Puente se abre al rescate de la autopista m¨¢s cara de Espa?a y que m¨¢s une Galicia
El Gobierno pide discreci¨®n para buscar una soluci¨®n ante la demanda un¨¢nime ahora de la Xunta y de todos los partidos gallegos para acabar con la concesi¨®n por 75 a?os de la AP-9
La AP-9 no es solo una nuclear autopista. Es la vena que articula y vertebra Galicia, permite la movilidad diaria de la mayor¨ªa de sus ciudadanos, enlaza sus cinco grandes ciudades, sus tres aeropuertos y sus cinco puertos estatales, y es tambi¨¦n el comod¨ªn de un enorme malestar transversal de cualquier conversaci¨®n en ese territorio, mucho m¨¢s all¨¢ de lo ideol¨®gico o partidista. El Congreso de los Diputados ratific¨® este mi¨¦rcoles, con una gran mayor¨ªa, una moci¨®n del diputado del BNG para proceder al rescate de esa infraestructura de una empresa privada a manos p¨²blicas en l¨ªnea con lo que aprob¨® el Parlamento gallego por unanimidad el 25 de septiembre y con lo que llevan reclamando la mayor¨ªa de los partidos, menos Vox, hace ya muchos a?os. No todos ni desde siempre. El Gobierno no se niega, pero es prudente. Lo fue este mi¨¦rcoles el ministro, ?scar Puente, que solicit¨® discreci¨®n y se abri¨® a buscar soluciones. El debate sirvi¨® para corroborar, de nuevo, que la decisi¨®n es tan cara y compleja como para que PSOE y PP, en Galicia y en Madrid, hayan incumplido sus promesas, compromisos y calendarios para acabar con los peajes m¨¢s caros de Espa?a hace d¨¦cadas. En la misma sesi¨®n, el ministro fue reprobado a instancias del PP en una moci¨®n sobre ¡°las m¨²ltiples incidencias y problemas ocurridos durante los ¨²ltimos meses en la red ferroviaria espa?ola¡±.
Un Seat 1430 con matr¨ªcula de Pontevedra abri¨® hace 45 a?os el primer tramo de la AP-9 entre Santiago y A Coru?a y empez¨® a variar mucho m¨¢s que la configuraci¨®n arterial de una autonom¨ªa muy abandonada durante d¨¦cadas. La AP-9 discurre ahora por 220 kil¨®metros, conecta desde la comarca de Ferrol a la de Vigo todo el eje atl¨¢ntico de Galicia, da servicio diario a unos 61.500 usuarios y se ha transformado en la red indispensable para cualquier actividad. Pero adem¨¢s es cara y parec¨ªa no tener visos de que sus peajes, 7,95 euros para ir de Santiago a A Coru?a o 11,45 para enlazar la capital gallega con Vigo, las principales ciudades, se fueran a terminar nunca. Al contrario, las tarifas subieron en 2024 un 6,55%.
En el debate de este mi¨¦rcoles en el Congreso, repetici¨®n casi calcada de otros similares de los ¨²ltimos a?os, el ministro de Transportes, ?scar Puente, que apenas lleva un a?o en el cargo, hered¨® todos los recurrentes reproches que distintos portavoces, pero especialmente el diputado del BNG, N¨¦stor Rego, socio de investidura del Gobierno, llevan lanzando sobre la situaci¨®n de esa autopista hace lustros. El BNG incluy¨® ese punto del rescate de esa obra para la Comunidad Aut¨®noma en el listado de exigencias b¨¢sicas que firm¨® con el PSOE hace un a?o para la investidura del presidente Pedro S¨¢nchez. Puente, que se hab¨ªa estudiado el problema, lleg¨® con un argumentario inicial de que esta carencia no puede achacarse al actual Ejecutivo porque el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar autoriz¨® en 2000 la cuestionada incluso por la Uni¨®n Europea pr¨®rroga y privatizaci¨®n de esa costosa concesi¨®n de 2023 hasta 2048. Luego ahond¨® en la idea esgrimida por diferentes Gabinetes en La Moncloa, del PSOE y del PP, sobre que la v¨ªa forma parte de la Red de Carreteras del Estado de Inter¨¦s General, por sus particulares circunstancias estructurales, y, por tanto, coment¨® que su transferencia ahora a la Xunta de Galicia se le ¡°antoja tremendamente dif¨ªcil¡±.
Esa declaraci¨®n de partida de Puente pareci¨® otro muro infranqueable para los anhelos de todos los diputados de diferentes partidos que intervinieron en el debate, pero luego, al final, el ministro matiz¨® mucho esa oposici¨®n hasta permitir incluso una manifestaci¨®n de esperanza del diputado nacionalista N¨¦stor Rego. En el camino, el debate sirvi¨® para comprobar c¨®mo ha cambiado el PP, al menos aparentemente, de postura y de tono con respecto a esta exigencia un¨¢nime en Galicia.
