Todos pendientes del testimonio de Dina Bousselham
La exasesora de Pablo Iglesias vuelve a declarar a la Audiencia Nacional despu¨¦s de que el juez no lograra encontrar indicios contra el exvicepresidente
Dina Bousselham, de 31 a?os, regresa a la Audiencia Nacional con todas las miradas pendientes de ella. La antigua asesora de Pablo Iglesias, ex secretario general de Podemos, vuelve este martes a sentarse ante el juez Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n para declarar en el enrevesado caso Dina, la investigaci¨®n que arranc¨® con la diana fija en el comisario Jos¨¦ Manuel Villarejo, pero que acab¨® con el magistrado se?alando a la propia Bousselham y a su exjefe. Seg¨²n fuentes de su entorno, la exasesora llega a esta cita con la intenci¨®n de mantener a salvo al exvicepresidente del Gobierno, al que considera una v¨ªctima m¨¢s de la trama de Villarejo. Pese a ello, fuentes de Podemos indican que son conscientes de que un interrogatorio es imprevisible y puede influir en las ¨²ltimas decisiones que Garc¨ªa-Castell¨®n, que ya atribuy¨® a Bousselham un delito de falso testimonio, tome sobre la causa.
El programa previsto para este martes consta de cuatro cap¨ªtulos. Seg¨²n ha acordado el juez, la jornada comienza con la declaraci¨®n de Bousselham a las 9.30 ¡ªes la tercera vez que responder¨¢ a las preguntas del magistrado, pero la primera vez despu¨¦s de que el instructor no lograra encontrar pruebas contra Iglesias¡ª. Y sigue con la de su expareja, Ricardo Sa Ferreira, a las 10.00; la del ex director adjunto operativo (DAO) de la Polic¨ªa Nacional con el Gobierno de Mariano Rajoy (PP), el comisario Eugenio Pino, a las 10.15; y la de los peritos de la Secci¨®n de Ingenier¨ªa Inform¨¢tica Forense que elaboraron uno de los informes clave del caso a las 10.30.
Garc¨ªa-Castell¨®n ya da por agotadas estas pesquisas, pero la Sala de lo Penal de la Audiencia le orden¨® que tomase declaraci¨®n a los tres primeros. El tribunal le indic¨® algunas cuestiones que todav¨ªa quedan pendientes.
?C¨®mo se da?¨® la tarjeta? La intrincada historia del caso Dina comienza en el IKEA de Alcorc¨®n (Madrid). En noviembre de 2015, Bousselham denunci¨® que alguien le hab¨ªa robado el m¨®vil cuando se encontraba con Sa Ferreira en dicho centro comercial. Apenas unas semanas despu¨¦s, en enero de 2016, Iglesias recibi¨® una llamada del presidente del Grupo Z y editor de la extinta revista Intervi¨², Antonio Asensio, que le comunic¨® que hab¨ªa llegado a su poder una tarjeta con los datos del tel¨¦fono de su asesora ¡ªen un sobre an¨®nimo, seg¨²n los periodistas que la recibieron¡ª. Asensio le entreg¨® entonces el dispositivo al l¨ªder de Podemos, que no se lo dio a su subordinada hasta mediados de ese a?o, cuando varios medios comienzan a publicar su contenido para perjudicarles, seg¨²n el partido.
La pol¨¦mica qued¨® ah¨ª en aquel momento. Pero se reactiv¨® en marzo de 2019, cuando el juez Garc¨ªa-Castell¨®n decide abrir una l¨ªnea de investigaci¨®n dentro del caso Villarejo centrada en aquel episodio. La Polic¨ªa hab¨ªa encontrado en casa del comisario otra copia de la tarjeta de Bousselham y el magistrado quer¨ªa averiguar si Villarejo hab¨ªa cometido un delito de revelaci¨®n de secretos al filtrar esa informaci¨®n a los periodistas o, incluso, si se encontraba detr¨¢s de una supuesta operaci¨®n para robar el m¨®vil. Pero el juez dio un giro a esa tesis en 2020, despu¨¦s de que la asesora admitiera en una segunda declaraci¨®n que ella misma hizo algunos de los pantallazos de chats publicados en los medios. Adem¨¢s, asegur¨® que no pudo acceder al dispositivo que le hab¨ªa dado Iglesias tras recuperarlo de manos de Asensio.
Garc¨ªa-Castell¨®n se sinti¨® enga?ado y cambi¨® el objetivo de sus pesquisas. El magistrado concluy¨® que Villarejo no era la fuente de los medios y consider¨® que una ¡°filtraci¨®n interna del partido¡± explicaba que esos pantallazos acabasen publicados, ya que la asesora dijo que pudo haberlos reenviado a algunos compa?eros. De hecho, adem¨¢s de atribuir a Bousselham un delito de falso testimonio por ¡°faltar a la verdad¡± en su primera declaraci¨®n, el juez acus¨® al ya vicepresidente de inventarse una conspiraci¨®n para presentarse como v¨ªctima del comisario, y pidi¨® su imputaci¨®n al Tribunal Supremo por delitos de revelaci¨®n de secretos, denuncia falsa y da?os inform¨¢ticos ¡ªpues tambi¨¦n consider¨® que el pol¨ªtico hab¨ªa da?ado la tarjeta antes de entreg¨¢rsela a su antigua subordinada¡ª.
