Hace cuatro meses, cuando fue investida alcaldesa de Valencia, la popular Mar¨ªa Jos¨¦ Catal¨¢ asegur¨®, tajante: ¡°Ni un paso atr¨¢s en la lucha contra la violencia de g¨¦nero¡±. La regidora hab¨ªa logrado el bast¨®n de mando por mayor¨ªa simple al ser el PP la fuerza m¨¢s votada el 28-M, con 13 de los 33 concejales del consistorio. Su intenci¨®n era sacar adelante un mandato en minor¨ªa con pactos puntuales con Vox como socio preferente. Pero la resistencia de Catal¨¢ ha durado solo 118 d¨ªas: los ultras, con sus cuatro ediles, exig¨ªan imponer sus postulados e imped¨ªan la gobernabilidad. El viernes, la regidora tuvo que aceptar su entrada en el equipo de gobierno de la tercera ciudad de Espa?a, el principal pacto municipal de ambas formaciones.

El 17 de junio, el PP consigui¨® las alcald¨ªas de Valencia, Sevilla, Zaragoza, Palma, Alicante, Albacete, Castell¨®n, Huelva, C¨¢ceres, Huesca, Segovia y Ceuta, donde los populares fueron el partido m¨¢s votado el 28 de mayo pero por mayor¨ªa simple. El problema ha venido despu¨¦s, ante la necesidad de alcanzar acuerdos para sacar adelante los presupuestos y otras iniciativas. En la mayor¨ªa de ayuntamientos, Vox es el socio preferente. Y en ciudades como Valencia o Sevilla, la extrema derecha opone resistencia a aprobar medidas de los populares cuando no se aceptan sus condiciones. Estas convulsiones han desembocado en Valencia en una nueva coalici¨®n de PP y Vox, que se suma a las de otras capitales de provincia como Burgos, Valladolid, Toledo, Guadalajara y Ciudad Real, donde los populares fueron la segunda fuerza y, con ayuda de los ultras, arrebataron la alcald¨ªa al PSOE, el partido m¨¢s votado.

Entre las iniciativas acordadas por el PP y Vox en diferentes administraciones de toda Espa?a donde gobiernan en coalici¨®n est¨¢n la eliminaci¨®n de consejer¨ªas y concejal¨ªas de igualdad, la retirada de banderas LGTBI, la censura de obras de teatro y pel¨ªculas infantiles por cuestiones ideol¨®gicas, la supresi¨®n de carriles bici y el incumplimiento de las zonas de bajas emisiones. Tambi¨¦n han elegido perfiles negacionistas del cambio clim¨¢tico y de la violencia de g¨¦nero para presidir Parlamentos como los de la Comunidad Valenciana, Baleares y Arag¨®n; y se han aumentado subvenciones a la tauromaquia, se han ampliado cotos de caza, eliminado leyes de memoria democr¨¢tica y clausurado oficinas dedicadas a perseguir la corrupci¨®n y promocionar la transparencia.

¡°La tensi¨®n con Vox va a ir a m¨¢s. Aunque Vox tensa, romper, no rompe¡±, advierte un veterano senador popular. La ejecutiva nacional del PP descarta que Vox se haya coordinado para torpedear los gobiernos del PP a los que prestan apoyo externo, y atribuye los tira y afloja en las diferentes administraciones a que a Vox se le est¨¢n descontrolando los cargos que ficharon por aluvi¨®n.

El l¨ªder popular, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, ha permitido la entrada de Vox en Valencia esta semana despu¨¦s de haber reconocido hace unos d¨ªas que las coaliciones suscritas en los gobiernos auton¨®micos de la Comunidad Valenciana y de Extremadura y en unos 140 ayuntamientos de toda Espa?a le habr¨ªan costado unos ¡°10 diputados¡± en las elecciones generales del 23-J.

