Podemos se planta con los alquileres y vigila el pacto de PSOE y PP en el Poder Judicial
Iglesias pide a S¨¢nchez que no ¡°tensione la coalici¨®n¡± incumpliendo el pacto sobre vivienda
Las elecciones catalanas han dado un giro inesperado a la pol¨ªtica espa?ola. La guerra sin cuartel entre el PSOE y el PP de los ¨²ltimos meses ha dejado paso ahora a una intensa negociaci¨®n para pactar el Poder Judicial, RTVE, el Tribunal Constitucional y el Defensor del Pueblo. Y la batalla se ha desplazado al interior del Gobierno. Unidas Podemos, apoyado por ERC y Bildu, marc¨® el martes una clara l¨ªnea roja: no aceptar¨¢ una ley de vivienda que no incluya l¨ªmites a los aumentos del alquiler. El grupo de Pablo Iglesias, que lanz¨® un aviso al PSOE, vigila tambi¨¦n el pacto con el PP en el Poder Judicial para no quedarse fuera.
Dos citas pol¨ªticas del m¨¢ximo nivel en el Congreso y el Senado el martes dieron muestras claras del cambio de ciclo en la pol¨ªtica espa?ola. Primero, las im¨¢genes del rey Felipe VI con Pedro S¨¢nchez y Pablo Casado en el acto por los 40 a?os del fracaso del golpe de Estado del 23-F, al que se concedi¨® un trato especial como jefe de la oposici¨®n y se invit¨® al almuerzo posterior con el jefe del Estado. Y despu¨¦s, la sesi¨®n de control en el Senado, en la que el presidente del Ejecutivo fue especialmente suave con el portavoz de los populares, Javier Maroto.
¡°Ni yo ni este Gobierno somos sus adversarios. A nosotros no nos alegra que al PP le vaya mal ni en Catalu?a ni en Espa?a¡±, le dijo S¨¢nchez al portavoz del PP, con el que suele tener encontronazos muy ¨¢speros y ha tenido cruces muy duros desde que comenz¨® la pandemia. La relaci¨®n entre el Gobierno y el partido de Casado ¡°est¨¢ en otro momento¡±, resumi¨® la vicepresidenta primera, Carmen Calvo.
Mientras S¨¢nchez y Maroto hablaban en el Senado, las negociaciones entre el Gobierno y el PP, dirigidas por F¨¦lix Bola?os, secretario general de Presidencia, por parte de los socialistas, y Teodoro Garc¨ªa Egea, mano derecha de Casado, por los populares, avanzaban a buen ritmo, seg¨²n fuentes de los dos sectores, con reuniones constantes y llamadas de tel¨¦fono ¡°muy constructivas¡±, seg¨²n estas fuentes.
Y mientras el PSOE y el PP se acercan por primera vez en toda la legislatura, despu¨¦s de un dur¨ªsimo enfrentamiento de meses, en especial tras la decisi¨®n de los populares de votar en contra de dos pr¨®rrogas del estado de alarma en el peor momento de la pandemia, el PSOE y Unidas Podemos aumentan cada d¨ªa su tensi¨®n interna, aunque todas las fuentes consultadas insisten en que nadie vislumbra una ruptura cercana porque no tendr¨ªa sentido en este momento.
Unidas Podemos ve con recelo el acuerdo del PSOE con el PP para la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) ¡ªellos siempre apostaron por hacerlo sin los populares, con la reforma legal que S¨¢nchez decidi¨® aparcar despu¨¦s de las cr¨ªticas de la Comisi¨®n Europea¡ª, pero en la formaci¨®n de Iglesias siguen convencidos de que su socio de coalici¨®n no les traicionar¨¢ y permitir¨¢ que haya al menos dos vocales del ¨®rgano de gobierno de los jueces que sean pr¨®ximos a ellos.
El propio vicepresidente dej¨® claro el martes que no concibe que el PSOE les deje fuera, algo que ser¨ªa interpretado casi como una ruptura de la coalici¨®n. ¡°Algunos tienen la enso?aci¨®n de que se puede volver al modelo del bipartidismo para la elecci¨®n del CGPJ. Eso no va a suceder¡±, dijo dirigi¨¦ndose al PP, que asegura que Unidas Podemos se quedar¨¢ fuera del Poder Judicial. El partido de Iglesias no tiene apenas informaci¨®n del curso de las negociaciones, pero conf¨ªa en que el PSOE encuentre una f¨®rmula para evitar el veto de los populares. La m¨¢s sencilla es buscar perfiles de magistrados o juristas progresistas que puedan ser elegidos tanto por el PSOE como por Unidas Podemos para que el PP pueda aceptarlos. Ambos socios insisten en lanzar el mensaje a los de Casado de que debe evitar los vetos.
