El cocodrilo del Pisuerga se convirti¨® en una plantaci¨®n de marihuana
La b¨²squeda del supuesto saurio en la confluencia con el r¨ªo Duero permiti¨® hallar un cultivo de cannabis en una isla fluvial
La b¨²squeda de un cocodrilo del Nilo en la desembocadura del r¨ªo Pisuerga en el Duero, a la altura de Pesqueruela (Simancas, Valladolid), se ha traducido en el hallazgo de una plantaci¨®n de marihuana. La rocambolesca historia permiti¨® que la Guardia Civil, mientras persegu¨ªa a un tan peligroso como supuesto saurio en las habitualmente tranquilas aguas vallisoletanas, se topara con un cultivo de cannabis en una peque?a isla fluvial. Hasta 33 plantas, con abono y herramientas, estaban escondidas tras el forraje y la vegetaci¨®n de este punto del cauce donde nadie hubiera husmeado salvo circunstancias tan extraordinarias como las de un animal que pudiera alcanzar los 250 kilos y haberse escapado ¡ª o haber sido liberado¡ª de alguna vivienda privada, como se baraj¨® en su primer momento.
Dos hombres cuidaban de la marihuana, un padre y un hijo de origen eslovaco. Ambos resid¨ªan en Boecillo, a unos minutos en coche, y se desplazaban regularmente en todoterreno hasta la ribera del Duero para despu¨¦s dirigirse, a bordo de una barca hinchable, al islote donde trataban las plantas. Los efectivos Guardia Civil, cuando constataron esta plantaci¨®n, se apostaron en la zona con el apoyo del Seprona, el ?rea de Investigaci¨®n de Valladolid y el Puesto Principal de Zarat¨¢n. Al cabo de varios d¨ªas certificaron que los delincuentes acud¨ªan regularmente y fue el 21 de julio cuando, una vez ambos se encontraban en el islote, fueron detenidos y se destruyeron las 33 plantas que proteg¨ªan.
La b¨²squeda del supuesto cocodrilo africano se mantuvo durante varios d¨ªas durante principios de junio y se cerr¨®, no obstante, con una advertencia de Fernando G¨®mez, jefe del servicio de rastreo forestal de la asociaci¨®n Chelonia, especialista en animales salvajes que trabaj¨® en las pesquisas: que no apareciera ¡°no significa que no est¨¦¡± en el cauce. Hasta la fecha no consta que el saurio haya vuelto a avistarse en la desembocadura del Pisuerga en el Duero, una zona habitualmente frecuentada por algunos ba?istas fluviales, adem¨¢s de ciclistas o paseantes. Un polic¨ªa local del municipio insist¨ªa en que hab¨ªa visto con sus propios ojos al cocodrilo salir de una zona de vegetaci¨®n y zambullirse en el cauce; dos ni?os le hab¨ªan avisado esa misma ma?ana de un s¨¢bado de junio. La versi¨®n oficial es que podr¨ªa tratarse de una nutria.
Un equipo de bi¨®logos, de investigadores y la Guardia Civil comenz¨® a peinar la zona y a poner cebos para tratar de atraparlo. Los especialistas, al poco, rechazaron la posibilidad de que un cocodrilo hubiese sobrevivido en aquellas latitudes, de agua fr¨ªa, y redujeron la ¨¦pica de los dos supuestos nidos que el animal habr¨ªa creado en la orilla: se trataba simplemente del rastro de pescadores que se ubicaban entre la vegetaci¨®n para no ser vistos. El despliegue de agentes, c¨¢maras t¨¦rmicas y hasta el uso de drones no consigui¨® atrapar al reptil pero s¨ª cazar a dos malhechores que se aprovechaban de que all¨ª, hasta que saltaron las alarmas, nunca pasaba nada.
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