Pero el Supremo descart¨® aquella teor¨ªa por falta de indicios y le devolvi¨® el caso a Garc¨ªa-Castell¨®n, que no desisti¨® y encarg¨® un informe a la Polic¨ªa para tratar de encontrar pruebas sobre la supuesta destrucci¨®n de la tarjeta, que Iglesias siempre ha negado. Una l¨ªnea de investigaci¨®n que no ha fructificado, pues los efectivos de la Secci¨®n de Ingenier¨ªa Inform¨¢tica Forense han concluido que no se pod¨ªa saber c¨®mo se hab¨ªa roto. Estos agentes se encuentran citados a declarar este martes para ¡°ratificarse¡± y hacer las ¡°aclaraciones¡± que se les pidan.
Antes, Bousselham tendr¨¢ la oportunidad de salvar a Iglesias. Porque, fracasada la v¨ªa de imputarle un delito de da?os inform¨¢ticos por la acusaci¨®n de destruir la tarjeta, a¨²n queda pendiente el delito de revelaci¨®n de secretos por guardar el dispositivo un tiempo sin d¨¢rselo a su due?a. Pero este requiere una denuncia previa de la v¨ªctima y esta ya ha expresado varias veces que no tiene intenci¨®n de actuar contra su exjefe: ¡°No ha tenido ninguna participaci¨®n en los hechos investigados m¨¢s all¨¢ de la entrega a mi representada de una tarjeta¡±, expuso la exasesora en un escrito enviado este febrero a la Audiencia.
?El origen de la filtraci¨®n? La Sala de lo Penal orden¨® celebrar estos interrogatorios para profundizar tambi¨¦n, ¡°en la medida de lo posible¡±, en el origen de la filtraci¨®n de otros documentos ¡ªajenos a los pantallazos¡ª que se encontraban en la tarjeta de Bousselham y que tambi¨¦n acabaron publicados. Porque, como se?al¨® la Fiscal¨ªa, en el domicilio de Villarejo se hallaron otros muchos papeles de la exasesora que proced¨ªan de su m¨®vil. En esa l¨ªnea se enmarca la declaraci¨®n de Sa Ferreira: ¡°Podr¨¢s servir para explicar algunas lagunas en la informaci¨®n que en su d¨ªa suministr¨® sobre la sustracci¨®n del tel¨¦fono y recuperaci¨®n de la tarjeta¡±, expuso el tribunal cuando dio luz verde a esta cita.
?Actu¨® la polic¨ªa patri¨®tica? Podemos defiende la tesis que detr¨¢s del robo y la difusi¨®n del contenido m¨®vil pudo estar la polic¨ªa patri¨®tica, el grupo de agentes que actu¨® en la etapa de Jorge Fern¨¢ndez D¨ªaz como ministro del Interior de Rajoy y que maniobr¨® contra grupos de la oposici¨®n. Entre ellos se encontraba el propio Villarejo, que estaba a las ¨®rdenes de Eugenio Pino, al que se considera el mu?idor de ese clan que tambi¨¦n activ¨® Kitchen, la operaci¨®n de espionaje al extesorero popular Luis B¨¢rcenas para robarle presuntamente documentos comprometedores de altos cargos del PP.
Durante su declaraci¨®n ante el juez, Villarejo cont¨® que recibi¨® una copia de la tarjeta de manos de dos periodistas de Intervi¨² y que, entonces, la entreg¨® en la Direcci¨®n Adjunta Operativa, que encabezaba Pino. De ah¨ª que la Sala de lo Penal ordene escuchar la versi¨®n de este ¨²ltimo, citado este martes. Porque, justo en aquella ¨¦poca, se produjeron maniobras desde la Polic¨ªa contra Podemos. A la polic¨ªa patri¨®tica se le atribuye el informe PISA (acr¨®nimo de Pablo Iglesias S. A.), un falso documento policial ¡ªrechazado por la justicia¡ª donde se afirmaba que el Gobierno de Ir¨¢n hab¨ªa financiado al partido y que acab¨® publicado en varios medios. Adem¨¢s, en abril de 2016, un presunto integrante de la polic¨ªa patri¨®tica viaj¨® hasta Nueva York, sin aval del juez y la Fiscal¨ªa, para reunirse con un exministro chavista a fin de pedirle datos contra la formaci¨®n de izquierdas a cambio de protecci¨®n en Espa?a, seg¨²n consta en una grabaci¨®n.
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