EH Bildu ensancha el tablero pol¨ªtico vasco
PSOE y Podemos verbalizan que el nuevo paso de reconocer a las v¨ªctimas de ETA abre ¡°una nueva etapa¡± de acuerdos en Euskadi
La segunda fuerza del Parlamento vasco, EH Bildu, es ya para muchos dirigentes del Partido Socialista de Euskadi, y de Elkarrekin Podemos ¡°una fuerza pol¨ªtica m¨¢s¡±. La declaraci¨®n del coordinador de la izquierda abertzale, Arnaldo Otegi, en la que proclam¨® que sent¨ªan ¡°enormemente¡± el sufrimiento de las v¨ªctimas ¡°de ETA¡± y que ¡°eso nunca debi¨® ocurrir¡± ha derribado algunas trabas ¨¦ticas de cara a normalizar las relaciones y los pactos. Aunque todav¨ªa persisten algunas dudas sobre si los avances progresivos de ese mundo en paz y convivencia son sinceros o responden a una estrategia para seguir creciendo, los partidos de izquierda admiten que su actitud abre ¡°una nueva etapa¡± que ensancha el campo de juego pol¨ªtico vasco al favorecer pactos, incluso de gobierno, aunque a ¡°medio plazo¡±.
¡°EH Bildu ha dado un paso m¨¢s al que tendr¨¢n que seguir otros, pero este ha sido positivo y significativo¡±, reconoce el portavoz del grupo parlamentario socialista, Eneko Andueza. Esa v¨ªa de acuerdos puntuales ya estaba lanzada, no solo en el ¨¢mbito vasco, sino en el Congreso de los Diputados, donde el Gobierno de Pedro S¨¢nchez se apoya en la izquierda soberanista que act¨²a como un agente pol¨ªtico m¨¢s, y en Navarra. La C¨¢mara de Vitoria ha sido el escenario de numerosos acuerdos entre PSE, PNV y EH Bildu, en leyes de peso como la de Vivienda. Incluso cuando EH Bildu gan¨® en 2011 las elecciones en la Diputaci¨®n de Gipuzkoa, el PSE apoy¨® una reforma tributaria en el parlamento provincial. Este mismo mes de octubre los grupos municipales del PSE, que gobierna en Eibar, y EH Bildu alcanzaron un acuerdo para llevar adelante pactos estrat¨¦gicos para el municipio, de los que el PNV se qued¨® fuera.
El avance de Sortu ¡°facilita reforzar los acuerdos en temas de sensibilidad social¡±, confirma Andueza, y de paso eleva el nivel de confianza entre formaciones hasta hace poco enfrentadas, imprescindible para dar el siguiente paso al plano auton¨®mico. Andueza ser¨¢ elegido nuevo secretario general del PSE, en sustituci¨®n de Idoia Mend¨ªa, si gana en las primarias a Soraya Morla en la votaci¨®n del pr¨®ximo d¨ªa 30. Morla defiende cuestionar mucho m¨¢s los pactos con el PNV, y abrir la puerta a otras posibilidades. El IX congreso del PSE est¨¢ previsto para los d¨ªas 20 y 21 de noviembre.
Frente al entusiasmo con el que PSOE y UP recibieron la declaraci¨®n de Otegi, los Gobiernos central, vasco y navarro fueron mucho m¨¢s fr¨ªos en sus an¨¢lisis, dejando claro que quiz¨¢s todav¨ªa no es tiempo de permitirles la entrada o apoyarles si consiguen una mayor¨ªa en el corto plazo. ¡°Los socialistas vemos ahora a EH Bildu como un partido normal¡± asegur¨® tras conocer las palabras de Arnaldo Otegi el que fuera presidente del PSE hasta 2014, y uno de los negociadores del final de ETA, Jes¨²s Egiguren. En su opini¨®n ¡°se abre una nueva etapa¡± en Euskadi, aunque a rengl¨®n seguido puntualiz¨® con una sonrisa: ¡°Que no se preocupe el PNV, que no estamos hablando todav¨ªa de alternativas de Gobierno¡±. ¡°Hay debates nucleares como el soberanista en el que somos muy diferentes, pero en otros de car¨¢cter social que afectan a los ciudadanos hay recorrido, s¨ª¡±, asegura Andueza.
La secretaria general de Podemos Euskadi, Pilar Garrido, tambi¨¦n cree que en el medio plazo ¡°ser¨¢ posible cerrar un tripartito de izquierdas¡± si se basa en pol¨ªticas sociales. Augura que la izquierda abertzale acabar¨¢ ¡°condenando¡± la violencia cuando se den las condiciones de cerrar un acuerdo de Gobierno. Podemos defendi¨® ese tripartito en las pasadas elecciones, aunque entonces el PSE-EE no ten¨ªa ninguna intenci¨®n de explorar esa v¨ªa.
La tesis de que Sortu y todo su entorno vincula cada decisi¨®n pol¨ªtica a determinados fines viene avalada por la propia cronolog¨ªa de los hechos. Los herederos de Herri Batasuna rechazaron la violencia en los estatutos de Sortu para que el Tribunal Constitucional diera luz verde a su proyecto pol¨ªtico en junio de 2012. En septiembre de ese a?o, Arnaldo Otegi, que todav¨ªa estaba en prisi¨®n dijo: ¡°Si en el desempe?o de mi labor pol¨ªtica he a?adido un ¨¢pice de dolor a las v¨ªctimas, lo siento¡±: Apenas si faltaba un mes para las elecciones. En diciembre de 2013 el colectivo de presos de ETA emiti¨® un comunicado en el que reconoc¨ªan ¡°el sufrimiento y da?o generados¡±. Entend¨ªan que pod¨ªa ser una buena pista de aterrizaje para empezar a mejorar sus condiciones penitenciarias. En junio de 2017 Otegi puso distancia con el atentado de Hipercor de ETA, una salvajada con 21 muertos y 45 heridos: ¡°Jam¨¢s debi¨® ocurrir, compartimos el dolor con las v¨ªctimas¡±. ¡°Creo que la izquierda abertzale condenar¨¢ la violencia cuando acaricie un Gobierno. Espero que sea as¨ª, que sigan avanzando en cerrar heridas, y con ello abra ventanas a esos posibles gobiernos que agradecer¨¢n los ciudadanos¡±, asegura Garrido, que como los socialistas creen que las dificultades para dar pasos en ese mundo son tan elevadas, que no ponen en duda su sinceridad.
Esa alternativa que PSE y Elkarrekin Podemos atisban en el medio plazo es, sin embargo, ciencia ficci¨®n para un PNV preocupado por el crecimiento de la izquierda abertzale. El lehendakari, ??igo Urkullu y el presidente, Andoni Ortuzar, han sido muy cr¨ªticos con la declaraci¨®n de Otegi, un pol¨ªtico en el que no conf¨ªan y al que exigen m¨¢s contundencia en el rechazo de la violencia. Para Eneko Andueza ¡°la estrategia del PNV pasa por generar preocupaci¨®n en torno a EH Bildu y polarizar el debate para sacar r¨¦dito pol¨ªtico¡±. ¡°Deber¨ªa haber mostrado esa contundencia cuando firm¨® el pacto de Lizarra con ellos¡±, recuerda. PNV y EH Bildu luchan por la hegemon¨ªa en Euskadi, y salvo con Juan Jos¨¦ Ibarretxe como lehendakari, no han firmado ning¨²n pacto m¨¢s all¨¢ de en el entorno de los parlamentos nacional, navarro y vasco.
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