Zelenski invoca el bombardeo de Gernika ante el Congreso espa?ol y pide dureza contra Rusia

En una sesi¨®n parlamentaria sin precedentes, las Cortes espa?olas se revistieron este martes de toda la solemnidad para escuchar al presidente ucranio, Volod¨ªmir Zelenski: diputados y senadores apretujados en el hemiciclo del Congreso, el Gobierno al completo y la bandera azul y amarilla de Ucrania presidiendo la sesi¨®n junto a la espa?ola y la europea. Con su ya sempiterna camisa militar, Zelenski habl¨® durante 15 minutos a trav¨¦s de la videoconferencia que transmit¨ªan las pantallas del sal¨®n de plenos. El mandatario se mostr¨® en¨¦rgico, como de costumbre, y conmovedor por momentos al relatar las brutalidades que est¨¢ sufriendo su pueblo bajo la invasi¨®n rusa.

El presidente ucranio apel¨® a las conciencias de los diputados espa?oles al evocar un episodio de la Guerra Civil muy semejante a lo que est¨¢n sufriendo ahora las ciudades de su pa¨ªs: la destrucci¨®n de Gernika, hace 85 a?os, bajo las bombas de las aviaciones alemana e italiana. ¡°Estamos en abril de 2022, pero parece que estamos en abril de 1937, cuando el mundo se enter¨® del ataque a vuestra ciudad¡±, dijo.

Zelenski, que comenz¨® pidiendo disculpas al haberse retrasado unos minutos porque previamente hab¨ªa tenido que comparecer ante el Consejo de Seguridad de la ONU, se mostr¨® agradecido con la respuesta de Espa?a a la invasi¨®n de su pa¨ªs. Pero, al igual que hab¨ªa hecho en sus intervenciones ante otros parlamentos, como el alem¨¢n, no olvid¨® dejar su nota cr¨ªtica. Tras reconocer ¡ªy agradecerlo tambi¨¦n¡ª que la mayor¨ªa del centenar de empresas espa?olas que operaban en Rusia hayan interrumpido sus contactos comerciales, quiso resaltar que no todas lo han hecho. Y no tuvo empacho en dar los nombres de tres: Porcelanosa, la fabricante de explosivos Maxam y algunos miembros de una asociaci¨®n de compa?¨ªas con intereses en aquel pa¨ªs, Sercobe. Porcelanosa public¨® poco despu¨¦s una nota en la que asegura que ya ha interrumpido toda esa relaci¨®n comercial.

¡°Hay que dejar de hacer negocios con Rusia¡±, rog¨® Zelenski, que incluy¨® en esta petici¨®n las compras de petr¨®leo. Las relaciones comerciales, argument¨®, son una manera de colaborar con un r¨¦gimen, el de Vlad¨ªmir Putin, que ¡°comete cr¨ªmenes contra la humanidad¡± y que deber¨ªa ser llevado ¡°ante la Corte Penal Internacional¡±. ¡°Hay que dejar de tenerle miedo a Rusia. En Europa todo el mundo debe dejar de tener miedo y ser fuerte¡±, subray¨®. El antiguo c¨®mico convertido de la noche a la ma?ana en un h¨¦roe nacional e internacional fue muy claro en sus solicitudes: ¡°Pido armas y sanciones¡±. ¡°?C¨®mo podemos permitir que los bancos rusos generen beneficios mientras se destruyen nuestras ciudades?¡±, manifest¨®.

Zelenski puso mucho en empe?o en subrayar que la invasi¨®n de Ucrania concierne a todo el continente, tambi¨¦n a Espa?a, porque no solo est¨¢ en juego la independencia de su pa¨ªs, sino la idea misma de Europa y de la democracia: ¡°?Por qu¨¦ Rusia ha venido a nuestra casa? (...) Pretenden destruir no solo a nuestra gente, no solo el fundamento de la vida pac¨ªfica, sino tambi¨¦n la posibilidad de vivir sin dictadura, la posibilidad de vivir sin violencia estatal, la posibilidad de ser una democracia fuerte y transparente, la posibilidad de que diferentes comunidades religiosas puedan convivir en paz¡±.

