Illa se centrar¨¢ en garantizar la solidaridad de Catalu?a con el resto de autonom¨ªas

Catalu?a, al menos desde su gobierno, har¨¢ todo lo posible para hacerse querer por los espa?oles del resto de Espa?a que piensen que, si esta comunidad alcanza un sistema de financiaci¨®n propio, ser¨¢ en detrimento del resto de autonom¨ªas. El presidente de la Generalitat, Salvador Illa, ayudar¨¢ al presidente del Gobierno central, Pedro S¨¢nchez, en su campa?a para convencer de que el eventual reconocimiento financiero de ¡°la singularidad para Catalu?a¡± ir¨¢ en paralelo a extraordinarios aportes a todas y cada una de las otras catorce comunidades aut¨®nomas de r¨¦gimen com¨²n. ¡°A solidaridad no nos va a ganar nadie¡±, asegur¨® este domingo el president en la Fiesta de la Rosa de su partido, el PSC, en la localidad barcelonesa de Gav¨¤.

Documentos, cifras, n¨²meros... Eso es lo que no hay de momento. En los preparativos de la conferencia de presidentes que se celebrar¨¢ en octubre en Cantabria, sin fecha fijada a¨²n, no hay duda de que se incluir¨¢ la financiaci¨®n auton¨®mica como exigen los presidentes del PP, y no ser¨¢ solo una conferencia monogr¨¢fica sobre vivienda como pretend¨ªa el Gobierno central.

No ser¨¢ f¨¢cil cumplir el acuerdo del PSC con ERC de que Catalu?a tenga su propio sistema de financiaci¨®n y que no se rebele el PP y el presidente castellanomanchego, el socialista Emiliano Garc¨ªa-Page. O que otros l¨ªderes territoriales socialistas no se inquieten extraordinariamente, como el presidente asturiano, Adri¨¢n Barb¨®n. Por ello, S¨¢nchez y su Ejecutivo, una coalici¨®n de socialistas y Sumar, no deber¨¢n estar solos en su dif¨ªcil campa?a de explicaci¨®n y convencimiento. Ah¨ª, el presidente Salvador Illa les ayudar¨¢ en la tarea.

El gobernante catal¨¢n ofrece d¨ªa a d¨ªa muestras del significado que quiere dar a su proclama de ¡°Catalu?a ha vuelto¡±¡­ a Espa?a. El pasado mi¨¦rcoles asisti¨® a la celebraci¨®n en Madrid de la Diada, d¨ªa nacional de Catalu?a, que sirvi¨® de puesta de largo a la nueva delegada de la Generalitat, Nuria Mar¨ªn, que sustituye al exdiputado de ERC, Joan Capdevila, presente en el acto para dar la bienvenida a su sucesora y saludar al president de la Generalitat. Capdevila, como antes Esther Capella, exparlamentaria y exconsellera del Govern de Pere Aragon¨¨s, han mantenido una relaci¨®n correcta con el Gobierno central. Pero la presencia de Illa en esta Diada en Madrid, con el PSC en el Govern, puso de manifiesto cambios sustanciales, no solo en las formas ¡ªcon la presencia de siete ministros del Ejecutivo central y una nutrida representaci¨®n del cuerpo diplom¨¢tico acreditado en Espa?a¡ª.

Desde la tribuna, el presidente catal¨¢n ¡ªquien fuera ministro de Sanidad de Pedro S¨¢nchez durante la pandemia del coronavirus¡ª anunci¨® su decisi¨®n de desplazarse por Espa?a para entrevistarse con los presidentes auton¨®micos ¡ªla mayor¨ªa del PP¡ª y ¡°comprometerse¡± e ¡°implicarse¡± con la gobernabilidad de Espa?a. ¡°Catalu?a ha vuelto para ayudar a mejorar Espa?a¡±. Esta declaraci¨®n de intenciones la reiter¨® este domingo en la Fiesta de la Rosa de los socialistas catalanes. Con el PSC, dijo, ¡°Catalu?a estar¨¢ en la primera l¨ªnea de la solidaridad¡±. De esto se trata. Si Catalu?a tiene su propia financiaci¨®n, su aportaci¨®n al fondo de solidaridad ya no la decidir¨¢ el Estado sino la propia Generalitat. Pero, seg¨²n insisten fuentes del Gobierno de S¨¢nchez, ninguna comunidad perder¨¢ sino que, gracias a los fondos europeos y a la importante recaudaci¨®n del Estado por la actividad econ¨®mica, habr¨¢ recursos para todas y en una proporci¨®n in¨¦dita hasta ahora. De todo ello se hablar¨¢ en la conferencia de presidentes en la que estar¨¢ Salvador Illa, al igual que todos los consejeros catalanes estar¨¢n presentes en todos los ¨®rganos de representaci¨®n auton¨®mica del Estado. No es as¨ª desde hace diez a?os.

Por su parte, el frente del PP por la negociaci¨®n especial con Catalu?a es muy potente, aunque cada comunidad apuesta por sus necesidades, y todas est¨¢n dispuestas a dialogar con Pedro S¨¢nchez, a excepci¨®n de Madrid.

El otro frente, no menos p¨¦treo, es el de Junts, sin restar importancia a lo que pueda ocurrir en ERC. Ninguna de las candidaturas para el liderazgo de Esquerra hacen bandera de acabar con el Gobierno que preside Pedro S¨¢nchez. Tampoco lo contrario. Pero a lo primero se aferran en el Ejecutivo central para darse un cierto margen de confianza hasta que los republicanos celebren su congreso el pr¨®ximo 30 de noviembre, en coincidencia con el de los socialistas.

Los an¨¢lisis gubernamentales sobre Junts per Catalunya son de distinta ¨ªndole. Carles Puigdemont no ha podido acogerse hasta ahora a la amnist¨ªa, ya que el Tribunal Supremo ha rechazado aplic¨¢rsela; y en Catalu?a gobierna el socialista Salvador Illa. Distintos interlocutores de partidos catalanes coinciden en que esas dos circunstancias desincentivan por completo a Puigdemont a autorizar que los siete diputados de Junts se sumen al bloque gubernamental, sin importar qu¨¦ se vota y a qu¨¦ sectores sociales se perjudica.

Pase lo que pase en Madrid, Illa ha emprendido lo que denomina ¡°la revoluci¨®n de la normalidad¡±. En ella entra su visita a la Zarzuela el mi¨¦rcoles como presidente de la Generalitat para mostrar su respeto al jefe del Estado, Felipe VI. Las generosas sonrisas de ambos quedaron grabadas.