Un mando policial relata el empe?o de la c¨²pula de Interior del PP contra el independentismo catal¨¢n
El comisario Garc¨ªa Losada afirma que el jefe de la Polic¨ªa le pidi¨® asesoramiento para ¡°explicar¡± la aparici¨®n en medios de informes ap¨®crifos sobre las finanzas de los Pujol y Artur Mas
La comisi¨®n parlamentaria que investiga la Operaci¨®n Kitchen de espionaje ilegal al extesorero del PP Luis B¨¢rcenas volvi¨® este mi¨¦rcoles a adentrarse en otra actuaci¨®n policial pol¨¦mica de la etapa del gobierno de Mariano Rajoy: la llamada Operaci¨®n Catalu?a, la campa?a de intoxicaci¨®n informativa supuestamente gestada en el seno del Ministerio del Interior para, mediante supuestos informes policiales, desacreditar a los principales dirigentes del independentismo catal¨¢n. Lo hizo durante la comparecencia de Jos¨¦ Garc¨ªa Losada, comisario general de Polic¨ªa Judicial entre junio de 2012 y octubre de 2013, periodo en el que, precisamente, se hicieron p¨²blicos algunos de esos documentos falsos.
Ante los diputados, el alto mando policial asegur¨® que el que en aquel momento ¡°durante un tiempo la Direcci¨®n General de la Polic¨ªa [entonces encabezada por Ignacio Cosid¨®] o el DAO [director adjunto operativo, cargo que ocupaba el comisario Pino, imputado en el caso Kitchen] estuvo muy empa?ado en el tema de Catalu?a¡± y que, en una ocasi¨®n, Pino lo convoc¨® en su despacho a una reuni¨®n en la que tambi¨¦n particip¨® el comisario Jos¨¦ Manuel Villarejo para abordar el tema. En la misma, detall¨®, ambos le pidieron que les ¡°asesorara¡± para ¡°explicar¡± la aparici¨®n en un medio de comunicaci¨®n, poco antes de las elecciones auton¨®micas catalanas de noviembre de 2012, de varios informes ap¨®crifos atribuidos a la Unidad de Delincuencia Econ¨®mica y Fiscal (UDEF, que depend¨ªa de jer¨¢rquicamente de Garc¨ªa Losada) sobre las supuestas finanzas de la familia de Jordi Pujol y del tambi¨¦n expresidente de la Generalitat Artur Mas.
¡°Lo fren¨¦ totalmente¡±, asegur¨® Garc¨ªa Losada antes de admitir que su respuesta ¡°cabre¨®¡± a sus dos interlocutores. Y a?adi¨® que ¨¦l orden¨® a sus agentes investigar para demostrar, precisamente, que aquellos documentos eran ¡°falsos¡±. Hasta ahora, ni la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n ni el juez del caso Kitchen, Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, han abierto pesquisas sobre la llamada Operaci¨®n Catalu?a al considerar que esta actuaci¨®n policial no encaja en ning¨²n art¨ªculo del C¨®digo Penal.
Garc¨ªa Losada a?adi¨® que la primera vez oy¨® hablar de este operativo contra el independentismo catal¨¢n fue ¡°precisamente en boca de Villarejo¡± y que de lo ¨²nico que tuvo conocimiento directo sobre ella fue la toma de declaraci¨®n oficial que los agentes de la UDEF tomaron a dos testigos, Victoria ?lvarez, compa?era del primog¨¦nito de Jordi Pujol, y el empresario Javier de la Rosa, que fueron aportados por el propio Villarejo. El alto mando policial se desmarc¨® de las actuaciones del comisario jubilado, al que calific¨® de ¡°timador¡± cuyo ¨²nico objetivo era enriquecerse.
