La Audiencia de Almer¨ªa reabre el caso de la muerte de un joven inmigrante en un centro de menores por posible ¡°homicidio imprudente¡±

La Audiencia Provincial de Almer¨ªa ha reabierto el caso de la muerte del joven marroqu¨ª de 18 a?os Ilias Tahiri, tras ser atado a una cama boca abajo en el Centro de Internamiento de Menores de Tierras de Oria en Almer¨ªa. Sucedi¨® el 1 de julio de 2019. Ilias fue inmovilizado por hasta seis guardias de seguridad. Tard¨® cuatro minutos en morir, seg¨²n la autopsia. La juez Teresa In¨¦s S¨¢nchez Gisbert archiv¨® el caso en enero de este a?o, al calificarlo de ¡°muerte violenta accidental¡±. Ahora, tras el recurso presentado por la familia y la Fiscal¨ªa, el nuevo tribunal entiende que hay indicios de ¡°homicidio imprudente¡± y pide que se depuren responsabilidades entre los responsables de la empresa (Ginso), que permitieron que se aplicara un protocolo de contenci¨®n reiteradamente desaconsejado por organismos internacionales por el riesgo de muerte que conlleva y contrario a las directrices del Defensor del Pueblo y de la Junta de Andaluc¨ªa, de quien depende en ¨²ltima instancia la gesti¨®n del centro.

¡°Convenimos con el ministerio fiscal en que la existencia de ese protocolo no exonera a quien lo elabor¨®, ni a quien lo impuso, ni a quien en su caso cumpli¨® a sabiendas o debiendo conocer que no refleja los est¨¢ndares m¨ªnimos de seguridad para la integridad f¨ªsica en caso de sujeci¨®n o contenci¨®n mec¨¢nica en dec¨²bito prono [boca abajo]¡±. Y agrega: ¡°Es cierto que el protocolo del centro as¨ª lo permite pero lo que debe discutirse, y no ahora en instrucci¨®n sino en el plenario [vista oral del pr¨®ximo juicio] correspondiente, es si era adecuado para preservar la integridad de las personas¡±.

El auto, claro y directo, de solo cinco folios, entra as¨ª de lleno en la cuesti¨®n que eludi¨® en su d¨ªa la juez instructora, a la que acusa de haber archivado el caso de manera ¡°precipitada¡±. S¨¢nchez Gisbert entend¨ªa que quienes aplicaron el protocolo actuaron conforme a lo establecido en el centro y que no le correspond¨ªa a su juzgado investigar sobre la idoneidad del mismo. Por el contrario, el nuevo tribunal que ahora devuelve el caso abierto a Purchena, considera que esa es exactamente la cuesti¨®n a dilucidar y exige que se cite, en primera instancia, al ¡°representante legal de la empresa gestora¡± Ginso, que aunque no ha sido nunca condenada hasta la fecha, acumula denuncias por situaciones similares.

¡°Disentimos del auto pues s¨ª observamos a priori, y sin perjuicio de lo que resulte en el plenario, indicios racionales de un delito de imprudencia, conducta imprudente al menos en la manera de practicar la inmovilizaci¨®n prono por personal no cualificado y sin que conste, de las grabaciones aparecidas, la presencia de un m¨¦dico sino al final, cuando ya nada se pudo hacer por el fallecido¡±. En el auto, adem¨¢s, se hace referencia a que el informe forense definitivo excluye la posibilidad de la asfixia, que s¨ª recog¨ªa en cambio el informe preliminar, a la luz de las im¨¢genes grabadas en las que se puede ver con claridad como los guardias apoyan durante varios minutos sus cuerpos y sus rodillas sobre la cabeza y las extremidades del joven mientras est¨¢ tumbado boca abajo y sin que oponga resistencia alguna.

El auto de la Audiencia Provincial de Almer¨ªa, que insiste en la depuraci¨®n de responsabilidades de quienes mantuvieron vigente un protocolo desaconsejado, concluye que lo que ¡°en esencia¡± hay que determinar es si en la conducta de los investigados presentes cuando ocurrieron los hechos ¡°es posible estimar la concurrencia de una imprudencia grave, menos grave, o incluso leve, y por tanto despenalizada¡±.