Las entradas irregulares de migrantes crecen un 66%: las salidas desde Mauritania se disparan y Marruecos refuerza el control

Hace poco m¨¢s de un a?o, en mitad del verano, Espa?a era el ¨²nico pa¨ªs mediterr¨¢neo que lograba contener la inmigraci¨®n irregular. Un hito tan ef¨ªmero que se pulveriz¨® un par de meses despu¨¦s con un espectacular repunte de la ruta canaria que se mantiene hasta hoy. Ese escenario se ha dado la vuelta: ahora Espa?a, es junto con Grecia, el ¨²nico pa¨ªs mediterr¨¢neo donde crecen las entradas irregulares, seg¨²n las cifras de la Organizaci¨®n Internacional para las Migraciones (OIM). A 15 de agosto, el Ministerio del Interior ha registrado la llegada, por tierra y por mar, de 31.155 personas, un 66% m¨¢s que en el mismo periodo de 2023, aunque las cifras revelan un frenazo respecto a principios de este a?o. Marruecos controla cada vez m¨¢s las salidas, mientras el desaf¨ªo est¨¢ ahora m¨¢s al Sur, en Mauritania. Y el escenario no va a mejorar por el avispero del Sahel, con un pu?ado de pa¨ªses en serias dificultades. ¡°La presi¨®n est¨¢ ah¨ª y seguir¨¢ aumentando porque contin¨²an desplaz¨¢ndose riadas de refugiados de todo el Sahel y la zona subsahariana a las costas africanas con la intenci¨®n de emigrar¡±, mantienen fuentes del Ministerio del Interior.

En el a?o del Pacto Migratorio europeo, y en el que se han visto dificultades para que las autonom¨ªas se solidaricen en la acogida de menores, la inmigraci¨®n ¡ªcon especial ¨¦nfasis en la irregular¡ª tiene cada vez m¨¢s peso en la pol¨ªtica. Ha sido uno de los asuntos capitales en las ¨²ltimas convocatorias electorales, como las francesas o las europeas. E incluso gana protagonismo en la pol¨ªtica espa?ola, con una inflexi¨®n en el discurso del PP y el habitual argumentario de Vox, Alvise P¨¦rez o Alian?a Catalana en escalada.

El fuerte repunte en las entradas se explica por la ruta canaria, la v¨ªa por la que se juegan la vida el 70% de los migrantes que entran de forma irregular a Espa?a, y cuyos n¨²meros (22.304 entradas) se han m¨¢s que duplicado respecto al a?o pasado. Pero las cifras de aumento ¡ªaunque pueda parecer contradictorio¡ª camuflan un frenazo respecto a comienzos de este a?o. Un dato para ilustrarlo: las llegadas a las islas han pasado de 7.000 en enero y m¨¢s de 4.000 en febrero a poco m¨¢s de 2.000 en julio. Y otro m¨¢s: el 66% de incremento en las llegadas totales a Espa?a es elevado, pero queda muy lejos del 524% con el que se cerr¨® el mes de enero. Desde entonces, el porcentaje ha ido en descenso. ¡°El aumento registrado a principios de 2024 en las islas todav¨ªa repercute estad¨ªsticamente en las cifras, a pesar de que los desembarcos se han estabilizado m¨¢s o menos en los niveles del a?o pasado en el mismo periodo¡±, ilustra Flavio Di Giacomo, portavoz de la OIM.

La clave estar¨¢ en los cuatro meses finales del a?o, cuando predominan las calmas en el Atl¨¢ntico, mejora la navegabilidad y es probable que se multipliquen los cayucos que se lanzan al mar. El volumen es imprevisible: lo ¨²nico seguro es que supondr¨¢, sin duda, un empeoramiento de la situaci¨®n en la que viven casi 6.000 menores acogidos en Canarias para la que todav¨ªa no hay soluci¨®n. Esto, sin embargo, no significa que se cumplan las previsiones que algunos pol¨ªticos han aireado en las ¨²ltimas semanas como oficiales y que aseguran que podr¨ªan entrar al archipi¨¦lago m¨¢s de 70.000 personas. ¡°Ese dato no tiene ninguna base, no es posible calcularlo¡±, aclaran diversas fuentes del Ministerio del Interior.

