El Gobierno vasco da la semilibertad a ¡®Susper¡¯, el ¡®archivero¡¯ de ETA
Fern¨¢ndez Iradi, que sufre una grave enfermedad, es el recluso n¨²mero 71 de la organizaci¨®n terrorista que ha sido clasificado en tercer grado penitenciario desde que el ejecutivo de Vitoria asumi¨® las competencias penitenciarias en 2021
El Gobierno vasco ha acordado la concesi¨®n del tercer grado penitenciario o semilibertad a preso de ETA Ibon Fern¨¢ndez Iradi, alias Susper, exjefe de la banda armada al que se le intervino cuando fue detenido en 2002 abundante documentaci¨®n interna de la organizaci¨®n terrorista conocida como los papeles de Susper que propici¨® el arresto de cerca de 70 de sus miembros. Fern¨¢ndez Iradi, de 52 a?os y que sufre una grave enfermedad, es el segundo miembro de la extinta organizaci¨®n terrorista al que se le concede este beneficio penitenciario ¨Dque permite que solo tengan que ir a prisi¨®n a dormir de lunes a jueves en la mayor¨ªa de los casos¨D en abril, despu¨¦s de que tambi¨¦n accediera a ¨¦l Iratxe Y¨¢?ez Ortiz, detenida en 2010 cuando trataba de transportar, junto a otro etarra, una furgoneta cargada de armas y material para fabricar explosivos a la base que ETA hab¨ªa instalado en Portugal.
Con ambos, ya son 71 los integrantes de la extinta organizaci¨®n terrorista que acceden al r¨¦gimen abierto ¨Da tres de ellos se le ha concedido en dos ocasiones tras anular Audiencia Nacional la primera¨D desde que las autoridades de Vitoria asumieron la gesti¨®n de las tres c¨¢rceles de Euskadi el 1 de octubre de 2021, seg¨²n datos del Departamento de Justicia vasco. De ellas, cerca de la mitad de estas semilibertades ha sido recurrida por la Fiscal¨ªa, lo que ha provocado que, al menos, 16 etarras la hayan visto revocada por el Juzgado de Vigilancia penitenciaria, seg¨²n datos de Sare, plataforma ciudadana de apoyo a los presos vascos. En la mayor¨ªa de los casos, la Audiencia Nacional ha esgrimido como principal motivo para ordenar el reingreso en prisi¨®n de los etarras la supuesta falta de un arrepentimiento ¡°sincero¡± recogido en sus escritos de petici¨®n de perd¨®n.
La Polic¨ªa adjudica a Susper un largo historial de atentados, entre ellos varios asesinatos, durante su integraci¨®n en el comando Buruntza de ETA entre el a?o 2000 y agosto de 2001. Entonces dio el salto a la c¨²pula de ETA para suplir en la jefatura de los comandos a Juan Antonio Olarra Guridi y Ainhoa Mujika Go?i, que hab¨ªan sido detenidos unos meses antes. A?o y medio despu¨¦s, en diciembre de 2002, era detenido en el Sur de Francia, en un arresto que acab¨® en pol¨¦mica porque tres d¨ªas despu¨¦s se fug¨® de la comisar¨ªa de Bayona donde hab¨ªa sido recluido a trav¨¦s de un respiradero de la celda.
Su huida no evit¨® que las fuerzas de seguridad se hicieran con varias cajas de documentos que hab¨ªan pertenecido a anteriores jefes etarras y que ¨¦l custodiaba en un piso en la localidad francesa de Tarbes. Entre los papeles se encontraban datos sobre decenas de personas a los que la organizaci¨®n hab¨ªa contactado. La polic¨ªa espa?ola logr¨® descifrar los nombres que aparec¨ªan en aquellos documentos pese a que Susper cre¨ªa que era imposible. ¡°Tranquilos, todo est¨¢ en clave¡±, comunic¨® entonces por carta a dirigentes etarras encarcelados. Ello permiti¨® la detenci¨®n de 70 supuestos nuevos reclutas de la banda. Un a?o despu¨¦s, en diciembre de 2003, Fern¨¢ndez Iradi volv¨ªa ser detenido. Desde entonces estaba preso en Francia, donde se le impusieron tres condenas ¨Ddos de 30 a?os de reclusi¨®n y otra de 15¨D, hasta que fue trasladado a la prisi¨®n donostiarra de Martutene en octubre de 2022. Durante su estancia en las c¨¢rceles gala hab¨ªa solicitado su excarcelaci¨®n a causa de la esclerosis m¨²ltiple que sufre desde 2011, pero la justicia francesa se la deneg¨® al considerar que pod¨ªa ser tratado de esta dolencia en prisi¨®n.
A?o y medio despu¨¦s de su llegada a Espa?a, ha logrado la semilibertad ¨Dpaso previo e imprescindible para que pueda solicitar la liberta condicional¨D por motivos de salud y dentro de la pol¨ªtica penitenciaria puesta en marcha por el Gobierno vasco que busca precisamente la concesi¨®n del tercer grado para que, al menos, el 40% de los reclusos (el 50% en el caso de las mujeres) cumplan sus penas en r¨¦gimen abierto. En marzo, ¨²ltima estad¨ªstica disponible, hab¨ªa 467 reclusos en r¨¦gimen abierto de los 1.383 internos en las c¨¢rceles vascas, lo que representa cerca del 34%, un porcentaje superior al de las c¨¢rceles dependientes del Ministerio del Interior (el 17,7%) o de la Generalitat (23,2%). Algunas asociaciones de v¨ªctimas del terrorismo recelan de que esta medida se aplique a los presos etarras y el PP y Vox llevan tiempo acusando al Gobierno vasco de plantear con ello un modelo penitenciario ¡°a la medida de ETA¡±. El ejecutivo de Vitoria siempre lo ha negado.
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