El Constitucional busca un pacto entre sectores antes de junio para el fallo del aborto
El tribunal de garant¨ªas lleva 12 a?os sin resolver el recurso del PP contra la ley
El Tribunal Constitucional se ha impuesto como prioridad absoluta la b¨²squeda de un pacto interno que permita dictar sentencia sobre el recurso del PP contra la ley del aborto aprobada en 2010 para despenalizar la interrupci¨®n voluntaria del embarazo durante las primeras 14 semanas. El presidente del tribunal, Pedro Gonz¨¢lez-Trevijano, se ha comprometido con los magistrados a que se lleve un proyecto de sentencia al pleno antes del 12 de junio, fecha en que termina te¨®ricamente el mandato de un tercio de los magistrados del ¨®rgano de garant¨ªas. Tras la reciente entrevista entre el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, y el l¨ªder del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, magistrados del tribunal conf¨ªan en que esta vez se cumplir¨¢n los plazos de su renovaci¨®n.
No hay una fecha concreta para que el ponente del recurso sobre la ley del aborto, el magistrado Enrique Arnaldo, vinculado al PP por su intervenci¨®n como ponente de m¨²ltiples conferencias organizadas por la fundaci¨®n FAES, presente su borrador de resoluci¨®n.
Pero hasta la primera quincena de junio solo est¨¢n previstos tres plenos, uno despu¨¦s de Semana Santa y otros dos en mayo. Por tanto, lo m¨¢s probable es que el Constitucional aborde como muy tarde dentro de un mes el texto que se someta a discusi¨®n.
La ¨²ltima renovaci¨®n del Constitucional tuvo lugar en noviembre, con m¨¢s de dos a?os de retraso, y desde los primeros contactos para organizar la nueva etapa se asumi¨® que uno de los recursos que habr¨ªa que desbloquear sin m¨¢s dilaciones ser¨ªa el relativo a la impugnaci¨®n que el PP present¨® contra la ley del aborto en 2010.
El ponente del caso viene trabajando sobre esta impugnaci¨®n desde su designaci¨®n, y el tribunal pretende ahora ¡ªtras haber cerrado la larga serie de resoluciones sobre el proc¨¦s catal¨¢n¡ª tratar de armar una mayor¨ªa clara para dictar sentencia sobre el recurso m¨¢s antiguo pendiente de fallo. Para lograr este objetivo es preciso que se alcance un m¨ªnimo entendimiento entre los dos sectores del tribunal, conservador y progresista, cuyo equilibrio actual es de seis a cinco.
Fuentes del tribunal aseguran que no se aprobar¨¢ sentencia alguna si el texto que se presente es apoyado solo por el bloque mayoritario, el conservador. Lo que se va a intentar es que el fallo que se dicte consiga reunir a su favor al menos ocho o nueve de los once votos del pleno. La composici¨®n al completo del Constitucional la integran doce magistrados, pero uno de ellos, Alfredo Montoya, del sector conservador, sigue en proceso de recuperaci¨®n tras el ictus que sufri¨® en agosto.
No es seguro, sin embargo, que vaya a alcanzarse con facilidad una resoluci¨®n consensuada. El ponente, el magistrado Enrique Arnaldo, no ha hecho comentarios sobre el estado de sus trabajos, y menos sobre el contenido. Tampoco ha efectuado sondeos previos sobre la opini¨®n del resto de magistrados. ¡°Les conoce y no los necesita¡±, afirman fuentes del tribunal.
Fuentes conocedoras de este proceso en el Constitucional aseguran que para que la discusi¨®n se encauce es preciso que de entrada exista un acuerdo para avalar lo fundamental de la normativa vigente, es decir, la constitucionalidad de la ley de plazos. Las mismas fuentes descartan que el actual sector conservador vaya a utilizar su mayor¨ªa para imponer sus criterios sin di¨¢logo. Dicha mayor¨ªa, por otra parte, cambiar¨¢ de signo en cuanto se renueve el tribunal en junio. Con su nueva composici¨®n habr¨¢ siete magistrados progresistas, y cinco conservadores. Ello implica que si el recurso contra la ley del aborto no se resuelve durante el mandato del actual tribunal, esta impugnaci¨®n quedar¨¢ en manos de un Constitucional renovado, y ya con mayor¨ªa progresista. En tal situaci¨®n no habr¨ªa dificultades insalvables para que el nuevo pleno avalara la legalidad de la normativa vigente.
La pr¨®xima renovaci¨®n del tribunal ser¨¢, en suma, especialmente relevante. De entrada, han de cambiar el presidente y el vicepresidente. Para sustituir en la presidencia a Pedro Gonz¨¢lez Trevijano, que ha venido ejerciendo un papel de liderazgo de la mayor¨ªa conservadora, solo hay dos candidatos posibles, los progresistas C¨¢ndido Conde-Pumpido y Mar¨ªa Luisa Balaguer. A ambos les quedan tres a?os de mandato, pertenecen al grupo de magistrados que ser¨¢ el siguiente en salir del tribunal, y la tradici¨®n asumida en la instituci¨®n desde siempre es que el nuevo presidente se elija tras cada renovaci¨®n entre los componentes de ese turno.
Las mismas costumbres llevan a que la vicepresidencia quede en manos del otro sector, en este caso el conservador. Y en ese bloque solo hay un nombre de magistrado con dicho perfil en el grupo que est¨¢ en el ¨²ltimo tercio de mandato, el de Ricardo Enr¨ªquez, quien por tanto ser¨ªa el pr¨®ximo vicepresidente del tribunal, en sustituci¨®n del progresista Juan Antonio Xiol. Todo ello en un tribunal en el que, en paralelo, aumentar¨¢ el n¨²mero de mujeres.
En esta renovaci¨®n el Gobierno ha de nombrar a dos miembros del tribunal y el Consejo General del Poder Judicial a otros dos. En el tribunal se da por seguro que como m¨ªnimo se incorporar¨¢n dos nuevas magistradas al Constitucional. Si ambas provienen del sector progresista ser¨¢n en principio votos ganados para el aval a la actual legislaci¨®n del aborto.
Lo que tambi¨¦n se da como altamente probable en el Constitucional es que van a quedar para el pr¨®ximo mandato sentencias importantes como las relativas a la reforma educativa de la ley Cel¨¢a o la ley de eutanasia. Sobre la primera hubo ya un primer borrador antes de la ¨²ltima renovaci¨®n, pero no dio tiempo a aprobarlo, y luego se ha comprobado que ser¨ªa dif¨ªcil resolverla por consenso.
Nadie quiere reeditar en el tribunal el choque de trenes que provocaron las sentencias sobre los decretos del estado de alarma ¡ªen las que se declararon inconstitucionales decisiones importantes, como la del confinamiento general de la poblaci¨®n¡ª, por lo que todo indica que se va a evitar en la ¨²ltima fase de este mandato cualquier situaci¨®n susceptible de generar nuevas tensiones. Sobre la ley de eutanasia no se tienen indicios de que exista un borrador terminado. El ponente de esta sentencia es el progresista Ram¨®n S¨¢ez, en cuyo entorno se coment¨® desde el principio que har¨ªan falta varios meses para tener un texto preparado.
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