Feij¨®o da por salvado el plebiscito, pero no logra neutralizar a la ultraderecha
El l¨ªder del PP proclama el cambio de ciclo: ¡°Tras la victoria de las europeas vendr¨¢ la de las generales¡±
A Alberto N¨²?ez Feij¨®o se le sigue resistiendo Pedro S¨¢nchez. El l¨ªder del PP ha vuelto a ganar unas elecciones, pero no consigue dar un KO al presidente socialista, que aguanta en las europeas en el 30% de los votos, mientras el PP escala al 34%. Aunque la distancia en votos llegue a los cuatro puntos y 692.000 papeletas, la fotograf¨ªa de los populares superando en solo dos esca?os al PSOE (22-20), en t¨¦rminos del plebiscito que plante¨® el PP, no resulta lo suficientemente rotunda. Pese a ello, la direcci¨®n popular dio por salvado el plebiscito con el argumento de que esta f¨®rmula ¡°son elecciones de s¨ª o no¡± y el 9-J ¡°ha habido un s¨ª al PP y un no a Pedro S¨¢nchez y a su forma de hacer pol¨ªtica¡±, proclam¨® la secretaria general, Cuca Gamarra, nada m¨¢s conocerse los resultados. G¨¦nova se agarr¨® a la mejora de la distancia del PSOE respecto a las generales (de 1,4 puntos a cuatro) y minimiz¨® la importancia de no haber neutralizado a Vox, que crece (de 4 a 6 esca?os), y de que la derecha vuelva a fragmentarse con un nuevo partido ultra, el de Alvise P¨¦rez, que irrumpe con tres eurodiputados.
La direcci¨®n del PP se felicit¨® porque Feij¨®o ha ganado sus terceras elecciones nacionales (tras las generales de julio y las municipales y auton¨®micas del a?o pasado), mientras S¨¢nchez ¡°obtiene su peor resultado en europeas¡±, incidi¨® Gamara, que compareci¨® desafiante en la sede del PP al filo de la medianoche. ¡°S¨¢nchez dijo que quer¨ªa ¡®darse el gustazo de ganar a Feij¨®o¡±, record¨® la n¨²mero dos de Feij¨®o. ¡°Pues bien, querido Pedro¡±, dijo Gamarra mirando a c¨¢mara, ¡°el gusto es nuestro y nos lo hemos dado nosotros en el d¨ªa de hoy¡±. Tras ella, el l¨ªder popular compareci¨® en el hall de la sede del partido rodeado de dirigentes y militantes que le jaleaban al grito de ¡°oaoaoa, Feij¨®o a La Moncloa¡± y proclam¨® que el 9-J inaugura ¡°un nuevo ciclo pol¨ªtico¡±. ¡°Siempre que el PP ha ganado unas europeas, gan¨® las siguientes generales, ?Siempre!¡±, enfatiz¨® el l¨ªder. ¡°?Vamos a gobernar despu¨¦s de las siguientes generales! ?Son los mejores resultados en 25 a?os, desde 1999!¡±, exclam¨® entre aplausos. A pesar de la euforia en el PP, Feij¨®o evit¨® reclamar a S¨¢nchez un adelanto electoral, que s¨ª hab¨ªa pedido durante la campa?a.
El PP crece en nueve esca?os respecto a las ¨²ltimas europeas de 2019, en las que los populares hab¨ªan ca¨ªdo a su suelo, con Pablo Casado, que ven¨ªa a su vez del batacazo en las generales de abril de ese a?o (con solo 66 diputados). Feij¨®o logra as¨ª reafirmar su liderazgo en el PP, aunque est¨¢ lejos todav¨ªa de arrasar a S¨¢nchez. Hace cinco a?os, los socialistas sacaron doce puntos al PP; hoy el PP supera en cuatro al PSOE.