Lo que s¨ª aparece en los informes confidenciales de las fuerzas de seguridad es la situaci¨®n cr¨ªtica que atraviesa Mauritania, adonde volver¨¢ el presidente S¨¢nchez a finales de mes para reforzar la colaboraci¨®n con el pa¨ªs africano. La gira incluir¨¢ tambi¨¦n Gambia y Senegal, punto de partida de rutas migratorias a¨²n activas pero m¨¢s controladas que a finales del a?o pasado. Las llegadas desde las costas mauritanas de m¨¢s de 13.000 personas supon¨ªan al cierre del primer semestre un crecimiento del 6.000%, seg¨²n fuentes dedicadas al control de fronteras. Ese fort¨ªsimo incremento esconde tambi¨¦n cierto descenso en los desembarcos en los ¨²ltimos meses, despu¨¦s de haberse disparado en enero y febrero. Las llegadas, aunque constantes, fueron reduci¨¦ndose tras la visita a Nuakchot en febrero de S¨¢nchez y la presidenta de la Comisi¨®n Europea, Ursula von der Leyen, en la que prometieron ayuda financiera por 500 millones de euros.

De cualquier forma, la situaci¨®n en el pa¨ªs, que vive su propia crisis de refugiados, preocupa porque no hay visos de que mejore. ¡°La presi¨®n de candidatos a la emigraci¨®n de origen maliense en Mauritana es enorme y la situaci¨®n en Mal¨ª solo empeora. Por otro lado, el ¨¦xito de los que alcanzan las islas Canarias [a pesar de los cientos de naufragios] ha atra¨ªdo a m¨¢s gente de otras nacionalidades para intentar llegar. Se habla de bolsas de candidatos a la emigraci¨®n de entre 100.000 y 500.000 personas¡±, explica una fuente dedicada al control de fronteras. El pa¨ªs est¨¢ desbordado y quiere m¨¢s ayuda. ¡°Mauritania tiene inter¨¦s en contener la inmigraci¨®n. No solo por el dinero que venga de la UE, sino tambi¨¦n porque para ellos es una cuesti¨®n de seguridad, pero la situaci¨®n es cada vez m¨¢s complicada¡±, a?ade esta fuente.

El perfil de quienes parten de Mauritania plantea nuevos desaf¨ªos. Hay un detalle que ha llamado la atenci¨®n de las fuerzas de seguridad y es que est¨¢n emigrando los propios mauritanos. ¡°Estas llegadas nos indican un aumento del descontento de la poblaci¨®n local, porque hasta ahora no hab¨ªa un n¨²mero relevante de mauritanos que quisiese emigrar en cayuco¡±, explica esta fuente. Pero el dato m¨¢s llamativo en la coyuntura actual es que, por primera vez, los malienses son la nacionalidad m¨¢s numerosa de los que arriban a Espa?a de forma irregular. Entre los m¨¢s de 9.000 malienses registrados, seg¨²n datos policiales, los hay incluso que han desembarcado en las islas Baleares a trav¨¦s de la ruta argelina.

La llegada de malienses dibuja un nuevo escenario que exige a las autoridades espa?olas otros enfoques. Espa?a, a diferencia de Italia y Grecia, ha podido presentar todos estos a?os su inmigraci¨®n irregular como eminentemente econ¨®mica y prestar menos atenci¨®n a sus compromisos internacionales con el asilo. Aunque los nacionales de Mal¨ª tambi¨¦n migran por razones econ¨®micas, son uno de los perfiles m¨¢s claros de posibles refugiados porque proceden de un pa¨ªs en el que los conflictos y el terrorismo se extienden cada vez por m¨¢s zonas desde 2012. Que los principales desembarcados tengan un perfil de refugiado deber¨ªa obligar a las autoridades a garantizar que tienen acceso a pedir protecci¨®n internacional, y que su solicitud sea registrada como dispone la Convenci¨®n de Ginebra de 1951 y la legislaci¨®n comunitaria, incluido lo acordado en el Pacto Europeo de Migraci¨®n y Asilo que contempla que pueda pedirse asilo en el propio puerto.

