Maura, la ni?a asturiana fusilada dos veces

Luz, Mercedes y Maura Ferrer ten¨ªan 21, 20 y 17 a?os, respectivamente, en agosto de 1936, cuando las tropas franquistas entraron en Luarca (Concejo de Vald¨¦s, Asturias). Trabajaban en una imprenta en la capital valdesana y estaban implicadas pol¨ªticamente con el Frente Popular, al igual que su padre, Manuel Ferrer D¨ªaz, un tip¨®grafo que presid¨ªa el Sindicato de Artes Gr¨¢ficas de Luarca. ?l pudo escapar, pero los falangistas fueron a por sus hijas. Y las localizaron. ¡°Seg¨²n se sigue recordando en la villa, las raparon y les dieron aceite de ricino. As¨ª las pasearon por Luarca¡±, recoge el investigador Xos¨¦ Miguel Su¨¢rez en el libro Como augua de torb¨®n.

El procedimiento era el siguiente: a las mujeres del bando republicano a las que se quer¨ªa represaliar, a las rojas o ¡°familiares de rojo¡± condenadas o bien por su participaci¨®n directa en la contienda o simplemente por defender la democracia o ser ¡°mujeres e hijas de¡± quienes lo hac¨ªan se las rapaba el pelo al cero. A algunas se les dejaba un mechoncito y se les pon¨ªa un lazo con los colores del bando nacional. Y se las paseaba para mostrarle al pueblo que la mujer que propon¨ªa la Rep¨²blica era un engendro, algunas veces tras tomar aceite de ricino, de efecto laxante, otras acompa?adas de una banda de m¨²sica. Seg¨²n se recoge en el libro de Su¨¢rez, de acuerdo con los relatos recabados, las tres j¨®venes fueron violadas y sus cuerpos quedaron tirados en un paraje de Valdepares donde fueron fusiladas ¡°por rojas¡±.

Si este horror no fuera suficiente, la peque?a de las hermanas Ferrer, Maura, no muri¨® en el primer ajusticiamiento. ¡°Cuando las fusilaron, Maura segu¨ªa viva, pero se hizo la muerta para evitar que le volvieran a disparar. Esper¨® a que se fueran y cuando vio que ya no estaban, huy¨® corriendo a pedir ayuda a una vivienda cercana¡±, seg¨²n el relato del teniente de alcalde de El Franco, Santiago L¨®pez, presente en la fosa del cementerio de La Caridad donde durante las ¨²ltimas semanas se han desarrollado los trabajos de exhumaci¨®n de las tres j¨®venes. ¡°Maura tuvo muy mala suerte porque se hubiese podido salvar, pero en la casa donde pidi¨® ayuda tuvieron miedo de protegerla y la delataron¡±. Vinieron a por ella de nuevo y esta vez s¨ª la mataron.

Esta tr¨¢gica y terrible historia se esconde bajo tierra en una fosa com¨²n de un cementerio que la direcci¨®n de Memoria del Gobierno del Principado de Asturias ha elegido para iniciar una campa?a de exhumaciones que continuar¨¢n en la fosa del Mol¨ªn de Xilu, en el concejo de Las Regueras y en el cementerio de Santiago de Molenes, en Grado.

Los trabajos han ido m¨¢s lentos de lo previsto porque la fosa no estaba donde inicialmente se cre¨ªa. En la primera jornada de trabajo se hallaron restos de enterramientos infantiles, si bien los expertos que est¨¢n al frente de la exhumaci¨®n dejaron claro que su fecha era previa a la Guerra Civil. No fue hasta ¨²ltima hora del jueves cuando se hall¨® el primer resto adulto, un antebrazo que devolvi¨® la esperanza al equipo investigador. Desde entonces y hasta el mi¨¦rcoles pasado cuando finaliz¨® la exhumaci¨®n, se encontraron restos de seis posibles cad¨¢veres entre los que podr¨ªan estar las tres hermanas Ferrer o al menos dos de ellas, ya que el doble fusilamiento de Maura no asegura que los ejecutores dejaran el cuerpo en la misma fosa que la de sus hermanas. A la espera de las pruebas de ADN, s¨ª se sabe que hay restos de mujeres, ya que se localizaron unos zapatos de mujer azules y una cartera.

Junto a las hermanas Ferrer, los otros restos encontrados en la exhumaci¨®n de la fosa com¨²n del cementerio de La Caridad podr¨ªan corresponder a Francisco P¨¦rez Pena, el nombre que figura en la ¨²nica l¨¢pida colocada sobre la fosa com¨²n por sus familiares y que tambi¨¦n fue apresado y ejecutado en agosto de 1936. P¨¦rez Pena, natural de Villalba (Lugo), era un tratante de ganado vecino de Otur (Vald¨¦s) que recorr¨ªa los pueblos de la zona y cuya muerte nadie se explica, ya que no ten¨ªa vinculaci¨®n pol¨ªtica alguna. ¡°Lo metieron en la c¨¢rcel de Luarca y luego lo sacaron con las tres chicas y otro se?or. Toda la vida escuch¨¦ que estaban las tres ni?as, ¨¦l y otro hombre¡±, relataron familiares del ajusticiado.

El segundo hombre al que algunos sit¨²an en la comitiva mortal que sali¨® de la c¨¢rcel de Luarca con destino a El Franco aquella noche de finales de agosto podr¨ªa ser Ram¨®n Cuesta, un taxista natural de Almu?a (Vald¨¦s) al que su familia tambi¨¦n localiza enterrado en el cementerio franquino. Al menos, esa es la hip¨®tesis de Xos¨¦ Miguel Su¨¢rez. No obstante, el equipo que est¨¢ excavando la fosa no ten¨ªan constancia de este otro caso.

¡°Que fueron asesinadas con una crueldad tremenda es lo que vemos aqu¨ª. Los indicios apuntan a que los restos corresponden seguro a alguna mujer y a alg¨²n hombre. Una mujer de unos 20 a?os con mucho gusto, ya que el zapato aparecido es una pieza de lujo que vino de Nueva York¡±, analiza el catedr¨¢tico de antropolog¨ªa de la Universidad de Oviedo, Avelino Rodr¨ªguez, coordinador de las excavaciones. La fosa com¨²n del cementerio de La Caridad espera ahora los resultados de las pruebas de ADN. Maura muri¨® dos veces. Sus hermanas, Luz y Mercedes, una. Ahora habr¨¢ que comprobar si se ha encontrado el lugar d¨®nde fueron sepultadas.