El relato de la reuni¨®n entre los socios del Gobierno para la reforma laboral: ¡°El PSOE tiene que estar en la negociaci¨®n¡±

El gabinete de crisis de la coalici¨®n de gobierno, convocado por Unidas Podemos, no logr¨® el lunes un acuerdo. Pero, al menos, dej¨® muy claras las posiciones y, seg¨²n varios de los presentes de ambas partes, mostr¨® las l¨ªneas rojas pol¨ªticas de los dos socios.

Adriana Lastra, n¨²mero dos del PSOE y que fue quien negoci¨® el Gobierno de coalici¨®n con la dirigente de Podemos Irene Montero, suele mostrarse tajante en este tipo de reuniones. Y rompi¨® el hielo muy r¨¢pido, seg¨²n distintos asistentes, quienes insisten en que el tono fue amable, pero el fondo no lo era tanto.

¡ªEl PSOE tiene que estar en esta reforma ¡ªdijo Lastra.

El secretario de Estado de Trabajo, hombre clave en la negociaci¨®n, Joaqu¨ªn P¨¦rez Rey, le contestaba insistentemente.

¡ªSomos un Gobierno. No dos. Y si estamos nosotros en la negociaci¨®n tambi¨¦n est¨¢ el PSOE, porque representamos a todo el Gobierno.

Lastra no cedi¨® en ning¨²n momento en esa idea de fondo de reivindicar la presencia del partido mayoritario de la coalici¨®n en una ley tan trascendental para millones de personas.

¡ªCuando hablamos de un nuevo marco de relaciones laborales, el PSOE tiene que estar en la negociaci¨®n. De la misma forma que vosotros estuvisteis en la negociaci¨®n de vivienda, pese a que las competencias son de un ministerio de los socialistas, o en los Presupuestos, que fueron a negociar Mar¨ªa Jes¨²s Montero [del PSOE] y Nacho ?lvarez [de Unidas Podemos].

P¨¦rez Rey, que representaba la voz de Yolanda D¨ªaz, explic¨® que meter a Econom¨ªa en una negociaci¨®n como esta puede ser muy problem¨¢tico, porque es dif¨ªcil gestionar algo ya de por s¨ª complejo, con dos sindicatos y dos patronales en la mesa ¡ªCC OO, UGT, CEOE, Cepyme¡ª cuando la voz del Gobierno no es una, sino varias y con posibilidades de contradicci¨®n, porque las visiones entre Trabajo y Econom¨ªa son diferentes.

¡ªSi quer¨¦is coordinaci¨®n no hay problema, podemos hacerlo antes o despu¨¦s de la negociaci¨®n en cualquier momento. Pero no es operativo tener a varias personas del Gobierno en la mesa de negociaci¨®n. No se ha hecho nunca.

Bola?os, el negociador clave de S¨¢nchez y el que acaba resolviendo la mayor¨ªa de los problemas, insist¨ªa en que este asunto era mucho m¨¢s sencillo de resolver de lo que parece con un poco de buena voluntad, pero la situaci¨®n volv¨ªa al mismo punto.

¡ªNo tiene sentido vetar al partido mayoritario ¡ªinsist¨ªa Lastra.

Mar¨ªa Jes¨²s Montero, ministra de Hacienda y veterana del PSOE, tambi¨¦n remataba en la idea de que Unidas Podemos no puede patrimonializar esta negociaci¨®n porque es muy delicada, afecta a varios ministerios, entre ellos el suyo, y hay que hablar tambi¨¦n con Bruselas.

Pasaba el tiempo y no hab¨ªa manera de ponerse de acuerdo. P¨¦rez Rey, Josep Vendrell, jefe de Gabinete de D¨ªaz, Montero, Belarra y Pablo Echenique entonces intentaron ir al contenido.

¡ªNos ten¨¦is que decir qu¨¦ puntos del ¨²ltimo documento no os gustan.

Los representantes del PSOE insistieron en que no hay problema con el contenido. Los socialistas, obviamente, tienen objeciones a lo que plantea el equipo de D¨ªaz, pero no las verbalizan, tal vez por temor a que se filtren.

¡ªEl problema no es el contenido. Todos estamos de acuerdo. Est¨¢ en el acuerdo de Gobierno y es un compromiso del PSOE que ha salido del congreso federal del partido, insist¨ªan los socialistas.

¡ªSi no hay problema con el texto que estamos negociando, ?entonces cu¨¢l es el problema?, contestaban los representantes de Unidas Podemos.

Visto que la reuni¨®n no avanzaba y que nadie iba all¨ª a hablar de contenido, se suspendi¨® sin acuerdo, aunque siempre en buen tono. La reforma laboral lo ocup¨® todo, no hubo ni siquiera tiempo de hablar de la otra crisis, que ha quedado descafeinada, por la amenaza de querella de Podemos contra Meritxell Batet, presidenta del Congreso, finalmente no presentada. Las dos grandes protagonistas ausentes, D¨ªaz y Nadia Calvi?o, segu¨ªan la cita desde fuera. Justo en ese momento, D¨ªaz cenaba con Paolo Gentiloni, comisario de Econom¨ªa europeo, que antes hab¨ªa estado con Calvi?o y era el otro gran protagonista en la sombra de una reuni¨®n que fracas¨® para resolver la crisis, pero sirvi¨® para clarificar mucho las posiciones.