨®gicamente, no puedo estar de acuerdo con los informes que han hecho¡±.

Franco ha centrado, en definitiva, su defensa en unos argumentos que ya avanz¨® la Abogac¨ªa del Estado en sus primeros escritos, cuando acus¨® a la juez de haber abierto una ¡°causa general¡± contra el Gobierno. Con los datos que entonces manejaban en el organismo, no se pod¨ªa prohibir un derecho fundamental. ¡°Se hizo lo que en aquel momento marcaba la ley y lo que nos dec¨ªan los expertos sanitarios¡±, ha repetido este mi¨¦rcoles el dirigente socialista. Rodr¨ªguez-Medel, que suma ya m¨¢s de 3.000 folios de investigaci¨®n judicial, trata de dilucidar si el representante del Ejecutivo en la Comunidad permiti¨®, por activa o por pasiva, toda una bater¨ªa de concentraciones cuando ya se contaba con informaci¨®n suficiente para prohibirlas por razones de fuerza mayor. Franco es el ¨²nico imputado en la causa, aunque la Fiscal¨ªa y la Abogac¨ªa del Estado piden el archivo.

La juez ha centrado sus preguntas en los procedimientos que regulan la prohibici¨®n o celebraci¨®n de manifestaciones. Franco ha defendido el ejercicio de los derechos fundamentales. "El derecho de reuni¨®n es uno de ellos y solo se puede prohibir una manifestaci¨®n por motivos muy concretos, muy tasados y muy graves. El 7 de marzo [v¨ªspera del D¨ªa de la Mujer] no se daba ninguna de esas circunstancias¡±, ha afirmado el delegado del Gobierno seg¨²n fuentes presentes en la sala. El informe en el que el forense afirmaba que ¡°la hecatombe se ve¨ªa venir¡± no ha salido a colaci¨®n durante la vista.

La magistrada tambi¨¦n ha preguntado al delegado si hab¨ªa recibido indicaciones de autoridades sanitarias o pol¨ªticas favorables o contrarias a que se permitieran las manifestaciones del 8-M. Franco le ha contestado que no recibi¨® ¡°ninguna notificaci¨®n, recomendaci¨®n ni en un sentido ni en el otro. Ni favorable a la celebraci¨®n ni pidiendo su prohibici¨®n¡±.

En su declaraci¨®n ante la juez, Franco ha sido requerido por dos correos que la Direcci¨®n de Salud P¨²blica de la Comunidad de Madrid remiti¨® el 7 de marzo a la Delegaci¨®n casi a las nueve de la noche. En ellos se hablaba de lo que iba a hacer la consejer¨ªa de sanidad respecto a la suspensi¨®n de unos cursos de formaci¨®n en centros sanitarios y tambi¨¦n de unas medidas de aislamiento en centros de mayores. Franco ha esgrimido que se trat¨® de una comunicaci¨®n ¡°a efectos de su posible incumplimiento¡± para que, en ese caso, la Delegaci¨®n actuara. ¡°Eso no es ni una recomendaci¨®n ni una notificaci¨®n. Es nada de nada. A la Delegaci¨®n no lleg¨® ning¨²n documento, ninguna llamada, ninguna sugerencia de ninguna autoridad ni por escrito ni verbalmente que nos diese pie a prohibir el ejercicio de un derecho fundamental¡±. El delegado ha subrayado adem¨¢s que no ten¨ªa competencias en materia sanitaria. Correspond¨ªan al Gobierno de Isabel D¨ªaz Ayuso.

El delegado tambi¨¦n ha respondido a las partes personadas. Ante la afirmaci¨®n de la Asociaci¨®n de Consumidores y Usuarios Jos¨¦ Mar¨ªa Mena de que la declaraci¨®n de pandemia fue el 30 de enero, Franco ha corregido que fue el 11 de marzo y que no se vio la gravedad de la crisis sanitaria hasta el d¨ªa 9. El dirigente del PSOE ha se?alado que el aumento de contagios que se conoci¨® ese d¨ªa era ¡°imposible¡± que se debiera a las concentraciones del 8-M y otros acontecimientos multitudinarios ¡ªpartido de f¨²tbol, acto de Vox, conciertos¡­¡ª de ese d¨ªa. Del 4 al 8 de marzo se celebr¨® el Aula 2020 en Ifema, que visitaron miles de personas. Franco ha insistido que ¡°no hab¨ªa motivos objetivos¡± para prohibir las manifestaciones.

¡°Nadie en su sano juicio dejar¨ªa que se celebrase cualquier tipo de evento multitudinario si supiera que estaba en riesgo la vida de las personas¡±, le ha contestado a la Uni¨®n de Oficiales de la Guardia Civil Profesional. Seg¨²n Franco, la prueba ¡°m¨¢s evidente¡± de que la Delegaci¨®n no ten¨ªa ¡°ninguna constancia del peligro para la vida¡± es que ¨¦l mismo acudi¨® a la manifestaci¨®n del 8-M en Madrid.

Seg¨²n han explicado tambi¨¦n fuentes de la delegaci¨®n, se le ha ofrecido a Franco la posibilidad de acceder en coche al edificio de los juzgados, pero ¨¦l lo ha rechazado argumentando que ¡°no tiene nada que ocultar¡±. A las puertas aguardaban su llegada decenas de periodistas y c¨¢maras de televisi¨®n. Y tres hombres con carteles y camisetas donde pod¨ªa leerse: ¡°Stop feminazis¡±.

El caso 8-M ha irrumpido en la pol¨ªtica nacional con una fuerza atronadora. La derecha se ha lanzado contra el Gobierno despu¨¦s de conocerse los informes de la Guardia Civil y el forense incorporados al sumario. El PP no solo acusa al Ejecutivo de inacci¨®n durante la expansi¨®n del coronavirus, sino tambi¨¦n de haber permitido la movilizaci¨®n feminista del 8 de marzo pese a tener los datos suficientes para impedirla por motivos sanitarios. A ello se suma el cese del coronel Diego P¨¦rez de los Cobos, al mando de los agentes que enviaron a la magistrada los informes contra la actuaci¨®n del Ejecutivo.

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