Cinco a?os de la Espa?a Vaciada, la revuelta que acab¨® despobl¨¢ndose
El movimiento contra la discriminaci¨®n de las provincias m¨¢s rurales cumple un lustro vencida por los cambios en la agenda pol¨ªtica y la divisi¨®n interna
Tractores tomando Madrid. Los agricultores concentrados en la capital este 2024 tuvieron precursores cinco a?os antes con varias similitudes: descontento con el desequilibrio en zonas rurales y robustos veh¨ªculos agrarios sobre las grandes avenidas. La denominada ¡°Revuelta de la Espa?a Vaciada¡± agrup¨® el 31 de marzo de 2019 a 100.000 personas seg¨²n los organizadores y 50.000 para las autoridades, una multitud para denunciar la despoblaci¨®n de sus provincias. La marcha mostr¨® un movimiento en ebullici¨®n meses antes de que Teruel Existe entrara en el Congreso de los Diputados con un decisivo esca?o. Soria ?YA! logr¨® tres plazas en las Cortes de Castilla y Le¨®n en febrero de 2022 pero las elecciones posteriores, locales, auton¨®micas y generales, han desmantelado la presencia de estas formaciones. El cambio de guion en la agenda social y las divisiones internas, ali?adas con intereses pol¨ªticos localistas, han desinflado la din¨¢mica.
Tom¨¢s Guitarte se convirti¨® en la voz de los territorios demogr¨¢ficamente castigados. El veterano movimiento social Teruel Existe present¨® a trav¨¦s de ¨¦l consignas espec¨ªficas de la provincia pero bien conocidas en otros territorios despoblados, con Arag¨®n, Castilla y Le¨®n y Castilla-La Mancha como tridentes del vaciamiento censal. El ahora parlamentario de Teruel Existe en las Cortes de Arag¨®n, en la oposici¨®n a PP-Vox, pronto conoci¨® los colmillos de la pol¨ªtica y el cenagal circundante: Guitarte recibi¨® infinidad de amenazas y presiones para votar contra Pedro S¨¢nchez en la investidura finalmente triunfal del PSOE en enero de 2020. El diputado novato cont¨® con escolta y durmi¨® en un lugar desconocido los d¨ªas previos a ayudar con su voto a ungir a S¨¢nchez, siempre bajo la premisa de obtener beneficios y compromisos para los territorios despoblados. La tribuna del Congreso acogi¨® discursos sobre ¡°Renovables s¨ª pero no as¨ª¡±, acerca de la invasi¨®n de molinos e¨®licos y placas solares en provincias rurales sin importar el impacto y sin dar beneficios; o el plan 100-30-30 para disponer de 100 megas de Internet en todo el pa¨ªs y que todos los n¨²cleos tengan a menos de 30 kil¨®metros colegios u hospitales adem¨¢s de infraestructuras dignas de transporte.
Hoy Guitarte se resigna ante el atropello de otras cuestiones de actualidad pol¨ªtica sobre su causa: ¡°Lo que denunciamos no ha desaparecido¡±. Para ¨¦l, pese a la endiablada aritm¨¦tica parlamentaria, la pasada legislatura, deslucida por la pandemia, no reflej¨® una ¡°voluntad firme ni valent¨ªa del Gobierno¡± para actuar sobre la despoblaci¨®n. ¡°Estas cuestiones han de llegar claramente a la ciudadan¨ªa, no hemos tenido esa capacidad para transmitirla, tampoco tenemos esos recursos econ¨®micos¡±, sostiene, reconociendo el error de creer en que ¡°bastar¨ªa con llegar a las instituciones¡±: ¡°Eso es imprescindible pero hace falta continuidad, hay unas sinergias pol¨ªticas y econ¨®micas que tienden a que no pase nada¡±.
