La Audiencia investiga a la exc¨²pula de ETA por el asesinato de dos polic¨ªas en Navarra en 2003
El juez Abascal admite una nueva querella contra ocho exjefes de la banda
La Audiencia Nacional ha abierto un nuevo frente a las antiguas c¨²pulas de ETA. El juez instructor Alejandro Abascal ha admitido a tr¨¢mite una querella presentada por la asociaci¨®n Dignidad y Justicia (DyJ) contra ocho exdirigentes de la banda terrorista por el atentado perpetrado en Sang¨¹esa (Navarra) en 2003, que caus¨® la muerte de dos polic¨ªas e hiri¨® a otro agente y a un trabajador de Telef¨®nica. En un escrito fechado el pasado 7 de abril, al que tuvo acceso EL PA?S, el magistrado insiste en que los jefes de la organizaci¨®n ¡°criminal¡± marcaban las ¡°l¨ªneas estrat¨¦gicas¡± y no hab¨ªa ¡°nada¡± que no ¡°controlasen, impulsasen o dirigiesen¡±.
Este movimiento del magistrado Abascal ahonda en la nueva v¨ªa que DyJ intenta abrir en los tribunales para tratar de condenar a los exjefes de ETA como ¡°autores mediatos por dominio¡± de los atentados cometidos por sus subordinados ¡ªuna especie de inductores intelectuales de los cr¨ªmenes, al tener el control absoluto de la banda¡ª. Esta es la sexta querella que se admite a tr¨¢mite por este motivo y, en total, 23 exdirigentes de la banda se encuentran ya investigados como tales.
En el caso del atentado de Sang¨¹esa, que acab¨® con la vida de Bonifacio Mart¨ªn y Juli¨¢n Embid, la querella se dirige contra Ib¨®n Fern¨¢ndez Iradi, alias Susper; Gorka Palacios, Andoni; Garikoitz Aspiazu, Txeroki; Aitzol Iriondo, Gurbitz; F¨¦lix Ignacio Esparza, Navarro; Mikel Albisu, Mikel Antza; Ram¨®n Sagarzazu, Ramontxo; y Mar¨ªa Soledad Iparraguirre, Anboto. Solo dos de ellos (Susper y Txeroki) no se encontraban investigados en los cinco casos que ya se hab¨ªan reabierto. Adem¨¢s, el instructor Alejandro Abascal tambi¨¦n pone el punto de mira en otros dos etarras, Garikoitz Arruarte y Gorka Lor¨¢n, como presuntos autores materiales del asesinato de los dos polic¨ªas.
Dignidad y Justicia expone que ETA ¡°se encontraba cada vez m¨¢s acorralada¡± en 2003 y 2004. ¡°Debilitada por la labor de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado¡±, la c¨²pula de la banda decidi¨® entonces distribuir una ¡°gran cantidad de explosivo titadine¡± a sus distintos comandos. Seg¨²n la querella, parte de ese material se us¨® en el crimen de Sang¨¹esa, cometido el 30 de mayo de 2003, solo cinco d¨ªas despu¨¦s de las elecciones municipales. Este ataque inaugur¨® una cadena de atentados.
¡°Si a otro periodo de la banda se le dio en llamar los ¡®a?os de plomo¡¯, aquel segundo semestre de 2003 fue los ¡®meses del Titadine¡±, destaca Abascal en su resoluci¨®n del pasado 7 de abril. ¡°La zuba ¡ªla direcci¨®n de ETA, en el argot de los terroristas¡ª buscaba crear un estado de terror total. Y era algo totalmente premeditado, totalmente querido y calculado dentro de las posibilidades operativas que a¨²n les quedaban en las manos¡±, afirma la querella de DyJ, en un relato que recoge el juez.
En total, hay seis sumarios reimpulsados que estrechan el cerco sobre estos 23 exdirigentes de ETA. Adem¨¢s de por el crimen de Sang¨¹esa, se les investiga como autores mediatos (inductores) de los asesinatos de los concejales populares Gregorio Ord¨®?ez y Miguel ?ngel Blanco; el atentado contra el magistrado Francisco Querol, donde perdi¨® la vida el juez y otras tres personas; el ataque contra la T-4 del aeropuerto de Barajas, con dos muertos; y el coche bomba colocado en 2002 junto a la casa cuartel de la Guardia Civil de Santa Pola (Alicante), que dej¨® dos fallecidos ¡ªuna de los dos, una ni?a de seis a?os¡ª.
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