La nueva pol¨ªtica de Espa?a en el Magreb se estanca
El avance con Rabat es lento y no hay visos de acercamiento con Argel, cinco meses despu¨¦s del giro del Gobierno sobre el S¨¢hara
El 18 de marzo marc¨® un punto de inflexi¨®n en la pol¨ªtica exterior espa?ola en el Magreb. Tras casi cinco d¨¦cadas de neutralidad en el conflicto del S¨¢hara Occidental, aquel d¨ªa se supo que el presidente Pedro S¨¢nchez hab¨ªa decidido alinearse con las tesis marroqu¨ªes y apoyar su propuesta de autonom¨ªa para el territorio en disputa, al considerarla ¡°la m¨¢s seria, realista y cre¨ªble¡±. La reacci¨®n de Argel, principal apoyo del Frente Polisario, fue inmediata y retir¨® a su embajador de Madrid. Cinco meses despu¨¦s, la nueva pol¨ªtica espa?ola en el Magreb parece encallada. Mientras los frutos del nuevo esp¨ªritu de cooperaci¨®n mutua con Marruecos son limitados y el progreso es lento, no hay visos de resoluci¨®n en el conflicto con Argelia. El rey de Marruecos, Mohamed VI, en un discurso televisado a la naci¨®n este s¨¢bado, ha calificado la posici¨®n espa?ola sobre el S¨¢hara de ¡°responsable¡±.
El pasado 7 de abril, el presidente S¨¢nchez quiso visualizar la apertura de una nueva etapa en las relaciones con Marruecos con un viaje a Rabat en el que se entrevist¨® con el rey Mohamed VI. Ambos mandatarios pon¨ªan as¨ª fin a la crisis bilateral que se inici¨® con la visita a Espa?a de Brahim Gali, el l¨ªder del Polisario, casi un a?o antes. En la Declaraci¨®n Conjunta, ambos pa¨ªses se comprometieron con una ¡°hoja de ruta¡± que deb¨ªa marcar las relaciones entre ambos. ¡°Iniciamos una nueva andadura en nuestra larga historia compartida que debe permitirnos afrontar con seguridad los retos, pero tambi¨¦n las m¨²ltiples oportunidades de futuro¡±, proclam¨® desde Rabal el presidente espa?ol.
En las semanas siguientes, Rabat realiz¨® diversos gestos de buena voluntad hacia Espa?a. Se reabrieron los pasos fronterizos de Ceuta y Melilla, en teor¨ªa, cerrados desde hac¨ªa m¨¢s de dos a?os a causa de la pandemia. Adem¨¢s, se volvi¨® a activar la Operaci¨®n Paso del Estrecho que permite a millones de familias de origen marroqu¨ª residentes en Europa cruzar a Marruecos con sus propios veh¨ªculos. El a?o anterior, Rabat prohibi¨® que atracaran en sus puertos ferris espa?oles, por lo que el tr¨¢fico se desvi¨® a Portugal y Francia Por ¨²ltimo, se intensific¨® la colaboraci¨®n en el ¨¢mbito del control de las fronteras y la migraci¨®n irregular.
El s¨¢bado por la noche, Mohamed VI destac¨® el respaldo espa?ol a la postura marroqu¨ª sobre el S¨¢hara, porque, dijo ¡°Espa?a conoce muy bien el conflicto¡±. El rey de Marruecos tambi¨¦n destac¨® la firmeza del Gobierno espa?ol: ¡°Esta actitud positiva ha establecido una nueva fase en las relaciones hispano-marroqu¨ªes que no se han visto afectadas por las condiciones regionales ni las din¨¢micas pol¨ªticas internas¡±, dijo en alusi¨®n a las tensiones entre Espa?a y Argelia y la falta de apoyo del Parlamento al viraje de S¨¢nchez.
La normalizaci¨®n aduanera, asunto pendiente
Sin embargo, no ha habido nuevos avances. Por ejemplo, todav¨ªa no se ha cumplido el punto de la Declaraci¨®n Conjunta que fijaba como objetivo com¨²n ¡°la plena normalizaci¨®n de la circulaci¨®n de personas y mercanc¨ªas ... de manera ordenada, incluyendo los dispositivos de control aduanero y de personas a nivel terrestre y mar¨ªtimo.¡± En teor¨ªa, ambos Gobiernos est¨¢n negociando su aplicaci¨®n. Melilla ya dispon¨ªa de una aduana con Marruecos, pero Rabat la clausur¨® en 2018 despu¨¦s de m¨¢s de seis d¨¦cadas de funcionamiento en una medida que se interpret¨® como un intento de asfixiar la econom¨ªa de la ciudad. De hecho, decenas de empresas han tenido que cerrar sus puertas. En Ceuta, se trata de crear un puesto aduanero, pues nunca existi¨®.