Buenas palabras, pocos resultados. El tema contaba con buena acogida social y asomaba en los discursos pol¨ªticos hasta que todo cambi¨®. El coronavirus rompi¨® la agenda informativa y mud¨® las preocupaciones. La despoblaci¨®n pas¨® a un plano muy secundario. Despu¨¦s, la guerra de Ucrania, un conflicto b¨¦lico en el rellano de Europa. Inflaci¨®n, crisis energ¨¦tica, zozobra econ¨®mica. M¨¢s tarde, Israel atacaba Palestina. La agenda se cebaba con esas cuestiones cruciales y aparcaba el desequilibro demogr¨¢fico. De fondo, los cuchillos pol¨ªticos: el PP cambiaba de liderazgo pero S¨¢nchez resist¨ªa, el independentismo catal¨¢n se convirti¨® en indispensable para la gobernabilidad, los indultos y la amnist¨ªa dominaban las portadas, el fen¨®meno de Isabel D¨ªaz Ayuso se inflamaba contra S¨¢nchez desde la Comunidad de Madrid, la extrema derecha irrumpi¨® en comunidades y ciudades como socia del PP y las elecciones de verano de 2023 se trazaron como una lucha entre bloques. Entretanto, un espejismo: los tres procuradores de Soria ?YA! en Castilla y Le¨®n, arrasando en la provincia pero in¨²tiles en la gobernabilidad cuajada entre PP y Vox en 2022.
La Espa?a Vaciada se vaciaba pese a los empe?os de llenar listas para conseguir mandar en las urnas. El ¨¦xito de Soria ?YA! en Castilla y Le¨®n, basado en d¨¦cadas de activismo en calles y pueblos, escondi¨® un azote al movimiento pol¨ªtico: las plataformas concurrentes en Salamanca, Valladolid, Burgos, Segovia y Palencia se estrellaron, recabaron un pu?ado de papeletas y evidenciaron su falta de arraigo con fichajes muy criticados. En Valladolid se recicl¨® a m¨²ltiples miembros rebotados de Ciudadanos y en otras provincias vieron c¨®mo excargos de otros partidos buscaban afincarse bajo nuevas siglas. Ese batacazo se replic¨® en las elecciones auton¨®micas y locales de mayo de 2023: Espa?a Vaciada concurri¨® en 233 municipios, 50 entidades menores, 13 provincias y cuatro regiones (Asturias, Arag¨®n, La Rioja y Castilla-La Mancha). En ninguna cosecharon datos significativos o importantes para entrar en gobiernos locales o auton¨®micos m¨¢s all¨¢ de municipios puntuales.
El l¨ªder de Soria ?YA!, ?ngel Ce?a, lamenta el olvido sobre una realidad que afecta ¡°al 70% de Espa?a¡±. ¡°?Hay algo en el debate p¨²blico sobre los problemas de los ciudadanos? Hay una confrontaci¨®n exacerbada entre dos bloques en campa?a electoral permanente sin debatir sobre nada¡±, reflexiona Ce?a, quien reconoce cierta ¡°precipitaci¨®n¡± en la configuraci¨®n de las plataformas, pues muchas se implantaron en lugares ¡°sin tradici¨®n reivindicativa de base¡± como s¨ª lat¨ªa en Teruel o Soria. El soriano ve posible recuperar protagonismo ante la persistencia del desaf¨ªo demogr¨¢fico y la desatenci¨®n de PP o PSOE: ¡°Dudo que Espa?a en 20 a?os pueda soportar tener a Madrid y las costas superpobladas y desiertos demogr¨¢ficos en el interior¡±. Fuentes cercanas al movimiento admiten las poco propicias circunstancias, pero reniegan de la falta de ¡°metodolog¨ªa¡± y la falta de escucha en los territorios, am¨¦n de errores como ¡°alianzas con terceros sin v¨ªnculo con la despoblaci¨®n, que hab¨ªa que presentarse a cualquier precio, con cualquiera y sin ning¨²n programa y que quienes se presentaban no eran los mejores, sino los m¨¢s osados¡±. Adem¨¢s, aparecieron ¡°diferencias, desconfianza y celos entre la parte pol¨ªtica y social¡±.
La conmemoraci¨®n del lustro reivindicativo se ha producido mediante el lema ¡°?Act¨²a por tu pueblo!¡±, que se une a iniciativas de a?os anteriores como tocar las campanas de las iglesias o guardar minutos de silencio. En esta ocasi¨®n, entre las lluvias y la Semana Santa, apenas unos cuantos grupos se congregaron en diversas localidades nacionales.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.