Autopsia de UPyD, la primera grieta del bipartidismo
El BOE acaba de publicar la extinci¨®n de partido, que lleg¨® a tener m¨¢s de un mill¨®n de votos, por el impago de una deuda
Nacieron en septiembre de 2007, dos a?os despu¨¦s de Ciudadanos (entonces Ciutadans) y siete a?os antes de Podemos. En las elecciones de marzo de 2008, cuando el bipartidismo concentraba el 83,8% de los votos ¡ªen 2019 el PP y el PSOE solos sumaron el 49,3%¡ª, lograron meter la cabeza en el Congreso con un esca?o, el de su presidenta, la exsocialista Rosa D¨ªez. En las generales de 2011, subieron a cinco diputados con 1.143.225 votos. En las de 2015 perdieron un mill¨®n de apoyos pese a que el censo electoral hab¨ªa aumentado en m¨¢s de 700.000 votantes. En febrero de 2016, D¨ªez se dio de baja y pidi¨® ¡°un final digno¡± para UPyD. El BOE acaba de publicar la decisi¨®n de un juzgado mercantil de declarar su extinci¨®n por el impago de una deuda de m¨¢s de 20.000 euros con una antigua empleada, la exeurodiputada Beatriz Becerra. Dirigentes, exdirigentes y polit¨®logos analizan el auge y ca¨ªda del partido que abri¨® la primera grieta en el bipartidismo imperfecto.
Los inicios. D¨ªez inaugur¨® el ¡°sin complejos¡± ¡ªque luego explotar¨ªa Pablo Casado¡ª como eslogan pol¨ªtico. Ante un abarrotado auditorio present¨®, en septiembre de 2007, un mes despu¨¦s de abandonar el PSOE, al partido de ¡°la tercera Espa?a¡±, la casa ¡°de los desencantados¡±, arropada por el fil¨®sofo Fernando Savater y el escritor Mario Vargas Llosa. ¡°Era el primer partido de centro izquierda que defend¨ªa sin fisuras la unidad de Espa?a. Una peque?a revoluci¨®n¡±, recuerda Savater. ¡°?bamos a los bancos y no nos daban dinero porque ya estaban comprometidos con los grandes, pero nos abrimos hueco¡±, a?ade.
Explotaban el recurso de David contra Goliat, recurrieron al crowdfunging y atrajeron a un electorado m¨¢s joven. ¡°Nacieron muy ligados al movimiento de v¨ªctimas del terrorismo y representaban una especie de centro izquierda jacobina¡±, explica el polit¨®logo Pablo Sim¨®n. ¡°Su programa defend¨ªa ideas homologables al PSOE al tiempo que implementaba el antinacionalismo y capitalizaba el malestar del 15-M con promesas de regeneraci¨®n y transparencia¡± [se personaron en una veintena de causas judiciales, entre ellas, el caso Bankia]. Jos¨¦ Pablo Ferr¨¢ndiz, de Metroscopia, los describe como un ¡°partido refugio¡±. ¡°Cuando los votantes del PP y del PSOE se desencantaban, acud¨ªan a UPyD ¡ªm¨¢s del PP que del PSOE¡ª, pero cuando la polarizaci¨®n se extremaba o el resultado de unas elecciones se anticipaba ajustado, regresaban a sus partidos de referencia¡±.
Probar de su propia medicina. Los problemas internos empezaron pronto. En julio de 2009 abandona el partido uno de los fundadores, Mikel Buesa, y otros dirigentes que acusan a D¨ªez de ¡°autoritarismo¡± ¡ªla expresidenta de UPyD ha declinado participar en este reportaje¡ª. Se suceden los expedientes disciplinarios, las expulsiones, dimisiones y gestoras. ¡°Me voy porque he descubierto un aparato sectario que no admite el debate ni las cr¨ªticas¡±, afirma en 2013 el coordinador en Euskadi, Nicol¨¢s de Miguel. Algo parecido ¡ª ¡°pr¨¢cticas perversas y autoritarias¡±¡ª dir¨¢ antes de despedirse el portavoz europeo, Francisco Sosa Wagner, tras ser cesado por D¨ªez en 2014. Su sustituto, Enrique Calvet, comparte, al asumir el puesto, que la direcci¨®n est¨¢ llevando al partido ¡°a la cat¨¢strofe¡±.
