Aragon¨¨s no rompe nada en el Senado

Una negociaci¨®n tan delicada como la que est¨¢ dirigiendo Pedro S¨¢nchez para la investidura es un campo de minas permanente. En cualquier momento puede estallar todo. Y lo que m¨¢s riesgo entra?a son las intervenciones p¨²blicas. Por eso, el presidente ha ordenado silencio absoluto a todo el PSOE, incluidos los presidentes auton¨®micos que no han acudido este jueves al Senado a lo que para el Gobierno es una especie de gran mitin del PP. Cada vez que hay alguna intervenci¨®n relevante de un dirigente independentista, el PSOE teme que pueda romperse todo. Y por eso, nada m¨¢s escuchar a Pere Aragon¨¨s en el Senado, los socialistas respiraron aliviados: el president no viaj¨® a Madrid a romper nada.

Con el PP en pleno delante, y los independentistas mir¨¢ndole desde Catalu?a, el riesgo era que el discurso de Aragon¨¨s se convirtiera en una gran reivindicaci¨®n del proc¨¦s, en un gran ¡°lo volveremos a hacer¡± que podr¨ªa complicar las negociaciones. Pero no fue eso. Aragon¨¨s mantuvo las posiciones cl¨¢sicas del secesionismo, como era de esperar ¨DERC ha sido independentista desde su fundaci¨®n en 1931¨D, y reivindic¨® el refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n. Pero la clave est¨¢ en los matices: dijo que esa consulta tendr¨ªa que ser pactada, como el refer¨¦ndum escoc¨¦s de 2014, lo cual supone una renuncia impl¨ªcita a la unilateralidad. Y defendi¨® que los catalanes tendr¨¢n que votar, la gran reclamaci¨®n hist¨®rica del independentismo, pero habl¨® de votar sobre ¡°un acuerdo¡±, que es lo que se pact¨® en 2020 entre el PSOE y ERC para la anterior investidura de S¨¢nchez; esto es, una ¡°consulta¡± sobre los ¡°posibles acuerdos¡± de la mesa de di¨¢logo que ahora ERC quiere revitalizar.

Si Junts asumiera este tipo de posiciones, el acuerdo para la investidura ya estar¨ªa pr¨¢cticamente hecho. ERC exige al PSOE un compromiso de revitalizar la mesa de negociaci¨®n con el Gobierno sobre el encaje territorial de Catalu?a. Para el partido de Oriol Junqueras es fundamental que el pacto no se quede solo en la amnist¨ªa. ¡°La amnist¨ªa es imprescindible para devolver a la pol¨ªtica un conflicto que es pol¨ªtico, pero es un punto de partida, no de llegada¡±, insiste Aragon¨¨s. Y esa es la idea central de la negociaci¨®n de ERC: lograr la amnist¨ªa, el traspaso completo de la red ferroviaria de Cercan¨ªas y un paquete de inversiones, y tambi¨¦n recuperar la mesa para buscar una salida al conflicto pol¨ªtico. Todo esto es asumible para el PSOE. Lo que no pueden asumir los socialistas es la resoluci¨®n que promovi¨® ERC y pact¨® con Junts a finales de septiembre, que se?alaba que no habr¨ªa investidura si no se garantizaban las condiciones para un refer¨¦ndum. Ah¨ª Pedro S¨¢nchez y Salvador Illa mandaron parar. Y la negociaci¨®n con ERC se recondujo, hasta el punto de que, el pasado d¨ªa 11, el presidente llam¨® a Junqueras despu¨¦s de m¨¢s de seis a?os sin una conversaci¨®n larga.

La aparici¨®n de Aragon¨¨s en el Senado no rompi¨® nada. Parece m¨¢s pensada para consumo interno del independentismo y como forma de reforzar la presencia de un president que se desdibuja en cuanto recupera protagonismo su l¨ªder, Junqueras, que es quien realmente lleva las negociaciones y ¨²ltimamente multiplica su presencia en Madrid. Aragon¨¨s es president porque Junqueras no pod¨ªa presentarse por la pena de inhabilitaci¨®n que sigue pesando sobre ¨¦l tras la condena por su papel en el proc¨¦s y el indulto parcial de junio de 2021. Si la amnist¨ªa le permite al l¨ªder volver a primera l¨ªnea, Aragon¨¨s tendr¨¢ que dejar paso. Aunque a¨²n no est¨¢ nada claro, depende de los recursos que haya contra la amnist¨ªa que Junqueras y Puigdemont lleguen realmente a poder presentarse a las pr¨®ximas elecciones auton¨®micas catalanas, sobre todo si son en 2024 ¨Dcomo m¨¢ximo llegar¨ªan en marzo de 2025¨D. El discurso s¨ª sirvi¨® para mostrar que la negociaci¨®n, al menos con ERC, no est¨¢ atascada ni parece imposible.

Un problema llamado Junts

El problema, por tanto, est¨¢ m¨¢s bien en Junts, que adem¨¢s de la amnist¨ªa, algo ya asumido absolutamente por el PSOE, exige otras cuestiones mucho m¨¢s dif¨ªciles de digerir, como un ¡°mecanismo de verificaci¨®n¡±, esto es, algo como el mediador que ya rompi¨® las negociaciones con los independentistas en febrero de 2019 y llev¨® a las elecciones de abril de ese a?o. Pero, sobre todo, la dificultad est¨¢ en una cuesti¨®n de fondo: Junts de momento no ha dado ese salto de ERC de renunciar impl¨ªcitamente a la unilateralidad y hablar solo de refer¨¦ndum pactado, y dejar, por tanto, de ¡°reivindicar la legitimidad del 1 de octubre¡±, como suele decir Carles Puigdemont.

Aun as¨ª, y en medio de un enorme secretismo en las negociaciones, en el Senado se vivi¨® de nuevo la sensaci¨®n ¨Dextendida no solo entre socialistas e independentistas, sino tambi¨¦n entre los presidentes auton¨®micos del PP y dirigentes de este grupo consultados¨D de que habr¨¢ investidura aunque sea dif¨ªcil cerrar el pacto. Quedan pocas semanas para desvelar el misterio, pero de momento la negociaci¨®n super¨® otro hito delicado, y Aragon¨¨s, como antes Puigdemont o Junqueras, no rompi¨® nada en una aparici¨®n p¨²blica con muchos riesgos para un intento de pacto que vive permanentemente en el alambre.