La costa catalana se blinda ante los vecinos de segundas residencias

Los municipios m¨¢s tur¨ªsticos del litoral catal¨¢n se han blindado esta Semana Santa por tierra y aire ante la previsible visita de vecinos de segundas residencias que rompan el confinamiento impuesto por el Estado de alarma. La inmensa mayor¨ªa de localidades han establecido controles policiales en todos los accesos, han colocado bloques de hormig¨®n para cerrar el paso a los veh¨ªculos y dejar solo una entrada al pueblo o han habilitado drones para perseguir a los que han salido estos d¨ªas y sancionarlos. Algunos alcaldes han reclamado expresamente a los ciudadanos empadronados que denuncien ante la polic¨ªa local la presencia de los vecinos de segunda residencia.

En el dispositivo de la llamada ¡°operaci¨®n no salida¡±, en palabras del consejero de Interior, Miquel Buch, participan desde este jueves 500 agentes de los Mossos d¡¯Esquadra en colaboraci¨®n con las polic¨ªas locales. El propio presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha pedido a los alcaldes que ¡°blinden sus municipios¡± y les ha sugerido que, si no tienen suficientes efectivos de la polic¨ªa municipal, env¨ªen a empleados de mantenimiento. ¡°No podemos poner un mosso detr¨¢s de cada persona¡±, ha dicho el president en una entrevista en RAC1.

Cambrils, Calafell o L¡¯Hospitalet de l¡¯Infant, en la Costa Dorada de Tarragona, han cortado carreteras y accesos a las poblaciones para intentar frenar la presencia en las segundas residencias. Otros, como Mont-roig del Camp, Palafrugell o L¡¯Ametlla de Mar incluso se ayudan de drones para hacer vigilancias a¨¦reas. Lo mismo ocurre en Badalona, con cuatro kil¨®metros y medio de costa. En Sitges, otra localidad tur¨ªstica de referencia en la Costa del Garraf, han aumentado los controles de la polic¨ªa local y se han realizado 321 denuncias en 25 d¨ªas, desde el inicio del confinamiento, informa Ivanna Vallesp¨ªn.

El alcalde de Salou, Pere Granados, ha hecho un llamamiento ciudadano para que los vecinos delaten a aquellos que logren saltarse los filtros policiales y traten de acomodarse en apartamentos y casas de veraneo. El primer edil del municipio alega que la vigilancia vecinal facilita la sanci¨®n de quienes se saltan el confinamiento y posibilita que los agentes ¡°los devuelvan a sus casas¡±. Un alcalde de Girona asegura que ¡°los buenos vecinos son ahora los vecinos chivatos¡±, en alusi¨®n a las personas que denuncian a los visitantes. El Ayuntamiento de Vila-seca (Tarragona) coloc¨® hace d¨ªas barreras de hormig¨®n en varios de los accesos a La Pineda, en ambos sentidos, con el fin de obligar a todos los turismos a pasar obligatoriamente por una sola avenida y facilitar el control de los agentes municipales, informa ?ngels Pi?ol.

En Torredembarra s¨ª se ha detectado un aumento de movilidad for¨¢nea. Un dispositivo de control de la polic¨ªa local con agentes de paisano en tiendas y supermercados permiti¨®, este jueves, denunciar a 34 personas que no pudieron acreditar su residencia en el municipio. El posible desembarco afecta tambi¨¦n a las zonas del interior. L¨ªdia Bargas, la alcaldesa de Prades, un pueblo monta?oso de apenas 500 habitantes y que tiene un potente gancho tur¨ªstico, ha hecho un llamamiento expl¨ªcito: ¡°Por favor, no sub¨¢is¡±. En Prades los vecinos dicen haber notado la llegada de no residentes pese a las restricciones que impone el confinamiento. Una denuncia parecida se hace desde el Priorat. En el Solson¨¨s, el Ayuntamiento de Sant Lloren? de Morunys (Lleida) ha decidido ir casa por casa en las segundas residencias para comprobar si est¨¢n habitadas y, en caso afirmativo, sancionar a sus habitantes.

El endureciendo de los controles tambi¨¦n se ha hecho realidad y con el mismo fin en la Costa Brava. En algunos de ellos, como Torroella de Montgr¨ª-l¡¯Estartit o Begur, la polic¨ªa municipal ha establecido controles en las dos v¨ªas de acceso, adem¨¢s de c¨¢maras. En otras localidades como Colera ya cerraron con vallas y precintos policiales todos los accesos y el alcalde alert¨® en redes sociales a sus vecinos que si ten¨ªan alguna urgencia supieran que ¡°todos los accesos al pueblo est¨¢n cerrados excepto la entrada principal¡±.

En El Port de la Selva, con poco m¨¢s de un millar de habitantes en el parque natural del Cap de Creus (Alt Empord¨¤), desde el principio del confinamiento, llegaron unas 300 personas al municipio. El 3 de abril, el Ayuntamiento blind¨® el pueblo y ha hecho dar media vuelta a una veintena de familias. Los controles duran las 24 horas. Esta medida se adopt¨® tras comprobar que varios turistas hab¨ªan llegado de noche. Decenas de familias francesas han conseguido llegar a sus segundas residencias en la Costa Brava norte a pesar de que desde el 17 de marzo se suprimi¨® el acuerdo Schengen de libre circulaci¨®n y fueron reinstaurados los controles fronterizos.

El grueso de los vecinos de las segundas residencias lleg¨® el primer fin de semana de mes y luego han ido entrado paulatinamente de todas las maneras imaginables: escondidos en el maletero de veh¨ªculos de personas que sal¨ªan a diario a trabajar e incluso andando por el camino de ronda. En Palam¨®s tambi¨¦n han aumentado los controles en las principales v¨ªas de acceso a la Fosca, la mayor zona residencial del municipio, para canalizar toda la entrada de veh¨ªculos por una sola carretera.

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