Ante el lento progreso de las relaciones bilaterales, crecen las dudas sobre la conveniencia de haber modificado una pol¨ªtica de Estado sin ni tan siquiera haber consultado a la oposici¨®n o incluso a Unidas Podemos, el socio de Gobierno del PSOE. ¡°Ha habido avances, pero no un salto cualitativo en las relaciones entre ambos pa¨ªses. Es verdad que se han puesto en marcha varios grupos de trabajo. Quiz¨¢s deberemos esperar antes de poder hacer una valoraci¨®n definitiva del giro dado en marzo¡±, cree Haizam Amirah Fern¨¢ndez, investigador del Real Instituto Elcano.
La analista Itxaso Dom¨ªnguez se muestra m¨¢s esc¨¦ptica: ¡°Seguramente, al Gobierno le ha merecido la pena, ya que Marruecos le est¨¢ haciendo el trabajo sucio en la cuesti¨®n migratoria, como se pudo ver en la valla de Melilla... Otra cosa es a Espa?a, ya que se ha dicho que Marruecos ha renunciado a la soberan¨ªa de Ceuta y Melilla, pero no es verdad¡±, asevera Dom¨ªnguez.
En el ¨¢mbito m¨¢s simb¨®lico de gestos y actitudes, el cambio tampoco es significativo. Mientras el Gobierno espa?ol se prodiga a la hora de tender la mano a Marruecos, como demuestran los elogios de Pedro S¨¢nchez o el ministro de Interior, Fernando Grande-Marlaska, en las labores de contenci¨®n de la migraci¨®n irregular, las autoridades marroqu¨ªes mantienen su actitud ¨¢spera hacia Espa?a. Por ejemplo, la presidenta del Consejo Nacional de Derechos Humanos de Marruecos, Amina Bouayach, culp¨® a las autoridades espa?olas de la tragedia en Melilla por su ¡°renuncia o vacilaci¨®n¡± a la hora de auxiliar a las v¨ªctimas.
Estallido del conflicto con Argel
Mientras las relaciones con Marruecos atraviesan un cierto impasse, la situaci¨®n no es muy diferente en relaci¨®n a Argelia, el otro pa¨ªs que aspira a ser la potencia hegem¨®nica en el Magreb. Las autoridades argelinas han interpretado el repentino cambio de posici¨®n espa?ola respecto al conflicto del S¨¢hara Occidental como una ¡°traici¨®n¡±, y han actuado en consecuencia. Horas despu¨¦s de conocerse el giro de S¨¢nchez, Argel llam¨® a consultas a su embajador, Said Moussi, y ¨¦ste todav¨ªa no ha retornado. De hecho, Moussi fue nombrado el mes pasado nuevo embajador en Par¨ªs, por lo que el puesto de m¨¢ximo representante diplom¨¢tico en Espa?a qued¨® vacante, toda una se?al de que el conflicto entre Madrid y Argel va para largo. ¡°La confianza con Espa?a est¨¢ rota¡±, conf¨ªa una fuente cercana al Gobierno argelino.
El pasado 8 de junio, las autoridades argelinas dieron un nuevo paso en sus represalias contra Espa?a al suspender el Tratado de Amistad, Buena Vecindad y Cooperaci¨®n, que ha enmarcado durante casi dos d¨¦cadas las relaciones bilaterales. Horas despu¨¦s, la patronal financiera argelina envi¨® una misiva a sus miembros en la que les ordenaba congelar todas las transacciones con entidades espa?olas, con la excepci¨®n de aquellas vinculadas al sector del gas natural. En la pr¨¢ctica, ello supon¨ªa la asfixia del comercio bilateral, que afecta aproximadamente a unas 200 compa?¨ªas. Las exportaciones espa?olas a Argelia ascendieron en 2019 a unos 3.000 millones de euros, es decir, un 1% del volumen total.
