G¨¦nova descarta dimisiones tras el error en la enmienda sobre los presos etarras pese a la crisis interna

Pese a la marejada interna y las peticiones de dimisiones que se escuchan dentro del PP despu¨¦s de que sus diputados votaran a favor de la reforma legal que permitir¨¢ excarcelar a varios presos etarras, la direcci¨®n del PP se reafirma en que no rodar¨¢n cabezas. G¨¦nova sostiene que forzar la dimisi¨®n de los tres diputados del PP ponentes de la ley que conten¨ªa la enmienda controvertida ser¨ªa lo m¨¢s sencillo, y que, por tanto, no se contempla. ¡°Lo f¨¢cil ser¨ªa ir contra el eslab¨®n m¨¢s d¨¦bil: los diputados que se equivocaron. No lo vamos a hacer¡±, insisten fuentes del equipo de Alberto N¨²?ez Feij¨®o, que tampoco prev¨¦n cambios en los procedimientos que sigue el grupo parlamentario en el proceso legislativo. El jefe de la oposici¨®n dedic¨® este mi¨¦rcoles casi toda su intervenci¨®n desde la tribuna a este asunto, en vez de hablar de la inmigraci¨®n, el objeto del debate, porque el partido sigue muy preocupado por las consecuencias de la pifia en su base social. ¡°Hay gente herida, nos preocupa fallarles. Si hay un tema en el que nos duele fallar, es en este¡±, resumen en el entorno de Feij¨®o.

El PP sigue en estado de shock por el ¡°error injustificable¡±, en palabras del l¨ªder del PP, de su partido al haber votado hace semanas a favor de una enmienda de Sumar por la que se homologan las condenas cumplidas por presos espa?oles en otros pa¨ªses europeos, lo que posibilitar¨¢ ahora ¡ªla reforma legal est¨¢ a punto de aprobarse definitivamente¡ª que algunos etarras que cumplieron a?os de prisi¨®n en Francia acorten sus penas al volver a Espa?a. Pero la c¨²pula del partido ha decidido no forzar la dimisi¨®n de los responsables directos del error, los tres diputados ponentes de la ley (Rafael Benigno Belmonte G¨®mez, Ana Bel¨¦n V¨¢zquez y Jos¨¦ Manuel Velasco Retamosa) y la portavoz del PP en la comisi¨®n de Justicia, Mar¨ªa Jes¨²s Moro. ¡°Son personas s¨®lidas, est¨¢n desolados, cometieron un error¡±, justifican en el gabinete del jefe de la oposici¨®n, aunque diputados del partido discrepan y reclaman dimisiones. De momento, la negativa en el equipo del l¨ªder del PP a forzar esos u otros ceses es tajante, pero seg¨²n fuentes conocedoras el l¨ªder popular est¨¢ recibiendo llamadas incluso de miembros relevantes de la sociedad civil aconsej¨¢ndole que mueva ficha con su equipo porque ha demostrado tener lagunas.

La portavoz del PP en la Comisi¨®n de Justicia, que es doctora en Derecho, est¨¢ especialmente ¡°devastada¡± por lo sucedido, seg¨²n distintas fuentes parlamentarias, mientras en el PP no terminan de explicar todav¨ªa el fallo en todos sus extremos. ¡°El error fue o que no lo vieron o que no valoraron las consecuencias que tendr¨ªa esa enmienda¡±, apuntan en G¨¦nova, donde explican que los propios diputados ponentes de la ley todav¨ªa dudaban el pasado viernes sobre si la reforma iba a suponer excarcelaciones de etarras, despu¨¦s de que la periodista de El Confidencial que levant¨® la liebre llamara al PP preguntando por ello.

Pese al error, la direcci¨®n del PP tambi¨¦n descarta de momento cambios en los procedimientos internos en el proceso legislativo. ¡°El procedimiento solo ha fallado una vez. No se va a cambiar¡±, apuntan en G¨¦nova, donde tambi¨¦n argumentan que nadie percibi¨® las consecuencias, ni otros grupos como Vox o UPN ni la Asociaci¨®n de V¨ªctimas del Terrorismo (AVT), que suele estar muy pendiente de estos asuntos.

Pero las consecuencias pol¨ªticas de este fiasco preocupan mucho en el PP, y por eso Feij¨®o, con semblante serio y tenso toda la jornada, dedic¨® gran parte de su intervenci¨®n de este mi¨¦rcoles en la tribuna a hablar de la reforma de los presos. El partido trat¨® de escenificar, adem¨¢s, su apoyo a las v¨ªctimas del terrorismo interrumpiendo el discurso de Pedro S¨¢nchez para recibir a la senadora del PP Marimar Blanco, v¨ªctima del terrorismo, con un aplauso de la bancada popular. ¡°Le pido que recapacite y retire la ley¡±, inst¨® Feij¨®o al presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, con Blanco sentada a su lado en el esca?o. ¡°Se quedan con el aplauso de Otegi, de Txapote y de los dem¨¢s. ?Qu¨¦denselo!¡±, exclam¨®. Tanto se dedic¨® a esta cuesti¨®n Feij¨®o que la presidenta del Congreso, la socialista Francina Armengol, le llam¨® al orden por no hablar de la inmigraci¨®n, objeto del debate pedido por el PP. ¡°?Tengo derecho a hablar de la dignidad de los espa?oles asesinados por ETA y lo voy a hacer!¡±, enfatiz¨® el l¨ªder del PP. En su r¨¦plica, S¨¢nchez fue al ataque contra el l¨ªder popular, hurgando en la herida. ¡°?Usted sabe lo que vota o no? ?Saben lo que votan o no? ?O despu¨¦s de ver las reacciones en los medios echan las culpas a otros de sus errores?¡±.

La estrategia del PP ¡ªa diferencia de Vox, que ha pasado hoy de puntillas¡ª es poner el foco en la reforma referida a los presos, pero culpando al Gobierno de promoverla. ¡°Aunque penalice a los dos, al Gobierno y a nosotros, no vamos a hurtar este debate. No hemos escapado a nuestra responsabilidad¡±, insisten en la c¨²pula popular, mientras la marejada interna contin¨²a. El alcalde de Madrid, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez Almeida, no se anduvo con pa?os calientes: ¡°Desde mi punto de vista, obviamente el error tiene unas consecuencias en t¨¦rminos pol¨ªticos para el Partido Popular, pero las peores consecuencias son para las v¨ªctimas del terrorismo¡±.