La cuesti¨®n m¨¢s sensible ahora, al menos hasta que se resuelva la negociaci¨®n del Poder Judicial y RTVE ¡ªalgo que parece inminente¡ª es la de la pol¨ªtica de vivienda. Ah¨ª Unidas Podemos, y con ellos otros aliados, como ERC o Bildu, s¨ª lanzaron el martes un mensaje muy claro. La regulaci¨®n de los alquileres para evitar subidas abusivas debe hacerse, porque de lo contrario ser¨¢ una l¨ªnea roja pol¨ªtica que Unidas Podemos no puede aceptar.
El problema para los socialistas es que, con sus 120 diputados, a 56 de la mayor¨ªa absoluta, solo tienen dos formas de sacar adelante las grandes decisiones: con la mayor¨ªa que apoy¨® la investidura de S¨¢nchez, esto es con Podemos y ERC, o con el PP. Y una cosa es acordar con los populares la renovaci¨®n del Poder Judicial, que requiere los tres quintos del Congreso y es lo habitual, y otra hacerlo para sacar asuntos trascendentales de la agenda pol¨ªtica progresista como la vivienda.
Por eso el PSOE se empe?a ahora en volver a la negociaci¨®n con Unidas Podemos y tratar de convencerlos para que acepten una versi¨®n m¨¢s suave del planteamiento de regular los alquileres, que es lo que se pact¨® entre Iglesias y S¨¢nchez justo antes de presentar los Presupuestos Generales del Estado. Este martes hubo una nueva reuni¨®n entre David Lucas, secretario general de Vivienda, e Ione Belarra, secretaria de Estado en la vicepresidencia de Iglesias y negociadora de Unidas Podemos. Y las citas seguir¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas, lo que indica que la negociaci¨®n no est¨¢ rota.
Pero el acuerdo parece dif¨ªcil. Ambos grupos ni siquiera se ponen de acuerdo ahora sobre el significado del pacto que sellaron S¨¢nchez e Iglesias.
El acuerdo, que se titulaba con claridad ¡°declaraci¨®n sobre regulaci¨®n de los precios del alquiler¡± y lleva el sello del PSOE y de la formaci¨®n de Iglesias, dec¨ªa expresamente: ¡°En estas zonas de mercado tensionado, determinadas en funci¨®n de los sistemas de ¨ªndices de referencia, se establecer¨¢n mecanismos de contenci¨®n o eventualmente bajada de los precios, tanto de los nuevos contratos como de los contratos existentes. En todo caso y en relaci¨®n con la informaci¨®n obtenida por los sistemas de ¨ªndices de precios de alquiler, se contendr¨¢n las subidas injustificadas en los nuevos arrendamientos, tomando como referencia el precio del contrato del arrendamiento anterior y acotando los incrementos permitidos a las situaciones que se contengan en la ley de vivienda¡±.
Los socialistas apuestan ahora por incentivos fiscales, y Unidas Podemos, con el apoyo de varios grupos como ERC, Bildu o M¨¢s Pa¨ªs, insiste en que es imprescindible regular este mercado, como se acord¨®. La formaci¨®n morada cree que el PSOE se ha echado atr¨¢s por presiones del sector inmobiliario y responsabiliza no tanto al ministro de Fomento, Jos¨¦ Luis ?balos, como a la vicepresidenta econ¨®mica, Nadia Calvi?o.
Iglesias dej¨® muy claro que esto es una l¨ªnea roja para Unidas Podemos, un grupo que en parte proviene del mundo de la lucha contra los desahucios en plena crisis financiera que fue un germen del 15-M. ¡°Creo que no es bueno tensionar el Gobierno de coalici¨®n y se tensiona cuando se incumplen los acuerdos¡±, dijo el vicepresidente en tono duro. Adem¨¢s record¨® que este asunto de regular el alquiler se pact¨® abiertamente entre el presidente y ¨¦l.
En el Senado, S¨¢nchez trat¨® de rebajar la evidente tensi¨®n interna del Gobierno. ¡°Yo, como presidente, me manifiesto satisfecho con el funcionamiento del Gobierno de coalici¨®n durante este a?o largo de legislatura¡±, asegur¨®. ¡°Nos unen m¨¢s cosas de las que nos separan¡±, dijo. El asunto es especialmente sensible en Catalu?a, donde siempre ha abanderado esta cuesti¨®n la alcaldesa de Barcelona y l¨ªder de los comunes, Ada Colau, y el diputado de este grupo, Gerardo Pisarello, fue muy duro: ¡°Si el Gobierno no vale para mejorar las pensiones, subir los salarios o para regular los alquileres, ?para qu¨¦ sirve un Gobierno de coalici¨®n progresista?¡±.
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