La elecci¨®n de su presidente abre el primer pulso en el nuevo Constitucional

Los cuatro nuevos magistrados del Constitucional toman posesi¨®n este lunes en un acto que marcar¨¢ el inicio de una etapa en la que el tribunal contar¨¢ con una clara mayor¨ªa del sector progresista ¡ªcompuesta por siete magistrados, por cuatro conservadores¡ª, pero a¨²n con importantes incertidumbres, como la de qui¨¦n ocupar¨¢ la presidencia. Dos magistrados del nuevo grupo mayoritario, C¨¢ndido Conde-Pumpido y Mar¨ªa Luisa Balaguer, han mostrado su inter¨¦s por optar al cargo, y ser¨¢n los 11 componentes del pleno los que decidan.

En principio, no hay un plazo para celebrar esa sesi¨®n plenaria. Concluido el acto de toma de posesi¨®n de los cuatro nuevos magistrados ¡ªJuan Carlos Campo y Laura D¨ªez, nombrados por el Gobierno, y Mar¨ªa Luisa Segoviano y C¨¦sar Tolosa, designados por el Consejo General del Poder Judicial¡ª, la presidencia queda temporalmente en manos del magistrado de mayor edad. Se trata en este caso de Ricardo Enr¨ªquez, perteneciente al sector conservador y encargado como presidente transitorio de convocar el primer pleno. El objetivo es que la nueva etapa arranque con rapidez, y que en esa primera sesi¨®n plenaria quede resuelta la inc¨®gnita sobre la identidad del nuevo presidente o presidenta, un dato que marcar¨¢ los pr¨®ximos dos a?os y medio de la vida del Constitucional.

En la presidencia residen las principales competencias de organizaci¨®n del tribunal, como la confecci¨®n del orden del d¨ªa de los plenos y, por tanto, la decisi¨®n de qu¨¦ se somete a deliberaci¨®n para dictar sentencia y qu¨¦ permanece a la espera de una mayor maduraci¨®n para lograr fallos con alto consenso y evitar fracturas internas. En los ¨²ltimos a?os, las divisiones han aparecido con frecuencia, porque las discrepancias entre conservadores y progresistas cristalizaron en posiciones irreconciliables en numerosas ocasiones, entre ellas las sentencias que anularon los decretos del estado de alarma para hacer frente a la pandemia.

Conde-Pumpido y Balaguer llegan a esta recta final para tratar de acceder a la presidencia como miembros del grupo de magistrados que se encuentran en el ¨²ltimo trienio de su mandato de nueve a?os. Una ley no escrita y fruto de la tradici¨®n conduce a que el nuevo presidente surja de ese grupo, ahora compuesto por tres miembros del tribunal: los dos mencionados, m¨¢s el conservador Ricardo Enr¨ªquez. Tanto si el nuevo presidente es Conde-Pumpido como si lo es Balaguer, Enr¨ªquez ser¨¢ probablemente el vicepresidente. El motivo es que otra norma de la misma ley no escrita prev¨¦ que si el presidente es progresista, el vicepresidente ser¨¢ del grupo conservador, y viceversa.

Si los dos candidatos del sector progresista mantienen su candidatura, la consecuencia ser¨¢ que el grupo se habr¨¢ dividido en la primera votaci¨®n de la nueva etapa, la que decide qui¨¦n preside el tribunal. Balaguer ha recibido en los ¨²ltimos meses muestras de apoyo de los magistrados conservadores, que ahora sumar¨¢n los mencionados cuatro votos. Por tanto, necesitar¨¢ al menos otros dos para acceder a la presidencia. Uno ser¨ªa el suyo, pero otro tendr¨ªa que provenir necesariamente del sector progresista. En medios del propio tribunal se ha especulado con la posibilidad de que ese voto provenga de la magistrada Mar¨ªa Luisa Segoviano, en parte por su coincidencia con los puntos de vista de Balaguer sobre cuestiones relevantes, como la necesidad de una progresiva incorporaci¨®n de la perspectiva de g¨¦nero en la doctrina del Constitucional.