El diputado popular por Ourense, Celso Delgado, conocedor de las maneras en muchas ocasiones controvertidas de Puente, intent¨® una exposici¨®n que llam¨® ¡°constructiva¡± para sacarle al ministro alg¨²n compromiso en favor del rescate y en l¨ªnea con las conclusiones de un reciente estudio encargado por la Xunta del popular Alfonso Rueda a por profesores de la Universidad de A Coru?a que fija en 904,7 millones de euros el coste de esta operaci¨®n¡±. Al final esa moci¨®n del BNG se vot¨® separada por puntos y se aprobaron los tres, pero esa derrota parlamentaria no quiere decir que el Gobierno obligatoriamente la vaya a ejecutar. El diputado popular, eso s¨ª, reconoci¨® de manera sutil errores propios de su formaci¨®n, el PP, y de la Xunta y los Gobiernos de Aznar y de Mariano Rajoy, al no reclamar hace tiempo el traspaso de esa autov¨ªa, aunque aprovech¨® para espetarle al ministro actual que antecesores suyos del PSOE, como Josep Borrell, hab¨ªan firmado pr¨®rrogas de esa estrat¨¦gica concesi¨®n con Felipe Gonz¨¢lez en La Moncloa en 1994. Tambi¨¦n funcion¨® el ¡°y t¨² m¨¢s¡± en esta discusi¨®n, que por momentos pareci¨® complicarse en el clima de acusaciones cruzadas por casos de corrupci¨®n.
Celso Delgado, expresidente de la comisi¨®n de Fomento del Congreso en aquellos gobiernos del PP, intent¨® zafarse de la hemeroteca que perseguir¨¢ a los populares ante la dejaci¨®n con esa obra, privatizada por Aznar y ahora en manos de la firma It¨ªnere, que la adquiri¨® en 2003 por 1.622 millones, al comentar que cuando su partido y sus expresidentes se opusieron en el pasado a esa transferencia se debe considerar que ¡°esa p¨¢gina qued¨® muy atr¨¢s¡± y que son ahora el vigente Gobierno central y la Mesa del Congreso los que han paralizado o bloqueado la tramitaci¨®n de esta demanda casi general en Galicia. La expresidenta popular de las Cortes, Ana Pastor, exministra de Fomento, tambi¨¦n bloque¨® varias veces esos tr¨¢mites parlamentarios aunque en su momento critic¨® la pr¨®rroga.
La portavoz de Vox le refresc¨® inmediatamente a Delgado y el PP sus responsabilidades muy espec¨ªficas en este caso, pero se opuso al traspaso porque la formaci¨®n ultra no est¨¢ por descentralizar nada y menos las carreteras. Manuel Lago, de Sumar, enmarc¨® su posici¨®n sobre la recuperaci¨®n general de la gratuidad en las autopistas como parte de su modelo de transporte y hasta ofreci¨® algunos datos sobre el coste en bonificaciones y ayudas que ahora facilita el Gobierno (que con las ¨²ltimas novedades e incrementos ya suponen 3.500 millones de euros al a?o) para argumentar que el precio del rescate (entre 900 o 1.500 millones) ser¨ªa incluso beneficioso al final para las arcas p¨²blicas.
El ministro acab¨® presumiendo sobre todos esos bonos y rebajas que ya se est¨¢n implementando y pidi¨®, con inusual prudencia, discreci¨®n sobre la discusi¨®n de los costes de un posible rescate para apuntar sobre esa especulaci¨®n abierta de cifras: ¡°No s¨¦ si es lo mejor para un futuro buen puerto por si genera m¨¢s dificultades a la hora de recuperar la concesi¨®n¡±. Puente a?adi¨® para concitar algo consenso en ese punto: ¡°No digo que no sea posible rescatarla, digo que es dif¨ªcil y costoso, pero el futuro no est¨¢ escrito¡±. Y ante la posibilidad de que en alg¨²n momento hasta la Comisi¨®n Europea formalice su rechazo a c¨®mo se formul¨® en 2000 la pr¨®rroga de la AP-9 por el Gobierno Aznar, porque sospecha que se adopt¨® para revalorizar la v¨ªa antes de su privatizaci¨®n, el dirigente socialista agreg¨®: ¡°No sabemos en qu¨¦ situaci¨®n nos vamos a ver ni qu¨¦ tendremos que hacer y evidentemente si se produce o no ese rescate la dificultad estar¨¢ en fijar el precio¡±.
La sesi¨®n no acab¨® ni ah¨ª ni con ese esperanzador clima. El PP insisti¨® a continuaci¨®n en una moci¨®n sobre ¡°las m¨²ltiples incidencias y problemas ocurridos durante los ¨²ltimos meses en la red ferroviaria espa?ola¡±. Fue aprobada por 186 votos a favor, 156 en contra y 3 abstenciones y los populares se marcharon a casa tras otra semana complicada con el logro en su zurr¨®n de haber reprobado de nuevo, con el apoyo de dos partidos nacionalistas catalanes y de Podemos, al que la diputada Cristina Teniente calific¨® como el ¡°killer sin escr¨²pulos del n¨²mero 1¡± en alusi¨®n a Pedro S¨¢nchez.
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