El PP tampoco logra neutralizar a Vox, aunque a los populares asumen que su principal rival en la derecha ha venido para quedarse y ya cuentan con la extrema derecha como parte del ¡°bloque del centro derecha¡±, seg¨²n un comunicado difundido por el partido para valorar los resultados. ¡°Nunca en la historia el centro derecha hab¨ªa tenido un porcentaje de voto tan alto. PP+Vox=43,8¡å, dec¨ªa el texto. Feij¨®o tendr¨¢ que lidiar ahora, adem¨¢s, con un nuevo competidor en la galaxia de la ultraderecha, Alvise P¨¦rez.
La realidad, pese al triunfalismo en G¨¦nova, es que la c¨²pula tuvo que hacer esfuerzos para vender su ¨¦xito porque no aniquila al PSOE. Antes de conocerse los resultados, el PP ya trataba de ponerse la venda antes de la herida. El plebiscito, defend¨ªa en torno a las nueve de la noche en la sede del partido un portavoz de la direcci¨®n, ¡°es ganar en votos y esca?os¡±, sin que importe la distancia con el PSOE. En el gabinete de Alberto N¨²?ez Feij¨®o trataban de diluir la importancia de la escasa diferencia con los socialistas, con argumentos como que ¡°el Brexit se gan¨® por un punto¡±. Pero G¨¦nova es consciente de que, en estas condiciones, vender el fin de S¨¢nchez se antoja complicado, y que la lectura interna en el PP es otra. ¡°Cuatro puntos es mucho y dos esca?os es poco¡±, analizaba un veterano sobre el resultado del PP. ¡°Sigue la agon¨ªa para los dos: S¨¢nchez, en su bloqueo, y Feij¨®o, a esperar¡±, apostillaba. ¡°Hay que ir poco a poco, y milagros, a Lourdes¡±. En el partido conviv¨ªan la euforia y el realismo de que todav¨ªa no est¨¢ hecho. ¡°Son otras elecciones ganadas, eso es bueno¡±, opinaba otro dirigente veterano, ¡°ahora falta ganar y gobernar, solo tenemos el 50%¡±.
Fue el PP quien construy¨® su propia trampa definiendo las europeas como un plebiscito sobre S¨¢nchez y una segunda vuelta de las generales. ¡°Es ahora o nunca, si hay que enviarle un mensaje a Pedro S¨¢nchez es ahora¡±, dijo el director de la campa?a, Esteban Gonz¨¢lez Pons, en la presentaci¨®n del lema popular para el 9-J, ¡°Tu voto es la respuesta¡±, que jugaba con la idea de que los espa?oles respondieran a la carta de Pedro S¨¢nchez en su periodo de reflexi¨®n sobre si continuaba o no en el cargo. En el acto m¨¢s importante de su campa?a, la manifestaci¨®n en Madrid contra la amnist¨ªa el 26 de mayo, Feij¨®o lleg¨® a pedir elecciones a S¨¢nchez, sin esperar al resultado de las urnas, con el argumento de que ¡°la legislatura est¨¢ perdida¡±. En ese mismo mitin, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, proclam¨® que el 9-J era un ¡°plebiscito entre S¨¢nchez y Espa?a¡±. Los populares fueron diluyendo este tipo de mensajes seg¨²n avanzaba la campa?a, conscientes de que poco a poco ese objetivo se complicaba.
El resultado demuestra que el PP dilapid¨® en la campa?a la ventaja que le daban las encuestas antes de salir al ruedo electoral. El pasado marzo, la encuestadora GAD3 lleg¨® a dar once puntos de diferencia al PP sobre el PSOE en las europeas. En abril, SigmaDos les otorgaba casi siete puntos de ventaja. Nada que ver con los cuatro puntos de este 9-J. ¡°No nos responsabilizamos de encuestas mal hechas¡±, alegaron en el equipo del l¨ªder del PP, donde poco importaban los matices cuando hab¨ªan salvado los muebles con una nueva victoria.
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