Cuatro a?os para divorciarse: los narcos colapsan los juzgados de C¨¢diz

Cuando la jueza Alba Serrano lleg¨®, a petici¨®n propia, al Juzgado de Primera Instancia e Instrucci¨®n 3 de La L¨ªnea de la Concepci¨®n en diciembre de 2021, busc¨® en los armarios las causas de narcotr¨¢fico m¨¢s antiguas. No le cost¨® encontrarlas: ¡°Estaban todas paradas¡±, recuerda. Se top¨® con macrooperaciones policiales de miles de p¨¢ginas y m¨¢s de nueve a?os. Pero tambi¨¦n con divorcios por tramitar desde hace cuatro a?os o juicios de custodia de menores en los que los ni?os ya eran mayores de edad. El colapso predomina en los juzgados mixtos (civiles y penales) de las ciudades costeras gaditanas, donde las operaciones de tr¨¢fico de drogas, la alta rotaci¨®n de profesionales y la falta de medios crean una tormenta perfecta que acaba en tr¨¢mites paralizados y en prescripciones.

Una cincuentena de imputados en una causa por narcotr¨¢fico que llevaba desde 2007 sin avances en el Juzgado 2 de Barbate se han visto beneficiados por el archivo forzoso de la investigaci¨®n. El 16 de enero, la Fiscal¨ªa de C¨¢diz asumi¨® la prescripci¨®n del proceso, seg¨²n adelant¨® la Cadena SER. ¡°Se fue la juez y todos los que vinieron detr¨¢s, al menos han sido ocho en estos a?os, ten¨ªan que asumir una causa de 15.000 folios. Para eso hay que tener tiempo y en esos juzgados es imposible¡±, resume Ana Villag¨®mez, fiscal Antidroga de C¨¢diz y Andaluc¨ªa. Y Villag¨®mez anticipa que puede que no sea el ¨²nico caso que se cierra as¨ª en Barbate: ¡°Ahora all¨ª no hay una actividad de narcotr¨¢fico muy destacada. Viene de atr¨¢s. Tenemos causas de 2009 a 2014, todas por calificar¡±.

El atasco de los juzgados permite seguir el rastro de la actividad del narcotr¨¢fico en C¨¢diz. En los a?os 2000, se hizo fuerte en Barbate. En la siguiente d¨¦cada, salt¨® al Campo de Gibraltar. Y tras el refuerzo policial operado por el Gobierno en 2018, las mafias se dispersaron a otros puntos costeros. Hoy esa estela se traduce en juzgados en apuros en Barbate, La L¨ªnea, Chiclana o El Puerto de Santa Mar¨ªa. ¡°En general, todo funciona regular tirando a mal. Pero cuanto m¨¢s al sur te vas, peor es¡±, explica el abogado Roberto Peralta, especializado en asuntos de familia y siniestralidad laboral. Son esas causas sin reos en prisi¨®n las que precisamente se suelen quedar atr¨¢s en la cola de tareas pendientes de los juzgados.

Mar¨ªa ¡ªnombre ficticio¡ª solo tiene claro algo: ¡°La justicia no se est¨¢ portando bien conmigo y con mi hijo¡±. La mujer, de 30 a?os y clienta de Peralta, lleva esperando desde marzo de 2015 a que un juzgado de Chiclana embargue a su pareja los 150 euros de manutenci¨®n mensuales que nunca lleg¨® a pasar a su hijo. Pese a haberse celebrado el juicio en 2017 , ¡°en estos ocho a?os solo ha conseguido que le retengan 25 euros¡±, relata el letrado con enfado.

El abogado ya se ha acostumbrado a ver juicios de divorcios que tardan ¡°hasta cuatro a?os¡± en se?alarse, o procesos por accidentes en los que tiene que acabar recomendando a sus clientes que mejor accedan a un acuerdo econ¨®mico con los seguros para evitar pleitos. La letrada Mar¨ªa N¨²?ez, con casos en Chiclana y Barbate, a?ade: ¡°Tengo casos pendientes desde el a?o 2020 con menores y est¨¢n completamente paralizados¡±.

Objetivo: desatascar el juzgado

La jueza Serrano est¨¢ empe?ada en desatascar su juzgado, aunque sea ¡°a costa¡± de su vida personal. ¡°Le digo a mis funcionarios que imaginen que es su padre o su hermano. Yo soy la juez, pero al final estamos tratando con problemas personales o econ¨®micos. Duermo tranquila porque s¨¦ que m¨¢s no puedo hacer¡±, explica. La misma diligencia ha intentado aplicar a las macrocausas de narcotr¨¢fico ¡ªahora menos abundantes en La L¨ªnea que hace dos a?os¡ª que estaban paralizadas y que, a veces, acaban reducidas a acuerdos previos al juicio para aplicar dilaciones indebidas: ¡°Prefiero no saber qu¨¦ pasar¨¢ con ellas. Da rabia y prefiero no saber, si no dejar¨ªamos de trabajar. Al menos, que por nosotros no quede¡±.

El colapso que generan las causas por narcotr¨¢fico se ve agravado por otros problemas end¨¦micos de los juzgados de pueblos de toda Espa?a. La alta rotaci¨®n de los profesionales es una de las m¨¢s destacadas. La jueza Serrano lleg¨® a La L¨ªnea en diciembre de 2021 y sus ganas de mantenerse en la plaza ya la han convertido en la decana del lugar, porque el resto ¡°ya se ha marchado¡±. Algunos jueces se mantienen en los juzgados mixtos de la provincia apenas seis meses. La fiscal Villag¨®mez lo explica: ¡°Con tanto trabajo no les da tiempo a hacer nada. Es un horror y nadie quiere estar. Es normal¡±.

La falta de medios personales y materiales es otro gran inconveniente. El abogado Peralta tiene claro que las ciudades costeras de C¨¢diz necesitan ¡°m¨¢s jueces de refuerzo, m¨¢s salas de vistas, m¨¢s funcionarios¡± y una digitalizaci¨®n real que ahora ¡°solo se da sobre el papel¡±. En el juzgado de Serrano, una inspecci¨®n recomend¨® que hubiese dos funcionarios m¨¢s: ¡°Los he reclamado, pero como ahora hemos conseguido rebajar la carga de trabajo y ahora va mejor, no nos lo van a poner¡±. La fiscal Villag¨®mez a?ade un punto clave: ¡°Tenemos un sistema procesal que no est¨¢ preparado para sacar causas de cierto n¨²mero de investigados por los tr¨¢mites a los que los abogados recurren¡±.

Pese a tanto impedimento, Serrano no parece dispuesta a tirar la toalla. ¡°La L¨ªnea es un destino de paso, pero me he quedado porque estoy a gusto. De hecho, vine voluntariamente porque me gusta la instrucci¨®n¡±. Cada d¨ªa, se levanta a las cuatro para desatascar tanta tarea pendiente, se divide las ma?anas de la semana en juicios civiles y penales y reserva las tardes a avanzar m¨¢s trabajo. Suple las carencias con esfuerzo y tiene claro que el ritmo dif¨ªcilmente bajar¨¢: ¡°Es la zona que es y eso no lo podemos cambiar. Lo que peor llevo es no poderle dar la importancia a cada caso que requiere. Trabajar r¨¢pido siempre aumenta el riesgo de errores¡±.