Dos presos ofrecen a Carles Puigdemont y Jordi Pujol los secretos de Villarejo por 16 millones de euros
Dos reclusos compinches del comisario jubilado se reunieron en varias ocasiones con los abogados de los expresidentes de Catalu?a, que no aceptaron el trueque
Javier Ruiz y Alfonso Pazos, dos presos compinches del comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo en la c¨¢rcel madrile?a de Estremera, intentaron vender supuestos secretos de Estado a los abogados de los expresidentes catalanes Jordi Pujol ¨Dpor 11 millones de euros¨D y Carles Puigdemont ¨Dpor cinco millones¨D. Ambos colaboradores de Villarejo reconocieron estos hechos en su declaraci¨®n ante la polic¨ªa, a la que ha tenido acceso EL PA?S. Los abogados de Puigdemont y de Pujol no aceptaron el trueque: ni pagaron ni accedieron a esos archivos secretos de Villarejo.
La informaci¨®n confidencial ofrecida por los presos a los abogados a cambio de dinero estaba vinculada a las causas judiciales que afectan a los dos exgobernantes catalanes. Jordi Pujol est¨¢ procesado por corrupci¨®n y pendiente de juicio. Carles Puigdemont huy¨® de la justicia por la causa del proc¨¦s [refer¨¦ndum ilegal y declaraci¨®n unilateral de independencia en 2017] y est¨¢ reclamado por sedici¨®n y malversaci¨®n, mientras sus compa?eros del Govern que no se fugaron fueron condenados a altas penas de c¨¢rcel, de entre nueve y 13 a?os.
Los dos presos colaboradores de Villarejo aprovecharon sus salidas de permiso penitenciario desde 2018 hasta finales de 2020 para ofrecer distinta documentaci¨®n confidencial a abogados, pol¨ªticos y periodistas.
La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n conoci¨® estas maniobras en junio de 2020 y prepar¨® un dispositivo policial, autorizado por el juez, para controlar las operaciones que Villarejo dirig¨ªa desde la c¨¢rcel.
Tanto el juez que investiga estos hechos como la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n sostienen que ¡°parte de la documentaci¨®n que [Villarejo] manten¨ªa en su poder, despu¨¦s de su jubilaci¨®n como Comisario del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa el 22 de junio de 2016, tendr¨ªa el car¨¢cter de informaci¨®n clasificada como secreto, conforme a la vigente normativa de secretos oficiales¡±.
El comisario Villarejo ingres¨® en la prisi¨®n de Estremera en noviembre de 2017 acusado, entre otros delitos, de dirigir durante 20 a?os una mafia policial que espiaba ilegalmente y extorsionaba a los supuestos adversarios de poderosos empresarios. Directivos de algunas de las principales compa?¨ªas del Ibex 35 est¨¢n imputados por contratarlo, mientras otros grandes empresarios figuran en la causa como v¨ªctimas de las actividades del comisario.
Los dos presos compinches de Villarejo, Alfonso Pazos Fern¨¢ndez y Javier Ruiz Cubero, est¨¢n imputados en una de las piezas separadas del caso T¨¢ndem o caso Villarejo, la n¨²mero 28.
Pazos explicaba as¨ª a Ruiz el reparto de funciones dentro de la trama, seg¨²n una de las conversaciones grabadas por la polic¨ªa que figuran dentro del sumario: ¡°...Lo que quiere el jefe, es que eh... la negociaci¨®n con esta gente eh... la lleve yo, bajo la cobertura de ser abogado y t¨² te encargues de cobrar...¡±.
En su declaraci¨®n ante la polic¨ªa, Pazos explic¨® que tras contactar con Gonzalo Boye, abogado de Puigdemont, le prepar¨® una oferta por escrito consistente en facilitarle los archivos de Villarejo sobre la denominada Operaci¨®n Catalu?a ¨Dactividades policiales al margen del juez para boicotear el refer¨¦ndum ilegal del 1 de octubre y espiar a los dirigentes independentistas¨D a cambio de cinco millones de euros.