Sobre la Operaci¨®n Kitchen, cuyo objetivo era supuestamente sustraer a B¨¢rcenas la documentaci¨®n comprometedora para el PP y sus dirigentes que pudiera atesorar, Garc¨ªa Losada dijo a los diputados que nunca fue informado de su existencia por ¡°ning¨²n mando pol¨ªtico ni por el DAO [director adjunto operativo, entonces el comisario Pino] ni nadie¡± y que se enter¨® por la prensa a?os despu¨¦s. De hecho, tild¨® de ¡°absolutamente an¨®malo¡± que entonces, verano de 2013, se investigase al extesorero sin autorizaci¨®n judicial. ¡°?Qu¨¦ pinta un grupo parapolicial investigando lo que corresponde a la UDEF?¡±, se pregunt¨® en referencia al caso G¨¹rtel.
El alto mando, que ha alabado el trabajo del principal investigador de esta causa de corrupci¨®n, el inspector jefe Manuel Morocho, ha negado que ¨¦l le presionara para que cambiara los informes en los que implicaba a dirigentes del PP. Morocho afirm¨® ante el juez del caso Kitchen, Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, que Garc¨ªa Losada y cuatro mandos de la UDEF le conminaron en reuniones a cambiar o quitar partes de sus informes. El ex comisario general de Polic¨ªa Judicial se?al¨® este viernes que ¡°es normal¡± que su subordinado tuviera que o¨ªr ¡°la opini¨®n t¨¦cnica de los superiores¡±.
Dispositivos de vigilancia
Antes que Garc¨ªa Losada, hab¨ªan comparecido en la comisi¨®n otros dos agentes de la polic¨ªa, que coincidieron en se?alar que hubo interferencias y solapamientos entre los dispositivos de vigilancia que varias unidades policiales pusieron en marcha en el verano de 2013 en el entorno del domicilio del extesorero del PP. Uno de ellos, el polic¨ªa Enrique Luis B¨¢ez, que perteneci¨® hasta septiembre de aquel a?o al ?rea Especial de Seguimientos de la Unidad Central de Apoyo Operativo (UCAO), confirm¨® que durante ¡°dos o tres semanas¡± particip¨® en los seguimientos que se hicieron, en primer lugar, a Sergio R¨ªos, exch¨®fer de B¨¢rcenas, y posteriormente a Rosal¨ªa Iglesias, esposa de este ¨²ltimo, y que en, en ese corto espacio de tiempo, al menos dos ocasiones detect¨® a personas que les tomaban fotograf¨ªas a ¨¦l y sus compa?eros.
El segundo agente, el inspector jefe Jes¨²s Vicente Gal¨¢n, entonces responsable de la Secci¨®n de Seguimientos en la Unidad de Asuntos Internos, admiti¨® que envi¨® a agentes a las cercan¨ªas del domicilio del extesorero y que estos detectaron la presencia de otros polic¨ªas en la zona, pero neg¨® que el operativo que ¨¦l dirig¨ªa tuviera como objetivo vigilar al entorno de B¨¢rcenas. Ambos se escudaron en sus superiores para justificar aquellos operativos y, en el caso de Gal¨¢n, intent¨® desacreditar el testimonio que una de sus subordinadas hizo ante el juez Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n, en el que hab¨ªa asegurado que fue ¨¦l quien le dio la orden de seguir a Rosal¨ªa Iglesias. Gal¨¢n fue imputado por este testimonio, pero el pasado junio el magistrado archiv¨® la causa contra ¨¦l.