Como recuerda Jos¨¦ Pablo Ferr¨¢ndiz, de Metroscopia, en sus ¨²ltimos a?os como eurodiputada socialista, D¨ªez hab¨ªa criticado casi m¨¢s a su propio partido que al PP, pero una vez en la presidencia de UPyD fue implacable con los cr¨ªticos. ¡°D¨ªez y su aparato mantienen el comportamiento t¨ªpico de una secta que procura crear un enemigo interno al que culpar de sus errores¡±, declar¨® el eurodiputado Fernando Maura tras ser suspendido junto a Calvet.
Savater la defiende: ¡°Rosa tiene una personalidad fuerte, como muchos en pol¨ªtica. Durante un tiempo fue la l¨ªder mejor valorada, pero hubo una campa?a contra ella y la convirtieron en una bruja mala¡±. ¡°Esas broncas internas nos pasaron factura¡±, se?ala Cristiano Brown, actual presidente de la formaci¨®n. ¡°M¨¢s que otras cosas, como el no pacto con Ciudadanos¡±.
Arrasados por Ciudadanos. Una de las claves de la batalla interna en UPyD fue la relaci¨®n con Cs, hasta el punto de que varios exdirigentes coinciden en que su situaci¨®n ser¨ªa ahora muy diferente si hubieran pactado una alianza. D¨ªez y Rivera se reunieron en varias ocasiones, pero la negociaci¨®n no cuaj¨®. ¡°Yo era partidario de pactar con ellos y creo que fue un error no hacerlo. Perdimos una oportunidad¡±, recuerda Savater, que no obstante, culpa ¡°a quienes prefirieron votar a los corruptos y a los que pactaban con los nacionalistas¡± de la ca¨ªda de UPyD. ¡°Ahora tienen lo que han querido¡±, dice con amargura. Para Brown, ¡°D¨ªez no supo entender que la gente no quiere partidos enrocados, sino que sepan ceder¡±.
Estampida en todas direcciones. En el proceso de descomposici¨®n de UPyD por las broncas internas, sus dirigentes optaron por abandonar la pol¨ªtica o cambiar de partido. Rosa D¨ªez pidi¨® el voto para Pablo Casado en las ¨²ltimas generales. Populares vascos admit¨ªan que la posibilidad de que acabara en sus filas les pon¨ªa ¡°los pelos de punta¡±, pero la expresidenta de UPyD, muy amiga de Cayetana ?lvarez de Toledo, no lleg¨® a fichar por el PP.
La mayor¨ªa de referentes de la formaci¨®n se dej¨® querer por Cs. Su antigua jefa los llam¨® ¡°tr¨¢nsfugas y traidores¡±. Ambos partidos acudieron juntos a las elecciones europeas ¡ªla m¨¢xima representante de UPyD es la europarlamentaria Maite Pagazaurtund¨²a¡ª y a las generales ¡ªAlbert Rivera incorpor¨® a Cristiano Brown y Fernando Savater en las listas por Madrid¡ª. ¡°Tienes que apoyar a lo que hay, y para m¨ª lo m¨¢s pr¨®ximo a UPyD es Ciudadanos¡±, afirma Savater. Irene Lozano termin¨® en las listas del PSOE. Mikel Buesa, que antes de participar en la fundaci¨®n de UPyD hab¨ªa estado en el PP, apoy¨® a Vox.
La prueba del algod¨®n. ¡°De UPyD solo quedan las siglas. No han superado la prueba de los nuevos partidos: sobrevivir al l¨ªder fundador. Ciudadanos est¨¢ en ese proceso. En Podemos tambi¨¦n llegar¨¢ ese momento¡±, explica Pablo Sim¨®n.
Becerra, que adem¨¢s de eurodiputada fue encargada de comunicaci¨®n en el partido, cree que UPYD ¡°muri¨® hace tiempo¡± y lamenta que hayan impedido ¡°un final digno¡±, entre otras cosas, con un ¡°ajuste de cuentas literario¡± ¡ªlibros de exdirigentes culp¨¢ndose del descalabro¡ª. ¡°Se ha convertido en una caricatura¡±.
Brown critica a los que ¡°prefirieron marcharse en lugar de quedarse a dar la batalla¡± e insiste en la reanimaci¨®n: ¡°Recurriremos la decisi¨®n judicial. Ahora no podemos pagar la deuda, pero seguimos siendo un proyecto viable y necesario¡±.
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