En un silencio total, el hemiciclo escuch¨® de boca de Zelenski relatos de las atrocidades cometidas por los invasores y de su impacto sobre la poblaci¨®n local. Uno de los momentos m¨¢s emotivos fue cuando cont¨®: ¡°Las madres en Ucrania escriben en las espaldas de sus hijos con bol¨ªgrafo sus nombres y los de personas cercanas para que, si matan a sus padres, exista una peque?a posibilidad de que estos ni?os sean salvados¡±. Fue ah¨ª cuando apel¨® al recuerdo del horror de Gernika: ¡°Eso mismo est¨¢ sucediendo ahora en mi pa¨ªs. Hay ciudades de 100.000 habitantes donde la gente est¨¢ sin agua, sin comida, sin medicamentos... En Mariupol el 90% de los edificios se han derrumbado. Hay gente que est¨¢ viviendo en los desvanes y en los ba?os¡±.

Zelenski neg¨® que ahora mismo se vislumbre la posibilidad de una salida pactada con Putin. ¡°Rusia no busca la paz en serio¡±, afirm¨®, para a?adir con amargura. ¡°Y lo peor es que no sabemos cu¨¢nto puede durar esta guerra¡±.

Diputados y senadores hab¨ªan aguardado con paciencia los 15 minutos que se demor¨® el inicio de la intervenci¨®n del l¨ªder ucranio, prevista para las cinco de la tarde. Cuando su rostro apareci¨® en la pantalla, el hemiciclo se puso en pie y lo acogi¨® con un largo aplauso. Solo los dos diputados de la CUP, aunque tambi¨¦n levantados y en se?al de respeto, evitaron sumarse a la ovaci¨®n. Los de EH Bildu s¨ª lo hicieron, aunque tibiamente.

A Zelenski le contest¨® el presidente del Gobierno espa?ol con otro breve discurso. Pedro S¨¢nchez ensalz¨® al pueblo ucranio como ¡°un ejemplo de dignidad¡± por su resistencia al invasor pese a sufrir los efectos de una ¡°guerra despiadada¡±. Reiter¨® el apoyo de Espa?a a la ¡°independencia e integridad territorial¡± de Ucrania e hizo un llamamiento a Putin para que se siente a negociar una salida al conflicto.

La agresi¨®n a Ucrania, insisti¨® el presidente, no es solo ¡°un ataque a la democracia¡±, es un ¡°ataque a la raz¨®n misma¡±. Por eso, ¡°la esperanza de Europa est¨¢ puesta en Ucrania¡±. S¨¢nchez intent¨® mandar un mensaje de ¨¢nimo a Zelenski y a su pueblo. Se declar¨® convencido de que ¡°Putin no va a conseguir su prop¨®sito¡± y se despidi¨® as¨ª del presidente ucranio: ¡°Cuente con Espa?a¡±.

A Zelenski le hab¨ªa dado la bienvenida la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, con t¨¦rminos parecidos a los de S¨¢nchez. Batet habl¨® ¡°en nombre del pueblo espa?ol en su conjunto¡± para ensalzar el ¡°coraje y la determinaci¨®n¡± de la resistencia ucrania y proclamar: ¡°La batalla de Ucrania por su libertad es nuestra batalla¡±. Batet fue m¨¢s expresiva a¨²n que el presidente para referirse a la conmoci¨®n internacional por las masacres de civiles y, muy contundente, manifest¨® su deseo de que ¡°todo el peso de la ley internacional caiga sobre sus responsables¡±.

Si la presencia de Zelenski logr¨® una unanimidad que casi nunca se ve en el Congreso espa?ol, lo solemne y emotivo del acto tampoco pudo escapar a las peque?as miserias de la pol¨ªtica nacional. Los diputados socialistas interrumpieron varias veces con aplausos el discurso de S¨¢nchez. Los del PP dudaban si sumarse: unos lo hac¨ªan y otros no. Al final, todos los populares, as¨ª como los parlamentarios de Ciudadanos, se unieron al PSOE y a Unidas Podemos en su ovaci¨®n al presidente, que no era tanto a ¨¦l como al mensaje que Espa?a lanzaba a Zelenski. No fue el caso de Vox ni de otras formaciones, como ERC, PNV o Junts per Catalunya.

Lea aqu¨ª el discurso ¨ªntegro de Volod¨ªmir Zelenski este martes en las Cortes.