El Supremo anula la condena a Otegi por intentar refundar Batasuna

El Tribunal Supremo ha anulado este viernes la condena a Arnaldo Otegi y otros cuatro dirigentes abertzales en el caso Bateragune, sobre el intento de reconstruir la Mesa Nacional de la ilegalizada Herri Batasuna. La Sala de lo Penal asume as¨ª la sentencia contra Espa?a dictada en noviembre de 2018 por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH), que sentenci¨® que la Audiencia Nacional vulner¨® el derecho a un juicio justo de Otegi y el resto de procesados, que fueron condenados por la Audiencia a penas de hasta 10 a?os de c¨¢rcel por pertenencia a organizaci¨®n terrorista.

La Sala de lo Penal del Supremo ha estimado los recursos de revisi¨®n presentados por Otegi, Rafael D¨ªez Usabiaga, Arkaitz Rodr¨ªguez Torres, Sonia Jacinto Garcia y Miren Zabaleta Teller¨ªa y ha anulado el fallo dictado por la Audiencia Nacional el 7 de mayo de 2012. El tribunal considera que la sentencia de Estrasburgo es ¡°suficiente¡± tanto para admitir la interposici¨®n del recurso de revisi¨®n como para estimarlo. La decisi¨®n del tribunal coincide con la opini¨®n de la Fiscal¨ªa, que hab¨ªa informado tambi¨¦n a favor de admitir el recurso y anular la condena.

La sentencia dictada este viernes implica revocar tambi¨¦n la condena de Otegi a seis a?os y medio de inhabilitaci¨®n, que hab¨ªa sido confirmada por el Supremo, e imped¨ªa al l¨ªder abertzale ser elegido como cargo p¨²blico hasta el 28 de febrero de 2021. La vigencia de esta pena fue la raz¨®n que impidi¨® a Otegi, coordinador de EH Bildu, concurrir en las elecciones auton¨®micas vascas del pasado 12 de julio, a las que en un principio hab¨ªa mostrado su intenci¨®n de presentarse. La nulidad de la sentencia tiene otra derivada m¨¢s: el l¨ªder abertzale ya cumpli¨® la condena de prisi¨®n impuesta por este caso, por lo que ahora podr¨ªa intentar reclamar alg¨²n tipo de compensaci¨®n por parte del Estado.

Otegi se ha referido al fallo del Supremo en su cuenta de Twitter: ¡°Se confirma que nuestro encarcelamiento fue una operaci¨®n contra la paz en Euskal Herria. Hoy es el d¨ªa para recordar que no existe justicia independiente en el Estado Espa?ol. Hoy es el d¨ªa para recordar a los presos pol¨ªticos vascos, exiliados y deportados y exigir su libertad¡±, escribi¨® sobre una fotograf¨ªa de ¨¦l con los otros cuatro procesados.

La sentencia del TEDH fue un rapapolvo en toda regla contra la actuaci¨®n de la Audiencia Nacional. Estrasburgo dio la raz¨®n a Otegi y consider¨® que el juicio al que hab¨ªa sido sometido no cumpli¨® con todas las garant¨ªas. La principal duda, seg¨²n el tribunal europeo, la sembraba la presencia de la magistrada ?ngela Murillo, que en marzo de 2010 hab¨ªa sido apartada por supuesta falta de imparcialidad en un juicio anterior en el que estaba acusado el dirigente abertzale. En aquella vista oral sobre enaltecimiento del terrorismo, Murillo presidenta del tribunal y ponente de la sentencia, le pregunt¨® a Otegi si condenaba a ETA, y ante la negativa de este a responder, en uso de su derecho, le espet¨®: ¡°Ya sab¨ªa yo que no me iba a contestar a esa pregunta¡±. Esto llev¨® al Supremo a apreciar un prejuicio en la magistrada y a anular aquel juicio, que fue repetido y en el que Otegi acab¨® absuelto.

La sentencia que ahora anula el Supremo ya hab¨ªa sido modificada por el alto tribunal en mayo de 2012, cuando corrigi¨® el fallo de la Audiencia Nacional y rebaj¨® de 10 a seis a?os y medio las penas de c¨¢rcel para Otegi y para D¨ªez Usabiaga, l¨ªder del sindicato LAB, al considerarlos meros ¡°integrantes¡± en lugar de ¡°dirigentes¡± de ETA. Esta condena mantuvo a Otegi en la prisi¨®n de Logro?o hasta marzo de 2016. En esa sentencia, el Supremo rechaz¨® que hubiera un sesgo en el tribunal contrario al acusado, aunque dos de los cinco magistrados ¡ªMiguel Colmenero y Alberto Jorge Barreiro¡ª emitieron votos particulares en los que sosten¨ªan que la Audiencia Nacional deber¨ªa haber apartado a la juez Murillo.

El tribunal de Estrasburgo se declar¨® ¡°no convencido¡± de que la magistrada mostrara una animadversi¨®n personal hacia los acusados, pero consider¨® que el hecho de que Otegi fuera finalmente absuelto en aquel primer juicio ¡°contribuye no de forma concluyente pero s¨ª vigorosa a que hubiera un temor leg¨ªtimo sobre la falta de imparcialidad¡± del tribunal en el segundo proceso.