El primero en comparecer fue el agente B¨¢ez, actualmente en excedencia y destinado en la agencia europea de control de fronteras (Frontex). Este polic¨ªa envi¨® en septiembre de 2019 a la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n dos correos electr¨®nicos en los que se ofrec¨ªa a declarar sobre su participaci¨®n en la Operaci¨®n Kitchen, pero el juez Garc¨ªa-Castell¨®n lo descart¨® al considerar que no iba a aportar ¡°nada relevante¡±. En el Congreso, tampoco ha facilitado informaci¨®n novedosa, seg¨²n coinciden en valorar varios diputados que han intervenido en la sesi¨®n. Seg¨²n B¨¢ez, sus superiores les explicaron a ¨¦l y sus compa?eros que el extesorero ¡°estaba involucrado en delitos, que hab¨ªa robado mucho dinero y que hab¨ªa que localizar un local¡± en el que supuestamente ocultaba ese dinero, se?al¨®. El polic¨ªa a?adi¨® que, durante su participaci¨®n en el operativo, detect¨® en dos ocasiones como le fotografiaban, aunque nunca supo si quienes lo hicieron pertenec¨ªan a otra unidad policial.
El segundo en comparecer, el inspector jefe Gal¨¢n, declar¨® como imputado el pasado enero ante el juez del caso Kitchen, pero este sobresey¨® la causa contra ¨¦l seis meses m¨¢s tarde. Gal¨¢n hab¨ªa sido se?alado por una de las polic¨ªas a sus ¨®rdenes como el mando que le dio instrucciones para acudir a las cercan¨ªas del domicilio de B¨¢rcenas porque la esposa de B¨¢rcenas, Rosal¨ªa Iglesias, ¡°estaba en peligro¡±. Ante el juez, Gal¨¢n confirm¨® que mont¨® un dispositivo de vigilancia cerca del domicilio del extesorero, pero aclar¨® que el objetivo era supuestamente para localizar un autom¨®vil sin relaci¨®n con B¨¢rcenas. De aquellas ¨®rdenes responsabiliz¨® al que entonces era su jefe, el comisario Marcelino Mart¨ªn-Blas, imputado en la causa. Mart¨ªn-Blas, que ya ha comparecido en la comisi¨®n, neg¨® que ¨¦l diera aquellas ¨®rdenes y se?ala a Gal¨¢n como hombre de la confianza del comisario Eugenio Pino, entonces m¨¢ximo responsable operativo de la Polic¨ªa y mu?idor de la trama.
Este mi¨¦rcoles, Gal¨¢n se ci?¨® a esta versi¨®n que dio ante el juez del caso Kitchen. As¨ª, asegur¨® que en el verano de 2013 (no ha sabido concretar la fecha, aunque la investigaci¨®n ha revelado que fue el 25 de julio de aquel a?o, al poco de ponerse en marcha la Operaci¨®n Kitchen) recibi¨® instrucciones de su superior para que buscara ¡°un veh¨ªculo [del modelo] C-4 negro en la confluencia de las calles Hermosilla, Ayala y D¨ªaz Porlier [de Madrid]¡± y que tuviera ¡°cuidado¡± porque cerca de esa zona viv¨ªa B¨¢rcenas. El inspector jefe ha insistido en que ¡°nunca, nunca¡± sus subordinados vigilaron a Rosal¨ªa Iglesias o recibieron ¨®rdenes en ese sentido. El mando policial detall¨® que uno de los agentes que envi¨® a la zona le alert¨® de que ten¨ªan ¡°compa?¨ªa¡±, en referencia a que en la zona hab¨ªa m¨¢s dispositivos policiales. Tras ello, orden¨® ¡°que se quitaran directamente de ah¨ª¡±.
El inspector jefe a?adi¨® que, ya en el oto?o de 2014, le ordenaron hacer seguimientos al comisario Jos¨¦ Manuel Villarejo, se?alado como uno de los implicados en el caso Kitchen y que tres a?os despu¨¦s fue detenido como presunto cabecilla de una trama parapolicial que ofertaba informaci¨®n confidencial a empresarios. Gal¨¢n termin¨® abandonando la Unidad de Asuntos Internos y obtuvo un destino en una Embajada de Espa?a en el extranjero, la de Mauritania, uno de los puestos m¨¢s codiciados por los agentes por su elevada retribuci¨®n econ¨®mica. En agosto de 2018, el actual ministro, Fernando Grande-Marlaska, lo destituy¨® de ese puesto.
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