Villarejo asegura que tambi¨¦n se reuni¨® con Cospedal en su despacho del Ministerio de Defensa

El comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo ha vuelto este jueves a la Audiencia Nacional para declarar por la Operaci¨®n Kitchen y, sin salirse del guion, ha implicado de nuevo a Mar¨ªa Dolores de Cospedal, ex secretaria general del PP, en el despliegue ilegal para espiar al extesorero popular Luis B¨¢rcenas, iniciado en 2013. Seg¨²n ha detallado el antiguo polic¨ªa, manten¨ªa una vieja relaci¨®n con la pol¨ªtica ¡ªal menos se remonta a 2009, seg¨²n las pruebas del sumario¡ª y se reunieron en multitud de ocasiones. ¡°Muchas, ni se sabe [cu¨¢ntas]¡±, ha respondido Villarejo a los periodistas al salir del ¨®rgano judicial. Antes, sentado ante el magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, se ha explayado m¨¢s y ha asegurado que sus encuentros con la exdirigente conservadora no se limitaron a las citas en la sede nacional del partido de la calle G¨¦nova, como ella asever¨®, sino que tambi¨¦n se sucedieron en varios restaurantes y en su despacho del Ministerio de Defensa cuando ostent¨® dicha cartera, seg¨²n detallan fuentes jur¨ªdicas presentes en el interrogatorio.

La diana ha permanecido muy alta durante toda la declaraci¨®n de Villarejo, que ha apuntado al expresidente Mariano Rajoy como conocedor del operativo de espionaje a B¨¢rcenas. Seg¨²n ha dicho al juez, le informaba mediante el env¨ªo de mensajes a su tel¨¦fono m¨®vil: ¡°Ten¨ªa un inter¨¦s personal en este tema¡±. El pasado 27 de mayo, en su comparecencia ante la comisi¨®n de investigaci¨®n del Congreso, el comisario ya se?al¨® al exjefe del Ejecutivo en un testimonio que provoc¨®, precisamente, esta citaci¨®n ante el magistrado instructor. Pero ahora, como entonces ante los diputados, el polic¨ªa no ha aportado pruebas y se ha limitado a comprometerse a ¡°buscarlas¡±.

La nueva declaraci¨®n de Villarejo en la Audiencia Nacional se ha producido d¨ªas despu¨¦s de que el comisario jubilado presentar¨¢ un escrito ante Garc¨ªa-Castell¨®n, a cargo de la investigaci¨®n del caso Kitchen, donde se presentaba como un simple actor secundario y anticipaba el contenido de sus acusaciones, entre ellas las referidas a Rajoy y Cospedal. En ese escrito, Villarejo tambi¨¦n apuntaba su intenci¨®n de hablar sobre la llamada Operaci¨®n Catalu?a, la campa?a de intoxicaci¨®n informativa supuestamente gestada en el seno del Ministerio del Interior a trav¨¦s de la llamada brigada pol¨ªtica para, mediante supuestos informes policiales con graves acusaciones de corrupci¨®n, desacreditar a los principales dirigentes del independentismo catal¨¢n. Seg¨²n detallan fuentes jur¨ªdicas, su testimonio ha seguido ese guion.

Preguntado por el juez si reconoc¨ªa como suyas las agendas que se intervinieron en su domicilio el pasado octubre, cuando ¨¦l a¨²n estaba en prisi¨®n, y que ha provocado un vuelco tanto en el caso Kitchen como en otra docena de piezas del sumario en el que se investigan sus actividades presuntamente delictivas, el comisario no ha sido contundente y se ha limitado a afirmar que cre¨ªa que era su letra. Sin embargo, se ha negado a responder a preguntas sobre ellas hasta ¡°tener una copia de las mismas¡±, tras quejarse de que solo las hab¨ªa podido consultar hasta ahora en el juzgado.

Sobre Cospedal, Villarejo ha afirmado que la conoci¨® tras su llegada a la secretar¨ªa general del PP, despu¨¦s del congreso del partido en Valencia en 2008, y que fue a trav¨¦s de su marido, el empresario Ignacio L¨®pez del Hierro, tambi¨¦n imputado. El comisario ha asegurado que le presentaron como ¡°un antiguo polic¨ªa que conoc¨ªa a todo el mundo¡±, aunque ¨¦l entonces estaba en activo. A partir de entonces, ha manifestado que se reuni¨® con ella en multitud de ocasiones, incluso en el despacho que ocup¨® en Defensa cuando estuvo al cargo de esta cartera entre noviembre de 2016 y junio de 2018. La ¨²ltima cita se produjo ¡°pocos d¨ªas antes¡± de su detenci¨®n, en noviembre de 2017.