¡°Antes de preparar este escrito¡±, confes¨® Pazos a la polic¨ªa, ¡°tuve varias entrevistas con Boye desde febrero de 2020, que creo recordar que fue la primera. Creo que le he visto en todos los permisos que he disfrutado. En esas reuniones, yo le ofrec¨ªa cierta informaci¨®n y Boy¨¦ me dec¨ªa que necesitaba consultarlo con el jefe y mostraba inter¨¦s por conseguir documentaci¨®n de la Operaci¨®n Catalu?a. Yo le pregunt¨¦ qui¨¦n era el jefe y me respondi¨® que Puigdemont. En la ¨²ltima cita, celebrada en la estaci¨®n de Chamart¨ªn un s¨¢bado de septiembre, Boye me plante¨® que pusiera un precio a la venta de esa documentaci¨®n¡±. Esa cita en la estaci¨®n fue seguida por la polic¨ªa y fotografiada. Tras esa reuni¨®n, Pazos prepar¨® una oferta escrita en tres folios, incautados por la polic¨ªa: ¡°2,5 millones de euros m¨¢s otros 2,5 millones, en total, cinco millones¡±. Pero esa propuesta de informaci¨®n a cambio de dinero nunca se lleg¨® a formalizar porque el juez orden¨® la detenci¨®n de Pazos en octubre.
Fuentes pr¨®ximas al abogado Gonzalo Boy¨¦ cuentan otra versi¨®n de esos hechos: ¡°No se habl¨® de ninguna cantidad y nunca se le tom¨® en serio. Se le dio largas porque la historia parec¨ªa rara y nadie iba a pagar por algo as¨ª¡±.
Pazos asegur¨® a la polic¨ªa que el otro preso compinche de Villarejo, Javier Ruiz, tambi¨¦n intent¨® ¡°vender lo mismo a los abogados de los Pujol, si bien en cada caso adaptado a lo que necesitaba el cliente¡±.
Javier Ruiz cont¨® as¨ª a la polic¨ªa sus gestiones con los archivos secretos del comisario: ¡°Lleg¨® a prisi¨®n una carta de la familia Pujol dirigida a Villarejo, en la que se hac¨ªa referencia a una posible ayuda mutua. Villarejo me indic¨® la posibilidad de contactar, en uno de mis permisos penitenciarios, con alguien pr¨®ximo a la familia Pujol, en concreto me sugiri¨® que contactase con su abogado. Eso sucedi¨® aproximadamente a mediados o finales de 2018. Concert¨¦ una entrevista personal con el abogado que tuvo lugar un poco despu¨¦s en Madrid, en la estaci¨®n de Atocha. El objeto de esa cita consisti¨® en plantear una ayuda mutua para ambas partes. Le ofrec¨ª la posibilidad de adquirir determinada documentaci¨®n. La cantidad que, de acuerdo con Villarejo, se les solicit¨® fue de 11 millones de euros. Villarejo me coment¨® tambi¨¦n que les solicitara un pago inicial de dos millones de euros, si bien no ped¨ª eso, sino una muestra de buena voluntad. Despu¨¦s de esa cita quedamos en vernos en Alicante, si bien por la pandemia no se celebr¨® esa segunda cita. M¨¢s adelante, aproximadamente en julio de 2020, volv¨ª a llamar para retomar los contactos hasta que se fueron enfriando. Meses m¨¢s tarde, en torno a septiembre, Alfonso Pazos me indic¨® que ¨¦l se har¨ªa cargo de las negociaciones¡±. Ruiz asegur¨® a la polic¨ªa que nunca lleg¨® a cobrar nada ni a entregar la documentaci¨®n secreta a los abogados de Pujol.
Ruiz cont¨® tambi¨¦n a la polic¨ªa que Villarejo le pidi¨® contactar con el abogado de Oriol Junqueras, el exvicepresidente catal¨¢n de ERC condenado por el proceso independentista catal¨¢n. ¡°Me pidi¨® que me pusiera en contacto con su abogado, que tiene un apellido holand¨¦s y se llamaba Andreu. Villarejo me cont¨® en una ocasi¨®n que se hab¨ªa cruzado en el m¨®dulo del Centro Penitenciario con Oriol Junqueras y comentaron la posibilidad de echarse una mano (¡) Yo le dije a Villarejo que no hab¨ªa conseguido localizar [al abogado de Junqueras], pues no me resultaba f¨¢cil decirle que no a Villarejo¡±.
Cuando la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, tras meses de investigaci¨®n, impuls¨® en octubre pasado varias detenciones para desarticular la trama delictiva, el juez autoriz¨® un registro en la celda n¨²mero 1 de la prisi¨®n de Estremera. Villarejo estaba presente. Sobre la mesa de su celda, la polic¨ªa encontr¨® una carpeta de color morado con el r¨®tulo ¡°Operaci¨®n Catalu?a¡± y 48 folios en su interior.
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