La secretaria general del PP, Cuca Gamarra, enmarc¨® este viernes en la ¡°estabilidad del d¨ªa a d¨ªa¡± el acuerdo de coalici¨®n de Valencia, y no quiso extenderlo a otros consistorios donde su partido gobierna con turbulencias, como el de Sevilla. Adem¨¢s de las corporaciones locales, el PP gobierna junto a Vox en las comunidades de Castilla y Le¨®n, Comunidad Valenciana, Extremadura, Arag¨®n y Murcia. Un partido para el que, seg¨²n su l¨ªder, Santiago Abascal, el Estado auton¨®mico supone un ¡°destructivo gasto ideol¨®gico¡± y ¡°se ha convertido en un enemigo de la pluralidad, las libertades de Espa?a y la igualdad de derechos¡±. En Baleares, la presidenta Marga Prohens fue investida gracias a un acuerdo program¨¢tico con Vox, que s¨ª entr¨® en los consells insulares de Mallorca y Menorca.

La pol¨ªtica ling¨¹¨ªstica en Baleares ha propiciado esta semana el ¨²ltimo gran desencuentro entre PP y Vox, que ha mandado un aviso a navegantes impidiendo la aprobaci¨®n del techo de gasto de los primeros Presupuestos de Prohens. Varias voces del PP sostienen que, para evitar ¡°desestabilizar¡± gobiernos como el balear, los acuerdos de investidura han de cumplirse punto por punto, aunque supongan un tr¨¢gala. Pero no est¨¢n dispuestos a cruzar determinadas l¨ªneas. ¡°Esto de convertir el presupuesto en documento ideol¨®gico de Vox, pues no¡±, se queja un presidente auton¨®mico del PP. Otras fuentes achacan los obst¨¢culos de los ultras a que el partido de Abascal se encuentra en ¡°horas bajas¡± y ¡°busca titulares¡± para recuperar el foco despu¨¦s de haber pasado de 52 a 33 diputados en el Congreso.

El abrupto estreno de sus gobiernos de coalici¨®n tras el 28-M en Comunidad de Valencia y Extremadura y m¨¢s de 140 ayuntamientos provoc¨® una reacci¨®n en las elecciones generales del 23-J de la que el PSOE fue el gran beneficiado con un mill¨®n m¨¢s de votos que en su victoria en las legislativas de 2019. El contenido pol¨¦mico de los acuerdos moviliz¨® al electorado progresista y dej¨® noqueado a Feij¨®o, que gan¨® las elecciones el 23-J pero sin posibilidad de formar una mayor¨ªa parlamentaria. La ¨²ltima concesi¨®n en el Ayuntamiento de Valencia, con la entrada de los ultras en el Gobierno, se suma al espacio ya cedido a Vox hace cuatro meses, cuando el PP multiplic¨® su poder territorial mediante pactos en los que asumi¨® como propios postulados de la extrema derecha, y a la sucesi¨®n de medidas que se han ido adoptando desde entonces en los distintos consistorios y Ejecutivos auton¨®micos.

¡°Hablan ustedes de votos por sillones. ?Por cu¨¢ntos votos de la extrema derecha que niega la violencia machista han comprado ustedes alguno de sus sillones para ser presidente o presidenta auton¨®micos?¡±, record¨® el jueves Juan Espadas, el portavoz del PSOE en la comisi¨®n general de comunidades del Senado. Seis de los 11 presidentes auton¨®micos del PP est¨¢n condicionados en el d¨ªa a d¨ªa por Vox, como reflejan las medidas aprobadas o a¨²n sobre la mesa de sus gobiernos desde que el presidente valenciano, Carlos Maz¨®n, dio el pistoletazo de salida a los pactos con los ultras. ¡°Me gustar¨ªa dar las gracias al presidente Maz¨®n, gracias a ¨¦l estamos en este debate, porque gracias a su nerviosismo e impetuosidad cerr¨® un acuerdo r¨¢pido de gobierno con Vox, con la extrema derecha¡±, ironiz¨® el senador Enric Xavier Morera (Comprom¨ªs).