Ximo Puig reclama una compensaci¨®n econ¨®mica del ¡°efecto capitalidad¡± de Madrid al resto de Espa?a

El presidente de la Generalitat Valenciana, el socialista Ximo Puig, ha formulado este mi¨¦rcoles un completo alegato a favor de la descentralizaci¨®n de la estructura del Estado y ha defendido que, en cualquier caso, se deber¨ªa plantear una nueva f¨®rmula fiscal o econ¨®mica que compense al resto de Espa?a por el ¡°efecto capitalidad¡± que, en su opini¨®n, beneficia actualmente a la Comunidad de Madrid. Se tratar¨ªa, ha dicho Puig, de ¡°compartir con todos esa mayor productividad generada por el apoyo p¨²blico¡±. Seg¨²n ha expuesto, el plus de riqueza del que goza Madrid no se genera por azar, ¡°sino gracias al sustento p¨²blico estatal y a las econom¨ªas de aglomeraci¨®n¡±. ¡°La filosof¨ªa es sencilla: Si hay privilegio, debe haber contraprestaci¨®n¡±, ha resumido. Puig no ha descartado que esa compensaci¨®n se fije a trav¨¦s de un impuesto espec¨ªfico a las rentas altas madrile?as: ¡°Podr¨ªa ser una opci¨®n¡±, ha respondido a esa pregunta espec¨ªfica.

Ximo Puig ha participado en Los Desayunos de Europa Press durante los que ha desgranado cinco problemas y las que considera deben ser las soluciones a los desaf¨ªos territoriales: independentismo, centralismo ineficiente, financiaci¨®n injusta, la Espa?a invisible y la despoblaci¨®n. El presidente valenciano, que gobierna en coalici¨®n con Comprom¨ªs y Unidas Podemos, ha puesto especial atenci¨®n en la necesidad de la descentralizaci¨®n. Y para ello ha aportado tres datos: el primero es que Madrid acoge a 150.574 empleados del sector p¨²blico estatal, casi un tercio del total. ¡°Son m¨¢s funcionarios estatales que afiliados a la Seguridad Social hay en 22 provincias¡±, ha dicho. El segundo dato es que nueve de cada 10 contratos estatales se gestionan desde Madrid y cerca del 60% de las adjudicaciones se hacen a empresas residenciadas en la capital. Por ¨²ltimo, las rebajas fiscales para las rentas altas gracias a las ventajas de la capitalidad suman, seg¨²n Puig, 4.453 millones, algo que ha calificado como ¡°dumping [competencia desleal] fiscal¡±.

Ante este sistema centralista, ¡°ineficiente¡± seg¨²n ha calificado ¨¦l a lo largo de su intervenci¨®n, Puig ha propuesto cohesi¨®n. ¡°En todo el mundo, el crecimiento de la productividad se concentra en las megaciudades y eso consolida la din¨¢mica de varias velocidades, pero la capitalidad debe asociarse con equidad y solidaridad¡±, ha afirmado. As¨ª, ha reclamado la compensaci¨®n de ese plus con ¡°una nueva herramienta¡± que plantear¨¢ al comit¨¦ de expertos y que tiene una base te¨®rica en las tesis del Paul Collier con el objetivo de limitar la capacidad del ¡°efecto capitalidad¡± para atraer bases fiscales. ¡°Hay un entorno que favorece una mejor productividad y se trata de que eso se reequilibre¡±, ha dicho.

Adem¨¢s, ha hecho referencia tambi¨¦n a la necesidad de una reforma del sistema de financiaci¨®n y lo ha relacionado con el centralismo que, ¡°en lugar de corregir asimetr¨ªas, est¨¢ alimentando las divergencias de renta entre espa?oles con una financiaci¨®n injusta¡±. a la par¨¢lisis institucional y la fractura social¡±. Ha apoyado expl¨ªcitamente la pol¨ªtica del presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, sobre Catalu?a y ha calificado de ¡°insano¡± afrontar una fractura emocional desde la cultura de la derrota. ¡°Una sociedad no puede vivir siempre con perdedores. En mi opini¨®n, ese es el gran defecto de las bases ideol¨®gicas de las actuales derechas espa?olas: que busca derrotados, humillados y vencidos¡±, ha alegado.

Frente a la Espa?a invisible ha pedido una ¡°Espa?a polic¨¦ntrica¡± y ha puesto ejemplos de varios pa¨ªses en los que existen multicapitalidades pol¨ªticas, jur¨ªdicas y econ¨®micas, y ha planteado la posibilidad de que la fiesta nacional se celebre cada a?o en una ciudad distinta ¡°para coser este pa¨ªs¡±.