Seg¨²n la versi¨®n del polic¨ªa, en esas citas informaba a Cospedal tanto de la Operaci¨®n Kitchen como de otras actividades. Pero, ha a?adido, nunca le hicieron ¡°encargos profesionales¡± y ¡°nunca¡± le pagaron. ¡°Hab¨ªa de todo un poco¡±, ha dicho. Es en ese momento cuando el polic¨ªa ha hablado de su supuesta participaci¨®n en la Operaci¨®n Catalu?a, en la que asegura que se implic¨® personalmente, pero que el Ministerio del Interior no le abon¨® los gastos que tuvo. Hasta ahora, ni el juez Garc¨ªa-Castell¨®n ni la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n han querido ahondar en ese operativo, del que han salido numerosas referencias durante la investigaci¨®n, al considerar que no encaja en ning¨²n art¨ªculo del C¨®digo Penal.

Sobre el espionaje a B¨¢rcenas, Villarejo ha asegurado, como ya hizo en el Congreso, que su participaci¨®n se limit¨® a ¡°labores de inteligencia¡± para intentar localizar los documentos comprometedora para el PP que pudiera guardar el extesorero. El comisario ha admitido de nuevo que fue ¨¦l quien convenci¨® a Sergio R¨ªos, entonces ch¨®fer de B¨¢rcenas, para que colaborara en la operaci¨®n, pero se ha desmarcado de una de las actuaciones ilegales del operativo: la entrada en un taller de Rosal¨ªa Iglesias, esposa del extesorero, para sustraer documentos. S¨ª ha admitido que supo de la existencia de un recluso de nacionalidad colombiana, compa?ero de B¨¢rcenas en la prisi¨®n de Soto del Real (Madrid), que supuestamente iba a borrar documentos que este guardaba en la nube [memoria virtual]. Todo ello, ha insistido, lo hizo por encargo de su superior en la Polic¨ªa, el entonces director adjunto operativo, el comisario Eugenio Pino, despu¨¦s de que fuera convocado a una reuni¨®n para ello por el entonces m¨¢ximo responsable pol¨ªtico del Cuerpo, Ignacio Cosid¨®, quien hasta ahora no ha sido imputado ni llamado a testificar por el juez.

Villarejo repite que, sobre todas sus gestiones, hac¨ªa ¡°notas de inteligencia¡± [documentos internos policiales] que trasmit¨ªa a sus mandos, los cuales le preguntaban sobre ellas. No eran los ¨²nicos. El comisario ha declarado que tambi¨¦n informaba ¡°de alguna cosa¡± al PP. ¡°A veces, Cospedal me dec¨ªa que el presidente estaba muy preocupado¡±, ha dicho antes de a?adir que, cuando hablaba con la exdirigente popular, estaba convencido de que esta lo hac¨ªa ¡°m¨¢s como Gobierno que como PP¡±. Sobre sus supuestos contactos con Rajoy, el comisario ha repetido la versi¨®n que dio a los diputados. Seg¨²n esta, ¡°el presidente no acababa de fiarse de la informaci¨®n que le llegaba del ministro [Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz, imputado en la causa] y quer¨ªa otra v¨ªa de informaci¨®n¡±. Seg¨²n ha explicado, en un primer momento ¨¦l hac¨ªa llegar esa informaci¨®n a Rajoy a trav¨¦s de Cospedal y de ¡°alg¨²n enlace¡± de la entonces vicepresidenta, Soraya S¨¢enz de Santamar¨ªa, pero finalmente le facilitaron unos n¨²meros de tel¨¦fonos para que se la comunicara directamente, mediante mensajes, al entonces presidente del Gobierno.

El comisario tambi¨¦n ha aprovechado su declaraci¨®n para respaldar la versi¨®n que el pasado lunes ofreci¨® el que fuera jefe de la UDEF, el comisario Jos¨¦ Luis Olivera, sobre las supuestas presiones e intentos de sobornarle que sufri¨® el inspector jefe Manuel Morocho, responsable de la investigaci¨®n del caso G¨¹rtel. Este denunci¨® al juez que Olivera, que hab¨ªa sido su jefe en la UDEF, le ofreci¨® en 2013 un puesto en la embajada de Espa?a en Lisboa para sacarle de las pesquisas sobre la caja b del PP, pero que lo rechaz¨®. Olivera neg¨® este extremo e insisti¨® en que fue Morocho quien le pidi¨® que le ayudara a conseguir ese puesto. Este viernes, Villarejo ha respaldado esta ¨²ltima versi¨®n y ha asegurado que ¨¦l hizo ¡°gestiones¡± para que el inspector jefe ¡°tuviese un mejor destino¡± dentro de la Polic¨ªa.