Las mismas fuentes estiman que Conde-Pumpido cuenta con el apoyo de los magistrados Ram¨®n S¨¢ez e Inmaculada Montalb¨¢n ¡ªincorporados al tribunal en noviembre de 2021¡ª, as¨ª como de los nuevos miembros del Constitucional Juan Carlos Campo y Laura D¨ªez, todos ellos del sector progresista. El voto de Segoviano, por tanto, puede ser decisivo para la elecci¨®n de presidente o presidenta del ¨®rgano de garant¨ªas.

Segoviano, exmagistrada del Supremo, no se ha decantado a¨²n p¨²blicamente por ninguno de los dos candidatos, pero el pasado lunes dio algunas pistas en declaraciones a Onda Cero. Dijo que es importante ¡°limar asperezas entre los miembros que componen el tribunal, tratar de acercar posiciones, ser capaz en un determinado momento de calmar los ¨¢nimos y suavizar¡±, porque ¡°esto es muy importante a la hora de que el tribunal funcione¡±. Y a?adi¨® que hasta ma?ana no podr¨¢ tomar ¡°el pulso¡± al Constitucional, cuando tome posesi¨®n, y hable con los dem¨¢s magistrados para conocer ¡°el plan o la previsi¨®n que pueden tener cada uno de los aspirantes¡±.

Esta es, de hecho, la te¨®rica situaci¨®n de los 11 integrantes del ¨®rgano de garant¨ªas. Todos han dicho reservarse el sentido de su decisi¨®n hasta que el tribunal quede compuesto con sus nuevos miembros. Tras el acto de toma de posesi¨®n, ma?ana, los magistrados dispondr¨¢n de un breve plazo, que puede ser de un solo d¨ªa, con el fin de intercambiar consultas, y celebrar a rengl¨®n seguido el pleno para nombrar presidente o presidenta, y vicepresidente.

En este clima de prudencia y comp¨¢s de espera, lo que m¨¢s ha sorprendido tanto a los magistrados del bloque conservador como a los del grupo progresista ha sido que, al ser preguntada sobre si la Constituci¨®n permite ejercer el derecho a la autodeterminaci¨®n a los distintos territorios que conforman Espa?a, Segoviano manifestara en la mencionada entrevista que ¡°es un tema complejo, con muchas aristas¡± que llegado el momento habr¨ªa que ¡°estudiar¡±. En ambos sectores ha llamado la atenci¨®n que se entre en consideraciones anticipatorias que puedan alimentar la tesis de que se preparan escenarios de concesiones a los planteamientos independentistas.

La relevancia del voto de Segoviano es, en todo caso, un dato clave para entender los motivos por los que el sector conservador del Consejo General del Poder Judicial se opuso con tanta vehemencia a que el candidato del grupo progresista fuese el magistrado Jos¨¦ Manuel Bandr¨¦s. Tanto en el Consejo como en el Constitucional se daba por hecho que Bandr¨¦s apoyar¨ªa la candidatura de Conde-Pumpido para la presidencia del ¨®rgano de garant¨ªas. Los conservadores, a su vez, vetaron a dicho magistrado, proponiendo otros alternativos, con lo que consiguieron que los progresistas aceptasen renunciar a su principal candidato con el fin de que no se siguiera prolongando el bloqueo del Constitucional.

Nuevas tensiones

Esa negociaci¨®n ha discurrido en paralelo al estallido de nuevas tensiones y enfrentamientos internos en el tribunal, provocados por el auto que paraliz¨®, a petici¨®n del PP, la tramitaci¨®n de las enmiendas del PSOE y Unidas Podemos a la ley que persegu¨ªa, entre otros objetivos, facilitar el desbloqueo del propio Constitucional. Dicho auto se dict¨® con el apoyo de los seis magistrados conservadores que han formado el bloque mayoritario en el tribunal hasta su actual renovaci¨®n.

A su vez, los cinco integrantes del hasta ahora minoritario sector progresista dieron a conocer unos votos discrepantes muy cr¨ªticos, en los que se acusaba a los componentes del grupo conservador de interferir en la vida parlamentaria, extralimit¨¢ndose en sus funciones y poniendo en riesgo los equilibrios del sistema.