Control marroqu¨ª, despunte argelino

Mientras el panorma en la vertiente atl¨¢ntica es incierto, Marruecos mantiene un f¨¦rreo control de sus costas del norte y del sur as¨ª como de las del S¨¢hara Occidental. El despliegue se ha traducido en un descenso de alrededor de un 30% de las entradas desde esas zonas al cierre del primer semestre, seg¨²n fuentes policiales. Pero m¨¢s all¨¢ de los n¨²meros, que el Ministerio del Interior sigue sin hacer p¨²blicos en detalle, se han registrado algunos episodios que revelan que la presi¨®n de Rabat est¨¢ desplazando a los emigrantes hacia el sur de la regi¨®n. Un ejemplo de ello es que han aparecido en Canarias refugiados sirios y pakistan¨ªes que habr¨ªan partido desde Mauritania y Senegal, un perfil que raramente usa esa ruta y que tradicionalmente emigra desde las costas marroqu¨ªes o argelinas.

La aparici¨®n de sirios, pakistan¨ªes o banglades¨ªes en los cayucos revela otra tendencia que preocupa a las fuerzas de seguridad. ¡°Cada vez que aparece un asi¨¢tico en una ruta que no es la habitual, es una se?al de que las redes de tr¨¢fico de personas se est¨¢n profesionalizando y conectando con otras¡±, explica una fuente de las fuerzas de seguridad.

Ruben Andersson, experto en migraciones y catedr¨¢tico de antropolog¨ªa en la Universidad de Oxford, tambi¨¦n vincula parte del auge de la ruta canaria con la mano dura en el norte de Marruecos. ¡°La represi¨®n en una parte de la frontera conlleva ese desplazamiento a otro lugar. A corto plazo, los Gobiernos apuestan por ese control para poder tapar el problema, pero a medio y largo plazo, la represi¨®n no resuelve¡±, defiende el experto.

El frente abierto en Marruecos es Ceuta, donde las entradas por v¨ªa terrestre (que incluyen a los que llegan a nado) han crecido un 173% y suman ya 1.605 personas. Tambi¨¦n sigue sin atajarse el negocio de las narcolanchas cargadas de inmigrantes, un fen¨®meno ¡°que se est¨¢ consolidando y ha venido para quedarse¡±, como lamentan fuentes policiales. ¡°La irrupci¨®n de las narcolanchas [con cerca de 200 embarcaciones contabilizadas] fue muy llamativa porque significaba la apertura de una nueva rutas, aunque los n¨²meros no fueran tan grandes. La cuesti¨®n aqu¨ª es que con poca gente, a la que cobran 10.000 euros por el viaje, hacen mucho dinero y hay una cifra negra impresionante de embarcaciones que no se detectan¡±, a?ade esta fuente.

Por su parte, las llegadas desde Argelia han despuntado cerca de un 15% en el primer semestre, seg¨²n fuentes policiales, un repunte que se hace notar sobre todo en las islas Baleares. Argel, enfrentado a Rabat, mantiene suspendidas las devoluciones de sus nacionales desde marzo de 2022, cuando se abri¨® una crisis bilateral por el respaldo de Espa?a a la soluci¨®n marroqu¨ª para el futuro del S¨¢hara Occidental.

Andersson echa en falta un ¡°planteamiento m¨¢s estrat¨¦gico¡± que incentive v¨ªas legales y seguras para emigrar y que tenga en cuenta los desequilibrios demogr¨¢ficos y de oferta de mano de obra entre Europa y ?frica. Tambi¨¦n pide calma: ¡°Las cifras de entrada a Canarias y por las fronteras europeas son una gota en el oc¨¦ano en comparaci¨®n con las personas que emigran de forma legal¡±. En concreto, las 31.155 entradas irregulares en lo que va de a?o suponen apenas un 5,6% de los extranjeros que se instalaron en Espa?a entre abril de 2023 y abril de 2024 y un 0,06% del total de la poblaci¨®n.