La reacci¨®n del Gobierno espa?ol fue recurrir a la UE, que sali¨® en su defensa advirtiendo a Argel que habr¨ªa ¡°consecuencias¡± si bloqueaba el comercio entre ambos pa¨ªses, ya que estar¨ªa violando el acuerdo de asociaci¨®n con los Veintisiete. Cuando a finales de julio la patronal bancaria mand¨® una nueva carta a sus miembros para descongelar los flujos con Espa?a, pareci¨® que se hab¨ªa recuperado la normalidad.
¡°Los argelinos son muy orgullosos, y doli¨® que se presentara en algunos medios la normalizaci¨®n como una victoria de Madrid¡±, cuenta un empresario espa?ol con larga experiencia en Argelia. Al d¨ªa siguiente, una nota de la agencia de noticias oficial negaba cualquier tipo de ¡°marcha atr¨¢s¡±. Varias empresas espa?olas contactadas por EL PA?S han visto c¨®mo algunas domiciliaciones bancarias se han podido efectuar, pero buena parte de las mercanc¨ªas contin¨²a retenida en las aduanas. ¡°Nosotros hemos optado por exportar nuestros productos a trav¨¦s de terceros pa¨ªses, como Italia o Portugal. Y no cambiaremos de estrategia hasta que la cosa no est¨¦ clara¡±, conf¨ªa la representante de una empresa catalana. Los dos Ejecutivos mantienen mutismo completo al respecto.
¡°Entre nosotros y Espa?a, no hay ning¨²n intercambio¡±, declar¨® al diario local TSA Algerie Smail Namane, presidente de la Asociaci¨®n de Operadores Econ¨®micos Argelinos (ANOEA). Jamal-Eddin Bou Abdallah, presidente del C¨ªrculo de Comercio e Industria Argelino-Espa?ol (CCIAE), coincide en el diagn¨®stico: ¡°Algunos bancos s¨ª restablecieron, pero el mayor problema es la aduana, que no ha recibido ¨®rdenes de desbloquear. Creo que hay negociaciones abiertas entre ambos gobiernos. Esta situaci¨®n es muy perjudicial para la econom¨ªa argelina, no se puede prolongar.¡±
Preocupaci¨®n por el suministro de gas natural
Una ca¨ªda temporal en el flujo del gas natural argelino exportado a Espa?a hizo temer un corte de suministro justo en plena crisis energ¨¦tica a causa de la guerra en Ucrania. Sin embargo, el ¡°problema t¨¦cnico¡± fue restablecido, y se restableci¨® el suministro a trav¨¦s del gasoducto Medgaz. ¡°Argelia siempre ha cumplido sus contratos y se ha comportado de una forma muy racional¡±, sostiene Aurelia Ma?¨¦, profesora de la Universidad de Barcelona. Ahora bien, las autoridades argelinas ya han advertido que al finalizar el contrato vigente, los precios se renegociar¨¢n al alza.
Adem¨¢s, tambi¨¦n han indicado que su socio preferente ahora ser¨¢ Italia. Antes de su dimisi¨®n, el premier Mario Draghi visit¨® la capital argelina y firm¨® un acuerdo para aumentar el suministro de gas al pa¨ªs transalpino, que ambiciona ser el hub energ¨¦tico del sur de Europa. ¡°No s¨¦ cu¨¢nto de estos cambios son fruto del conflicto, o son decisiones anteriores. Los precios se iban a renegociar al alza igualmente, y la apuesta por Italia tiene sentido porque est¨¢ mejor conectada con el centro de Europa a trav¨¦s de gasoductos¡±, apostilla Ma?¨¦, que lamenta algunas actitudes y declaraciones espa?olas durante los ¨²ltimos a?os que exudaban un cierto ¡°menosprecio¡± hacia el socio argelino.
A diferencia de Marruecos, nunca Argel ha utilizado la ¡°carta migratoria¡± para presionar. Seg¨²n Frontex, hasta el 17 de julio, la llegada de argelinos cay¨® un 56% respecto a 2021. ¡°El Gobierno ha intensificado el control de las fronteras para evitar que escapen en patera personas perseguidas por la justicia, y ante un aumento del tr¨¢fico de drogas¡±, asevera el analista Otman Lahiani. ¡°La decisi¨®n de Trump de reconocer la soberan¨ªa marroqu¨ª en el S¨¢hara rompi¨® el equilibrio que hab¨ªa permitido a Espa?a tener buenas relaciones a la vez con Argelia y Marruecos. Hay que buscar un nuevo equilibrio¡±, concluye Amirah Fern¨¢ndez.
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